Se quedaron por algunos minutos quietos en la misma posición, tratando recobrar las sensaciones, “no puedo sentir mis piernas” advirtió Olivia riendo incomoda, Elliot salio de ella con cuidado, “¿estas bien?”, ella asintió, en realidad estaba adolorida, pero no le importaba, Elliot la ayudo a bajar del mueble de la cocina, “mierda… creo que mañana no voy a poder caminar”, su cuerpo estaba adolorida, sobre todo en los lugares donde Elliot había estado un par de veces, “¿quieres que te lleve a la habitación”, ella movió la cabeza, ella quería una ronda de sexo extremo, ahora tenia que simplemente aguantar, se movió con cuidado, sus muslos rozaban y generaban una pizca de dolor, de seguro mañana iba a ser peor. “El….” Ella quería decirle que ella nunca había echo eso antes, “lo sé nena…”, él sabía que era el primero en hacerle sexo oral, “fue increíble… gracias por dejarme” le respondió , en realidad si él le hubiera preguntado la respuesta hubiera sido un rotundo no, pero lo amaba tanto que ella aceptaría cualquier cosa que él le pidiera hacer en la cama, “El… fue increíble para mi también”, ella era sincera, las emociones de intimidad que sintió cuando Elliot estaba con ella eran casi abrumadoras, “dios… te amo tanto Elliot”, ella se acomodo mas cerca de él para quedarse abrazados, descansaron un poco sin hablar.
“Tranquila nena… Kathy va a traer al bebé en dos horas mas, puedes descansar un poco” ambos se relajaron en la comodidad de los brazos del otro, completamente desnudos y satisfechos, Olivia estaba agotada y en cosa de segundos se quedo dormida, Elliot puso la alarma del reloj, para alcanzar a vestirse una vez que fuera hora de que Kathy llegara con Ben.
Dos horas más tardes Elliot estaba duchado y vestido, no quería despertar a Olivia, después de todo lo que paso su cuerpo necesitaba un poco de descanso, se levanto del sofá al escuchar el timbre, no quería que Olivia despertara.
“Hola… ¿como se porto este hombrecito?”, le pregunto a Kathy mientras ella ingresaba a la sala, pocas veces ha estado en la casa de Olivia, a pesar de que tenían una muy buena relación, “creo que extrañaba a sus padres, pero se porto bien”, miro buscando “¿Y Olivia?”, pregunto Kathy, “en la habitación, esta durmiendo…tuvimos un caso duro y estaba agotada”, sin mencionar las horas de sexo frenético que tuvimos, pensó Elliot, trato de disimular la sonrisa en su rostro, era bastante seguro de que Kathy la notó, “me tengo que ir…le das saludos de mi parte”, beso la frente de Ben y se marcho.
“creo que escuche la voz de Kathy”, dijo Olivia entrando en la sala de estar, ahogando un bostezo, su cuerpo aun le exigía un poco mas de descanso, “se tenía que ir, dejo a Eli con los gemelos para no sacarlo en la noche”, Ben estaba estirando los brazos para que Liv lo tomara, “¿tiene hambre?”, no estaba muy segura de que hora era, “creo que si”, Ben estiro mas los bracitos para que ella lo tomara y se retorcía en los brazos de Elliot, “cariño… mamá esta un poco sucia… por culpa de papá” se rió al ver la cara de Elliot, “me doy una ducha y lo vengo a alimentar”, dijo ella, necesitaba urgente una ducha.
“trata de poner algo mas de ropa al salir de la ducha…”, Elliot le advirtió riendo, estaba completamente seguro de que Liv no iba a querer nada mas con él por un par de días, bueno a su ritmo en realidad eran solo un par de días lo que lograban estar sin hacer el amor, ella hizo su camino fuera de la vista de Elliot contorneando sus caderas sutilmente, “Hijo… un día tu mamá me va a matar”.
Olivia despertó en la mañana sintiendo como si hubiera dormido solo un par de horas, su cuerpo estaba cansado y adolorido de los encuentros con Elliot, después de cuatro horas de sexo perdió la cuenta el numero de orgasmos que Elliot le dio, se movió un poco, Elliot no estaba a su lado, se tenía que recordar cambiar las sabanas lo antes posible.
Cuando la bruma del sueño desapareció su sentido del olfato estaba despierto y noto que había un aroma característico en el ambiente, Elliot estaba haciendo el desayuno, se levanto con cuidado, su cuerpo protestando de inmediato, a pesar del dolor ella sonrío, solo recordar las cosas que hicieron su sonrisa se hacía mas grande aún, se vistió con ropa cómoda y salio al encuentro de sus amores. “buenos días amor” beso a Elliot en los labios, “y buenos días a ti también cariño”, Ben estaba sentado en su silla pendiente de los movimientos a su alrededor, “Ben me esta ayudando a hacer el desayuno a mamá…queremos regalonearla por todas las cosas buenas que hace por nosotros”, dijo Elliot devolviéndole el beso.
