Shinda Neko

El trato de navidad

Era ya un día antes de navidad Tom se tomo la libertad de levantar un pequeña lapida en el campo para su mujer y sus hijos y para poner fin a su carrera por su parte fue al granero, tomo un poco de valor para poder abrir la puerta, esperaba lo peor, no había nada...el tiempo había borrado toda evidencia en que su inocencia pudo haber sido probada, a pesar de eso no se sintió tan bien después de eso, no hallando otra cosa que hacer decidió hacer una ultima cosa, debido a la fecha y su nueva forma de celebrarla fue al bosque por un pino y algo de carne para la cena, a pesar de solo ser uno aun tenia compañía y quizás así aprendía un par de cosas...

El bosque estaba cubierto de nieve pero debido a su nueva forma no había muchos inconvenientes, en el transcurso de los pocos días que llevaban "juntos" por así decirlo descubrieron que podían evidentemente hablar entre ellos, que el cambio de cuerpo supuso que ninguno de los 2 se quedara con una forma física única en el cuerpo, por lo que cada cierto tiempo debían cambiar debido al dolor de cabeza que les ocasionaba, ademas de controlar mejor las funciones del cuerpo como los ojos, las garras, el sentido del equilibrio con la cola, controlar su apetito con suficiente carne, eso era otra cosa que resultaba un problema, la carne de animales no los saciaba lo suficiente, y tenían pequeños apagones en el día y dormían la mayoría del tiempo, notaron que en ocasiones su sentido de la audición les fallaba debido a lo inestable del mareo por no comer bien, pero se calmaba si masticaban algo de moras, por eso llevan un poco por cada viaje que hacen lejos de la casa...lo poco que llevaban así les daba mucha unión y fortaleza tanto como si fueran uno solo.

Estaban cortando uno que Tom señalo como indicado a pesar que cuando cambiaban notaban que el cuerpo de Lily era un poco mas bajo que el de Tom, luego de arrastrarlo hasta la casa, comenzó a decorar la casa con algunas velas, ya que una chica siempre sabrá mas de decoración que un hombre, eso paso casi todo el día...luego de una limpia y una arreglada a las puertas y ventanas, con un reparación express del techo, cambio con Tom para colocar el árbol y ponerse a cocinar el caldo...

Pero, por ser época de navidad no podían aguantar una noche así, aunque a Tom le desagradaba la idea, Lily insistió en que era lo necesario, no quedando de otra bajaron al bosque primero, para algunos ingredientes y un poco de moras...

Ya en la noche, decidieron ir al poblado del otro lado de la colina, Dublin en sus inicios no era mucho pero con algo de suerte conseguirían algo, a pesar del frió y la temporada había gente en las casas, esto era lo que le desagradaba a Tom, no podía sino imaginase a su familia con cada casa que pasaban, al fin se detuvieron en una casa, era pobre y sucia en ella solo habían 2 personas una mujer y su hijo pequeño acurrucados en una esquina temblando de frió , a pesar del morbo que le causaba debían hacerlo o el dolor no les pasaría nunca, era ellos o aquellos...entonces algo paso, ellos estaban escondidos detrás de unos arboles y vieron como unas extrañas personas llegaron hasta la casa, venían vestidos de rojo con mascaras de piel, entraron a la casa y vieron que la madre y el niño estaban amarrados al suelo, se acercaron mas, lo suficiente para oír entre el viento y la nieve, oyeron solo los gritos de la madre pidiendo que soltaran al niño, esto fue todo para Lily y entro a la casa tirando abajo la puerta.

Miraron como la madre era apuñalada y el pequeño era metido a un saco y lo empezaban a azotar contra el suelo, Lily saco el martillo y comenzó por darle al que tenia a la madre arrancándole de la quijada para arriba de un golpe y al que había azotado al niño lo atravesó Tom con la guadaña con tanta fuerza que lo clavo en la pared dándole otras puñaladas mas, luego se dedico a por los otros Lily los machaco con sus dientes y Tom con el martillo les rompió los huesos y la boca, luego de haberlos masacrado fueron por la mujer y el niño, la madre estaba muerta debido al desangramiento, el pequeño aun se podía salvar lo llevaron corriendo hasta la iglesia, el cura que milagrosamente abrió en medio de la tormenta casi se desmalla al ver a Lily con la boca llena de sangre, le dijo que lo cuidara sin importar que, al ser un hombre de fe, se compadeció del niño y cerro la puerta sin esperar mas.