Conoces ese sentimiento de que lo que acaba de pasar fue solo tu imaginación, nada más que sólo tu mente elaborando hechos absurdos, luego te das cuenta que SI es real y que el siguiente paso es enfrentarlo, eso produce miedo, tristeza y por sobre todo inseguridad.
Eso es exactamente lo que en un segundo me paso mientras estaba fuera de mi casa. Tomé un poco de aire y con el poco de valor que me quedaba volví entrar.
Elena se veía confundida.
- ¿Qué acaba de pasar? - me preguntó a penas entré.
-Nada sólo necesitaba un poco de aire fresco. -
- Si no quieres contarme hoy está bien, podemos ver una película ahora y comer galletas -
- No, es ahora o nunca, porque otro día no tendré ni el valor ni las ganas de hacerlo -
- Bueno entonces comienza -
El nudo de mi garganta vuelve a formarse, más fuerte que nunca. Siento la necesidad de salir, requiere toda mi fuerza de voluntad quedarme sentada en este sillón
- Como ya sabes, mi papá y yo estuvimos en un accidente de tránsito - siento un poco de alivio, aunque quede mucho por explicar aún.
- Si, Emilia todo el colegio sabe, lo que nadie sabe es cómo estas tú, últimamente has evitado al máximo el contacto con los demás -
- Pero Elena por favor entiende no estoy de humor para que me anden preguntando, además para mi es más fácil vivir esto sola -
- Otra cosa que nadie sabe es que fue mi culpa - dije con una voz casi imperceptible.
Nos quedamos en silencio por un rato, cuando finalmente Elena rompe el hielo, se para del sillón y me abraza, siento cómo todo se derrumba, mis ojos se llenan de lágrimas, empiezo a llorar desconsoladamente, todo a mi alrededor hace crack
- No puedes culparte de esta forma, estás cargando cada día una mochila llena de piedras, a pesar de que sabes que podrías repartir éstas entre la gente que te rodean y quiere mucho, optas por llevar este peso sola -
- Ya lo sé, pero es mi forma de funcionar, desde que tengo memoria así ha sido y creeme no es fácil cambiar de un día para otro. -
- Linda, dos cabezas piensan mejor que una, a si que te ofrezco mi ayuda, quiero acompañarte, escucharte y aconsejarte - me toma las manos - nunca más te vas a sentir sola, voy a ayudarte a aliviar ese nudo de tu garganta que tanto te molesta.
Respiré con alivio.
- Muchas gracias -
- Lo primero que tienes que hacer es contarme lo que pasó, y porqué te sientes culpable.
Asentí y comencé a contarle.
- Era viernes por la tarde, íbamos en el auto camino a Santiago, para pasar tiempo papá e hija. Como el viaje es largo quise poner música, conecté mi celular a la radio y puse mis canciones favoritas, que eran bastante energéticas. Luego de que pasaron a como tres canciones papá me pidió si podía poner algo más tranquilo, yo le dije que no porque estaba aburrida y aún quedaba demasiado viaje, por lo que tuvo que cambiarla sólo, yo la volví a cambiar y él también, después de un rato haciendo esto varias veces, papá se desconcentró, fue en ese momento en el que el otro auto nos chocó y se produjo el accidente. - Nuevamente lágrimas corren por mis mejillas, trato de contenerme.
- Llora, te hace bien botar todo - dice Elena con la voz más dulce que he escuchado - te has estado amargando todo este tiempo por algo que simplemente pasó y no fue culpa de nadie. Algunas veces estas cosas tienen que pasar para que aprendamos algo, ya sea a valorar lo que tenemos, a comprender la importancia de los que tenemos a nuestro lado o para algo que vas descubriendo en el camino, lo importante es que estas cosas las cuentes, porque muchas veces sólo vemos la nube negra y no podemos ver lo que hay más allá.
En ese momento escucho que la puerta de entrada se abre y entra Benja con una caja, al verme corre para mostrarme sus nuevas zapatillas.
- Mira Emi con estas zapatillas voy a ser el más rápido del curso - dice lleno de alegría - ¿Dónde está el computador? Quiero mostrárselas al papá antes de que me enseñe matemáticas.
- Entonces anda rápido, porque no vas a alcanzar - grita mamá desde la cocina.
- El computador está en tu escritorio, si papá pregunta por mí dile que tengo que estudiar y que mañana lo llamo.
Benja sube corriendo la escalera y yo directo a lavarme la cara, tengo los ojos muy hinchados, por suerte nadie me dijo nada, no me gusta que me vean así
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Últimas palabras [#Wattys 2016]
Teen FictionEmilia, una adolescente vive sus monotonos días con tristeza y culpa, tiene una pena guardada, que marca cada cosa que dice, hace o siente. Todos saben lo que le pasa, pero nadie entiende como ayudarla