Dos Pasados un Destino Vegetto |Dragon Ball One Shot|

¿No hay nadie más?

¿Porqué?
Otra vez estas pesadillas, ya no puedo soportarlo más, una vez más he despertado de sobresalto y con un maldito sentimiento de impotencia, como es que alguien con mi poder siente miedo, como es que alguien que supera con inmensa diferencia los poderes de los dioses kaioshin puede sentir miedo de esta manera. Ahora sé como era el sentir de ellos antes de eliminar a Majin Boo. Esta miserable maldición recurrente durante mis sueños me alejo de mis familias, no podrían soportar el dolor de ambos sujetos dentro de mí, el dolor de haber perdido a todo lo que amaba junto con su planeta y el dolor de ser el monstruo que asesino a su propio abuelo, la culpa no me mata; pero si me tortura.
Aún me cuesta trabajo asimilar ambas personalidades; pero soy quien los entiende mejor que nadie. Soy ambos. Uno ocultaba su tristeza y su sentimiento de soledad con el orgullo y la indiferencia, y otro la olvidaba por momentos, y la reemplazaba con la fortaleza que le daban sus seres queridos. Ahora lo entiendo, sí, ese individuo llamado Goku no peleaba únicamente por proteger a los demás, él peleaba sin descanso para honrar la memoria de su abuelo, mi abuelo. Estas imágenes de dolor y sufrimiento constantemente se mezclan con las imágenes de alegría y calor, contrastando en una extraña simbiosis en mi interior. Pues el dolor y la fría soledad de Vegeta se mezclan con el amor y calor de Goku, haciéndome ver dos lados distintos de lo que los existentes llamamos vida. Recuerdos de una vida de linaje y orgullo se mezclan con los de una vida de humildad y superación, recuerdos de una vida de constante furia desatada por parte de ambos; pero provocada por razones diferentes, una parte de mí pelea por ideales de justicia y una sensación de protección a quienes ama y la otra pelea por demostrar quien es el más fuerte, por demostrar el poder que guarda la raza guerrera de los saiyayin.
Junto con el recuerdo de dos distintos tipos de padres...

|Flash back|

- Príncipe, desde que cada sayayin nace su fuerza es analizada, y a los que nacen débiles son enviados a planetas donde no haya habitantes fuertes y así puedan conquistarlos.

- Son sólo basura- Respondió el pequeño Vegeta.

- Príncipe desde tu nacimiento fuiste considerado uno de los más fuertes de nuestra raza... Posiblemente tú serás ese guerrero de las leyendas y algún día te conviertas en el legendario super sayayin.

-Así será padre...

Mientras el otro.

- ¡Eres mi Abuelito! ¡Eres mi abuelito! ¡Abuelito! ¡Abuelito! -gritaba emocionado y con lágrimas naciendo el pequeño Goku mientras corría hasta los brazos de su abuelo - Abuelito - lloraba de felicidad el niño - Te quería ver - Completo con la voz quebrada.

- Ya, ya- le calmaba el viejecito con dulzura en su voz- Tranquilo hijo no es para tanto, te has vuelto muy fuerte mi pequeño Goku, sólo te falta mejorar tu punto débil, tu cola; pero dime ¿Te dolió mucho?

- No- negó Goku mientras limpiaba sus mejillas - Te prometo que entrenaré mucho y seré el más fuerte...

|Fin Flash back|
                               ...
Ambos la misma promesa.

Ambos rivales, con diferencias contrastantes, pero el mismo deseo dentro de sus corazones, el deseo de enfrentar oponentes cada vez más fuertes, y superarlos. Es una lástima que no haya un contrincante digno de mi poder, ni siquiera Gohan en su estado místico ha conseguido siquiera agitarme, incluso en una pelea dos contra uno, si tomamos en cuenta a Gotenks como una sola persona. Estoy decepcionado de esta vida. Tanto poder, y aún no es suficiente, ese sentimiento de vacío sigue dentro de mí, ya que cada fibra de mi ser me pide a gritos un desafío. Un desafío que creo nunca llegará.

Hace ya unas semanas que me mantengo alejado de los demás en la Tierra, desde que me di cuenta que no podria controlar (por ahora) estos desagrados oníricos . Quedándome con varias dudas de lo que sucede en su mundo y siendo sólo leves destellos de información los que puedo conseguir cuando visitó al Supremo Kaioshin de hace quince generaciones, quien me auguró el nacimiento de mi nieta Pan hace ya unas semanas atras, obsequiandome una informacion que ni siquiera Gohan posee. Es agradable hablar con ese anciano, pues es el quien me explica a detalle sobre lo que soy, tal vez por qué el es dos personas al mismo tiempo también. En mi memoria vive guardado una contradicción (una de tantas) Que se reproduce constantemente dentro de mi cabeza. Dos guerreros enardecidos frente a frente, la energía fluye a través de sus cuerpos manifestándose en una dorada aura al rededor de sus titanicos cuerpos, desprendiendo rayos eléctricos de los mismos, marcando una pauta dentro del ambiente tranquilo de un desierto. Clavando sus ojos uno en el otro sin perder un sólo segundo de atenta vigilancia, marcando en el azul de su iris la imagen de su respectivo oponente. Dando una discreta sonrisa de emoción al saber lo que vendrá a continuación. Ignorando las heridas que ya se marcan en sus cuerpos después de que el primer round terminará.

- Será tu fin Kakaroto

Una fría y suave brisa choca contra mi cara, el recuerdo termina con descarada intriga, dejando mi mente en blanco mientras las aguas del tranquilo lago frente a mí reflejan las majestuosas estrellas del firmamento nocturno que coronan el Planeta Supremo.

El aprendizaje de los dioses por ahora creo que ha sido suficiente, mañana por la mañana regresare a casa, tal vez Bulma, Chichi y los niños se preocupen por mí... Además que ahora que estoy tan lejos del reino terrenal mi alma aún con tanta confusión desde mi nacimiento, sabe lo que quiere, mi poder al lado de mi familia no significa nada. Es un hecho.
Tengo un buen pretexto, después de todo el anciano Kaioshin me ha dicho que mañana es el natalicio número treinta y ocho de mi esposa Bulma<<suspiro>>... será un buen pretexto. Mañana me teletransportaré hasta ellos, ya ansío verles de nuevo, miserables insectos.
Sin embargo eso llena un vacío en mi corazón; pero el otro parece que nunca será satisfecho, ¿En verdad soy el ser más poderoso de la creación?¿En serio yo soy el límite de poder al que un existente puede aspirar? ¿No hay nada más allá de mí? Bah, creo que son preguntas que nunca tendrán respuesta al igual que tal vez yo nunca tenga un verdadero desafío ante mí.

                                ....

- ¿Eh?... ¿Qué es lo que esta pasando ahí afuera? - Se pregunto Veggeto mientras se levantaba de su cama- Será mejor que salga- carraspeo seguido de sonreír con malicia-Aunque dudo que un pobre diablo se atreva a venir aquí buscando problemas...

Un momento, ÉL es... Imposible, no puede ser cierto, ahora lo recuerdo...¿Por qué demonios no puedo sentir su ki?

- Hola, me parece que tú eres el único sayayin de raza pura en este planeta...

¿Por qué me pregunta eso? ¿Qué ha venido a hacer aquí?

-... bien seré directo contigo, ¿Sabes algo sobre un dios super sayayin?

                                ...