Capitulo 21

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Abrí la puerta con mucho cuidado para evitar que mi madre se despertará, me saqué los zapatos y entré a la casa, coloque la mochila en un cuarto que se encontraba debajo de las escaleras, ese cuarto lo habían hecho para guardar algunas cosas del jardín pero después de aquel suceso con mi prima, mis padres sacaron todo lo que había dentro y yo me apodere de el, soy la única que tiene llaves del pequeño cuarto, cerré el cuarto con llave y escuche un ruido proveniente de la cocina, camine con mucho cuidado, cada vez que me acercaba lograba escuchar el palpitar de mi corazón cada vez más fuerte, me asome por la pequeña ventana de la puerta
-espero que no sea nada malo-dijo Bob nervioso, me asuste con tal comentario ya que desde hace un largo rato no me habían hablado
-¿estas bien?-pregunto Gabbe algo preocupada
-si descuida, sólo fue un pequeño reflejo-dije,
-vamos abre la puerta y averigüemos que es lo que está pasando-dijo Richard no muy convencido
Abrí la puerta y entre, revise por ambos lados para evitar algún ataque sorpresa, vi que la estufa estaba encendida con una olla espres sobre ella, seguí caminado hacia la otra habitación que era el comedor, vi a alguien sentado en el comedor pero no lograba distinguir de quién se trataba, camine acercándome más y toqué su hombro
-hola amor-dijo pero no lograba distinguir la voz
-hola-dije algo nerviosa
-¿te ha tratado bien tu mamá?-pregunto y mi corazón se aceleró al darme cuenta que aquella persona sentada en el oscuro comedor era mi tía y en brazos llevaba un pequeño bebe pero ese no es de Riley ya que todavía falta un montón me pregunto de quién podrá ser, además es más pequeño de lo común y duerme tan plácidamente entre varias cobijas y se ve tan frágil y débil como un pequeño muñeco de porcelana
-si-conteste a su pregunta
-te preguntarás ¿de quién es el bebe que traigo en brazos,verdad?-pregunto parándose de la silla, asentí
-bueno no tengo ni la menor idea-dijo arrullando lo con mucho cuidado
-¿entontes?-pregunte fríamente
-estaba en la puerta con un pequeño papelito que decía "por favor cuidelo bien, se llama Scott"y algunas otras cosas más-dijo mirando tiernamente al bebe
-acaso cree que mi madre se hará cargo de ese bebe-dije con un tono burlón
-claro que lo va a cuidar después de todo ella quería otro hijo pero tu padre no quiso-camino hacia la sala-despierta a tu mamá-dijo un poco molesta.
Subí las escaleras hasta la recámara de mi madre, abrí la puerta tratando de no hacer ruido, me sentía en la cama y moví cuidadosamente a mi madre causándole un pequeño respingo
-¿pasa algo?- pregunto algo adormilada
-mi tía está abajo y quiere hablar contigo-dije casi susurrando
-gracias ahorita bajo-dijo levantándose con mucho trabajo, salí de la recámara y me fui directo hacia mi cuarto, deje la puerta abierta para escuchar lo que platicaban
-¿qué es lo que pasa hermana?-dijo mi madre bajando las escaleras
-ve el pequeño tesoro que dejaron en tu puerta-dijo con un tono calmado y pacífico,
-que hermoso, ¿puedo?-pregunto común tono de voz que hacia tiempo que no lo escuchaba
-¿lo vas a cuidar?-pregunto mi tía algo nerviosa
-claro que si, creo que este pequeñín ayudara a reforzar la relación entre Mish y yo-dijo feliz, jamás había escuchado hablar a mi madre así, siempre hablaba con un tono demasiado frío pero esta vez su voz escucha tan cálida que me causa escalofríos, cerré la puerta y me acosté
-creen que puede criar a otro niño-pregunto Bob
-todo es posible-dijo Gabbe animada
-creo que no volveremos dormir por la culpa de aquel bebé-dijo Richard muy molesto
-hay no seas un chillón, después de todo hay veces que no logra conciliar el sueño-dijo Bob, escuche que alguien subía las escaleras, rápido me acomode y me hice la dormida
-que  pacífico duermes me hace recordar cuando sólo eras una pequeña bebé, tan indefensa y tierna-se sentó en la cama-espero que logremos tener una relación normal como las demás familias, me esforzare para que tengas una buena vida-me besó la frente-duerme y sueña bonito-dijo mi madre cerró la puerta con cuidado, jamás me había sentido tan bien además mi madre jamás había hecho algo igual
-sólo quiere ganar tu confianza y después delatarte-dijo Bob
-eso es el amor de una madre sacrificarse por sus hijos-dijo Gabbe suspirando
-no lo creo, ella siempre nos trato como extraños viviendo en una misma casa-dijo Richard
-aún te queda mucho por aprender-dijo Bob. Poco a poco mis ojos comenzaron a cerrarse hasta que dar dormida profundamente.

Mundo cerrado heridas abiertas *terminada* (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora