La Cita

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****Dylan****

Salí de la casa y ahí estaba el estaba recostado en la puerta del conductor.

Tenia una camiseta blanca y suelta por encima traía una camisa de cuadros verdes, rojos y azules oscuros. Tenia un blue yin holgado y unos converse negros. Su pelo lo traía igual aunque se le veía un tris mas corto así que pensé que le acababan de cortar el pelo, tenia gel y a metros se le olía la loción que a propósito olía delicioso. Que rabia ellos se echan un poquito de loción y se le huele a metros y le dura todo el día y uno de mujer se echa medio tarro de loción y no le vuele hasta que alguien se le acerca y le dura un momentico. De todos modos amo la loción de un hombre.

- Hola preciosa- Dijo Dylan, en un tono algo tímido pero a la vez directo y sin miedo.

- Hola- Dije yo, sin mucha confianza. Yo puedo cambiar mucho pero en lo tímida no me digan que cambie porque no lo haré es mi forma de ser, nada que hacer.

- ¿Por que tan tímida bebe? Yo no muerdo- Ahora si no se le notaba tímido lo dijo bien directo.

- Jajaja nada, ¿ya nos vamos?- Dije avanzando hacia donde estaba el.

- Claro pero no me vas a dar un beso- Este chico es muy directo.

- Dámelo tu- Dije volteando un poco mi cara para que me diera un beso en la mejilla.

- Jajaja yo lo pedí primero- Dijo haciendo lo mismo que yo, me toco dárselo y cuando se lo iba a dar se voltio haciendo que se lo diera en la boca. Solo fue un beso rápido. Un chispu ( para los que no saben son eso que se dan de una, sin mordisqueada, ni lengua. No se si me hago entender)
Me puse bien roja eso lo se. Cuando termino el beso sorpresa me dijo:

- Claro vamos- Dijo yendo a abrir la puerta del copiloto.
Yo entre al carro y me cerro la puerta el al momentico se monto en el asiento del conductor.

- ¿Y adonde vamos?- Dije nerviosa

- Sorpresa- Dijo con una risita mala ya que sabia que me estaba torturando.

- Ou dimee plis- Dije en un tono insistente.

- Jajaja ok pero primero- Dijo parando el carro en una partesita de la calle.

- ¿Ya llegamos?- Dije ansiosa.

- Jajaja no, pero tu hasta acá podrás ver- Dijo en un tono malvado y sacando algo de su asiento.

- Volteate- Dijo el.

-¿Para?- Dije nerviosa.

- Te voy a poner una pañoleta en lo ojos para que no veas para donde vamos y sea una sorpresa- Dijo Dylan.

- Ok- Me puse de espaldas desanimada.

- No te pongas triste de todos modos ya casi llegamos- Dijo poniéndome la pañoleta en los ojos, me puso de nuevo el cinturón de seguridad y arranco otra vez el carro.

En el camino me hacia preguntas como ¿Y en que trabaja tu madre y tu padre?, ¿Te llevas bien con ellos?, ¿Tienes hermanos?, ¿Tienes mascotas?, ¿En donde has vivido?, ¿Adonde has viajado? Etc etc etc. Yo respondía a todas honestamente y le volvía a hacer la misma pregunta a el.

Dylan vive con sus padres, y su hermana menor con la cual Dylan es mayor que ella por tres años, no tiene mascotas, nació en Estados Unidos y se mudo para acá cuando tenia 4 años, después de haber vivido en Canadá dos años y allí nació su hermana. Casi siempre en las vacaciones se van para Estados Unidos, su madre no trabaja y su padre es transportador, tiene una relación de mucha confianza con su madre.

No se cuanto tiempo paso desde que me vendaron los ojos. Como estaba tan nerviosa podría decir que medio siglo, pero como soy mas exagerada que quien pregunte:

- ¿Cuanto tiempo ha pasado desde que me vendaste los ojos?

- Como quince minutos- Dijo el- Por?

- Nada curiosidad- Dije.

Por eso no es muy aconsejable que confíen en mi ya que si estoy muy nerviosa puedo asegurar que ha pasado una hora cuando en realidad solo a pasado diez minutos.

- Llegamos- Dijo Dylan

- Por fiin- Dije quitándome la pañoleta.

- Hey llegamos nada mas pero tu pañoleta debe seguir ahí- Dijo volviendo a amarrar la pañoleta. Rayos casi lo logro y lo peor fue que no alcance a ver.

Sentí cuando cerro la puerta supuse que ya venia a abrirme la mía y así fue me abrió la mi puerta.

- Yo te voy a guiar- Dijo cogiendo me de la mano para no irme a caer.

Me guió no se cuanto tiempo en unas casi me caigo jajaja, supe que subimos en el ascensor, hací que supuse que estábamos en un centro comercial.

- Listo preciosa- Dijo quitándome la pañoleta.

Abrí los ojos con cuidado. Cuando logre enfocar bien me di cuenta que estábamos en la sala de cine.

- ¿Te gusta divergente?- Dijo Dylan. - Pues espero que si por que hoy la vamos a ver.- Yo reí

Nos ubicamos en la ultima fila y estaba muy sola la fila, durante toda la película el me intentaba abrazar. Como en toda película que bostezan y estiran sus brazos hasta abrazarlo a uno por el hombro eso mismo hizo el. Cuando se acabo la película no sabia si era de noche, día, Tierra, Marte, 2016 o 2033.

Eran las 7:30 PM. Fuimos a comer comida mexicana. Yo me pedí un burrito y unos nachos u el se pidió un taco con unos nachos.

- ¿Y que me cuentas de tu vida?- Dijo Dylan

- Pues me podría demorar- Dije yo.

- Pues- Dijo mirando su reloj- Son las ocho, el centro comercial lo cierran a las diez PM y tu casa o mi casa no tiene hora de cerrada, es viernes. Al parecer tenemos tiempo.

- Jajajaja ok- Dije yo.

Le conté el resumen de mi vida, el me contó la suya. Después de comer ya iban a cerrar el centro comercial. Así que fuimos a un parque a seguir hablando no nos dio nada de susto y nos dieron hasta las 12:30 AM. Al ver la hora nos atacamos de la risa.

- Me van a matar- dijo Dylan.

- A mi igual- dije riendome.

- Pero valió la pena.

- Jajaja estoy de acuerdo.

- Mejor voy y te dejo a tu casa- dijo Dylan, nos fuimos caminando en dirección hacia el carro. Al llegar a mi casa me dice:

- Hey la pase muy bien contigo.

- Yo igual.

- Dame tu numero- Dijo sacando su celular, yo se lo di.

- Entonces aquí nos despedimos.

- Si pero si me van a matar que al menos muera feliz- dijo volteando la cara para un beso yo se lo di pero otra vez fue un chispu, ya no debo confiar en sus besos en la mejilla.

- Jaja bye, ten cuidado- Dije yo bajando me del carro y entrando a mi casa, cuando Dylan vio que entre a la casa arranco.

En mi casa nadie estaba solo Rosita y estaba dormida. Así que fui a mi habitación, me tire a la cama y caí en un profundo sueño





Esta Vez Es Para SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora