PRÓLOGO

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Amanda

-esta bien que comas tanto susy en el trabajo?- me pregunta mi amiga, Cris, aunque mas que una amiga es mi otra mitad. La miro como si lo que hubiese dicho fuera una completa estupidez.

-claro que esta bien, sino como podría mantenerme despierta- digo como si fuera lo mas natural del mundo.

Ella me ve como si estuviese loca, claro, quien no me ve así es la pregunta. Pues debería ser normal que una chica de 24 años y soltera coma todas las susys que se le de la gana. Pero no hay que olvidar el pirulin, aunque esta muy caro, si no fuera por el enano pitufo que tengo como mejor amiga no tuviera como alimentar mi obsección.

-que harás cuando ya no te quede ninguno?- uff, tiene razón.

-Doctora Martines, por favor Preséntese a la sala de Emergencia. Doctora Martines, por favor Preséntese..- sonrió al escuchar el llamado, miro a mi amiga con una sonrisa enorme en mi cara.

-uff, por tu sonrisa diría que estas muuuy, pero muuuy emocionada- niega con la cabeza mientras sonríe y se que ha entendido. No me digo nada solo salgo corriendo a donde se me ha llamado.

Cuando llego todo pasa muy rápido. Ingresado por herida de bala, afortunadamente la bala no perforo ningún sitio vital pero si nos dio mucho trabajo para sacarla. Por la magnitud de la hería puedo deducir que se quedara aquí por un tiempo.

Suspiro profundo cuando salgo de la sala y con una sonrisa enorme saco una susy del bolsillo. En serio amo estas cosas. Me encamino a mi consultorio cuando...

-ey, Doc. Seguro que no quieres ya sabes... Divertirte?- ruedo los ojos al escuchar la propuesta de siempre de Marco. No es que sea taaan feo... Pero no, no quiero salir con el a "divertirme".

-mira Marco hagamos algo, deja de molestarme y yo te ignorare- le digo con una sonrisa falsa en mi rostro, en realidad le he rechazado mas veces de las que puedo contar con todos mis dedos. En realidad es un pesado.

-pero linda, solo tienes que dejarte llevar..-

-mira dejalo así y no fastidies mas- lo interrumpo antes de que siga hablando y sin más me giro y sigo mi camino, ignorando su mirada en mi espalda, o eso espero.

Cuando llego a mi consultorio el tiempo pasa volando y ya es hora de ir a mi casa. Cuando llego veo el espacio que comparto con mi amiga y suspiro por saber que ella esta en casa.

-ya llegueeee!!- grito sabiendo que llegara corriendo en 3, 2, 1...

-cuchuuuu!!- sale disparada de su cuarto y se que quiere saber que paso hoy en mi trabajo.

Le cuento todo y ella me cuenta que la filmación fue un asco, que los demás no colaboran y que tiene ganas de dormir y no despertar y entre charla y charla se nos va las horas.

°°°°°°°

Al día siguiente llego a mi consultorio y me pongo a trabajar. Debería de salir mas seguido, no se, a la discoteca, a una fiesta o quizás solo salir por hay con Cris. Tengo tiempisimo que no bailo, como extraño bailar salsa, merengue, de todo y oh claro, BACHATA.

No se cuanto tiempo ha pasado hasta que Julia, mi secretaria, entra y me dice que estoy a cargo de la revisión del paciente ingresado ayer por herida de bala. Suspiro sabiendo que esto sera rutina igual que otras veces, llego a la habitación y en cuanto entro me quedo paralizada.

Sabia que el paciente era un hombre, pero no había notado como era. Cabello negro, piel blanca ligeramente bronceada, y una cara y un cuerpo que parece que se los hubiera robado a un actor de cine. Me le quedo viendo porque se que esta dormido, debe tener como 26 años... pero recuerdo que estoy en mi trabajo, en que el es mi paciente y que parezco una completa estúpida.

Cuando el abre los ojos y me mira, si antes me quede paralizada ahora estoy seguro a que necesito oxígeno para mi torpe... Ay!! Ya ni se lo que pienso. Me aclaro la garganta.

-buenos días, como te sientes?- le sonrió de forma amable, el no responde, solo sonríe de lado y ay! Dios mio!! Que alguien haga que se detenga!!.

Hago la revisión y siento su mirada todo el tiempo, definitivamente soy de gelatina. Cuando termino y salgo me encuentro con Cris, que vino a traer mi almuerzo. Me ve de arriba a bajo y entrecierra los ojos mirándome fijamente.

-y ahora que locura se le ocurrió a la Doctora?- pregunta con sarcasmo y yo desvío la mirada con una sonrisa en mis labios.

Una Doctora Con Muchas LocurasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora