Capitulo 26

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Me levanté con los ojos hinchados, me dolía todo el cuerpo, guarde la carta de Cameron en mi pequeña caja de navajas, revise le reloj y apenas eran 5 de la mañana, camine hacia mi ropero y saqué unos jeans negros y una playera azul marino con unos dibujos en ella, camine hacia el baño arrastrando los pies, entré y fui directamente al lavabo, abrí la llave y con mis dos manos juntas me heché agua sobre mi cara, al levantar la vista, en el espejo vi una sombra detrás mío, voltee a ver pero no había nada, regrese la mirada al espejo, al ver de nuevo vi a una persona
-¿Cameron?-pregunte algo confundida, pero no hubo ninguna repuesta
-¿Cameron eres tu?-dije volteando y al verlo me abalance hacia sus brazos, me comezón a brotar lágrimas
-tranquila todo esta bien-dijo con su voz tranquila.
Su abrazo no se sentía como los de antes, que eran cálidos y me sentía protegida pero esta vez era muy frío y seco como si no existiera alguna emoción, me separe de el
-¿te encuentras bien?-pregunte confundida
-el no es real Mish-dijo Gabbe con un tono serio
-claro que lo es-dije casi gritando
-aún sigues hablando con esas voces-dijo Cameron ladeando la cabeza
-así es, jamás dejare de hablarles-dije limpiando me las lágrimas, de pronto Cameron desapareció.
Salí del baño y baje hacia la cocina donde mi madre se encontraba cocinando
-buenos días-dije sentándome en el comedor
-¿no se ha levantado Scott?-preguntó mientras bajaba la flama de la estufa
-no-dije en seco, mi madre se me acerco y me abrazó
-¿por que no te quedas en casa?-suspiro-creo que te haría bien un tiempo a solas para que puedas asimilar la muerte de tu amigo-dijo soltándome de su abrazo
-gracias mamá-dije mientras un lágrima caía sobre mi mejilla, mi madre coloco un plato con huevos y pan tostado frente mío, rápidamente comencé a comer tratando de que no se me desbordaran las lágrimas.
Mi madre tomó sus cosas, la acompañe hasta la puerta.
-deje un bote con leche y un poco de papilla para Scott-se puso una bufanda-asegúrate que se termine todo-dijo toda apresurada y me dio un beso en la frente.
Cerré la puerta y me acosté en el sofá, encendí la televisión, cambiaba y cambiaba los canales sin saber que ver.
-pon criminal minds-dijo Gabbe feliz
-no mejor HistoryChannel-dijo Bob refutando la idea de Gabbe.
-mejor algún concierto de heavy metal o clásica-dijo Richard, los tres últimamente se pelean por todo y siempre terminaban causándome una jaqueca realmente dolorosa; apague la televisión y cerré los ojos poco a poco iba quedando dormida hasta que sentí una mano acariciando mi cabello, abrí los ojos y ahí estaba de nuevo Cameron
sentado, lo mire y su cabello castaño estaba algo alborotado y sus ojos tenían un brillo del que no podía quitar la vista, me miro
-duerme necesitas descansar un poco-dijo sin dejar de acariciar mi cabello, poco a poco fui quedando dormida.
Una luz blanca comenzó aparecer me lastimaba muchos los ojos, los cubrí con ambas manos, al quitarlas vi a mi padre sentado en el sillón con un regalo y un suéter navideño
-ven hija acércate es para ti-dijo con un tono dulce, rápidamente corrí hacia el y tome el regalo, cambió el lugar y vi el cuerpo de Cameron lleno de sangre y yo portaba un cuchillo que goteaba sangre "no no puede ser posible"pensaba y en eso llegaron varios maestros y alumnos
-asesina, deberías haberte suicidado-gritaban frenéticamente, me senté en el suelo y presionaba la cabeza
-CALLENSE-dije gritando
Me levanté con el pulso acelerado y la respiración agitada
-tranquila bebe, aquí estoy-dijo Cameron con su voz calmada y dulce, me senté en el sillón y Cameron paso su brazo por mis hombros y lo mire a los ojos
-nunca te alejes de mi lado -dije con lágrimas en los ojos, Cameron limpió algunas lágrimas, agarré su rostro y lo acerque pero había desaparecido nuevamente.
Sonó mi celular y me limpie las lágrimas, respire hondo y conteste
-hola?-pregunte con la voz algo temblorosa
"¿Estas bien?"se escucho al otro lado de la línea
-si lo estoy-dije
"¿No piensas venir al colegio?" pregunto Jackson algo molesto
-no me siento muy bien como para ver la cara de esos desgraciados-dije mientras sentía que la sangre me hervía
"Pero tienes que venir" dijo casi gritando
-no quiero ir y punto-dije colgando el teléfono; se me hacia extraño de que Scott no se levantará así que revise le reloj y apenas eran las 6 de la mañana, subí la escaleras hacia mi cuarto, entré y solté un grito ahogado.
-shhh...-me tapó la boca-tranquila soy yo bebe-dijo Cameron, mis lágrimas comenzaron a brotara de mis ojos, Cameron me abrazo con mucha fuerza
-Tranquila y ya no llores-dijo acariciando mi cabello, lo separe un poco de mi y no podía decir nada, no se que me pasaba, estaba completamente bloqueada con un gran nudo en la garganta, lentamente me fui sentando en la cama y Cameron se sentó justo a lado mío.
-¿Cameron?-fue lo único que logró salir de mi boca, el me miro y sonrió
-creo que deberías dormir-dijo dándome un beso en la frente, se levantó de la cama y me ayudo a recostarme en la cama.
-estamos soñando-dijo Richard frustrado
-shhhhh-lo cayó Bob

Mundo cerrado heridas abiertas *terminada* (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora