La Segunda Vida Es Mejor ||Terminada||

||Final Alternativo||

-Te amo- susurré...

Nunca imaginé como sería el estar muerta. Digo, sabía que algún día pasaría pero ni siquiera me tome la molestia de pensar que pasaba después.

Todo estaba obscuro, no sabía lo que pasaba, ¿Dónde está el cielo?, ¿Todo era una maldita mentira o no merecía estar allí?

De pronto mi mundo se agitó, oía a mí alrededor una hermosa voz pero no entendía lo que decían, se iba aclarando cada vez más y más hasta que por fin pude entender "Despierta" y en ese momento desperté...

-Vamos, cariño, se te hará tarde- dijo esa voz. Quede impactada al ver esa persona.

-¿Mamá?- pregunte confusa, no podía creerlo.

-Buenos días- dijo dándome un beso en la mejilla.

¡No puedo creerlo!, me aventé a ella dándole un fuerte y cálido abrazo.

-¡Nunca vayas a dejarme!- dije abrazándola más fuerte.

-Sabes que siempre estaré contigo- me dio otro beso, esta vez en la frente.

Reaccione.

-¿Y Benjamin?- la solté de golpe.

-¿Quién es Benjamin?- frunció el ceño- ¿Es un nuevo chico del cual no me has contado?- me empujo levemente con su hombro.

-No, no es nadie- agité mi cabeza cerrando los ojos.

-Te creeré- dijo entrecerrando los ojos- Baja ya- dijo apresurada.

Salió de mi cuarto. No entendía nada, ¿Dónde está Benjamin?, ¿Por qué estoy aquí?, ¿El cielo es estar de nuevo en mi casa o todo fue un sueño?, ¡¿Qué rayos pasa?!

Mire a mi alrededor, no hay duda, estoy en mi casa, en Wisconsin. Estaba en mi cuarto, las paredes celestes, mi lámpara blanca al lado de mi cama, mis libros amontonados en mi escritorio, mis sábanas recién lavadas, con su fresco aroma a lavanda, en mi pared estaba llena de adornos, estampas y frases de películas, junto con un póster de Mago de oz. El dulce aroma en el aire que demostraba que era miércoles, miércoles de panqués.

Me levante rápidamente y me metí al baño, me quite la ropa, no vi ni una cortada. Era tan extraño pensar que todo lo que viví con Benjamin había sido un sueño, ¿Qué quería decir eso?, ¿Era una forma de demostrarme algo o la vida es tan cruel por hacerme enamorar de un chico que sólo está en mi cabeza?

Me di una ducha en 10 minutos, salí, me vestí con un pantalón celeste, una blusa lila con estampado de estrellas blancas, unas zapatillas negras y desenredé mi cabello, solo me hice una media coleta con mi fleco de fuera. Baje y tome mi mochila.

-¡Papá!- grite con felicidad cuando lo vi como siempre, su taza de café y leyendo el periódico pero esta vez lo dejó de ver para mirarme. Yo lo abrace fuertemente.

-¿Qué sucede?, te comportas como si me hubiera ido- sonrió mientras nos separabamos.

Lo hiciste...

-Solo estoy feliz- sonreí.- Ya me voy.

-¿No vas a desayunar?- dijo saliendo de la cocina.

-No, debo llegar ¡Ya!- dije apresurada.

Les di un beso en la mejilla a cada uno y salí corriendo de casa, me fui al colegio.

Dios, que horriblemente hermoso, de nuevo estoy aquí. Moría por ver a mis amigos, era como si en verdad me hubiera ido a Georgia y ahora viniera a verlos.

-Joder, ¡Los extrañe!- grité cuando los vi, les di un fuerte abrazo.

-Que ingenioso, apenas ayer nos vimos- dijo Lilliane separándose.

-Es como si me hubiera ido a otra ciudad y no los hubiera visto en mucho tiempo- me separe de los demás.

-¡¿Estas loca?!, nunca te iras, no puedes dejarme- Logan me abrazo más fuerte-...Dejarnos- corrigió.

-Logan tiene razón- comento Mike riendo.

-Si, antes te secuestramos y escondemos para que no te vayas- me abrazo Malorie.

-¡Hey!- Lilliane me aparto de Malorie- es mía- me abrazo mi pelirroja.


[...]

Estábamos en la clase de mi maestra favorita, yo no estaba poniendo mucha atención, de nuevo pensaba en todo lo que paso y me pregunte, ¿Benjamin será real?

Me saco de mis pensamientos la maestra cuando hablo.

-Bueno, ¿Cuál me dijiste que era tu nombre?

Yo ni siquiera veía, estaba ocupada tratando de retratar a Benjamin en mi libreta.

-Si, soy...soy Benjamin, Benjamin Peterson- dijo nervioso, yo inmediatamente lo miré.

¡Oh Dios!, pero claro que era el, cabello castaño, ojos azules como si estuvieras viendo el cielo mismo, esa bellísima sonrisa y esos labios que hasta en mis sueños me dieron los mejores besos de mi vida.

La maestra le dio indicaciones y él se sentó a mi lado, ¿Sabrá de mí?, ¿Habrá soñado lo mismo?, lo mire intentando llamar su atención.

-Antes de que algo pase, ve por tus libros- le dijo a Benjamin.

-Si, claro- dijo, cuánto extrañaba su voz.

Al llegar a la puerta me miro e hizo cara de sorpresa, ¿Eso querrá decir algo?, luego de un rato el timbre sonó, Benjamin no volvió al salón, debo buscarlo.

Estuve buscándolo por todo el colegio pero nunca lo encontré, rendida iba a volver con mis amigos, cuando...

-¡Oye tu!, ¿Qué diablos haces?- voltee y me encontré con esa mirada.

-¡Benjamin!- grite con lágrimas de emoción.

-¡Avery!- dijo de la misma manera.

Corrí hasta el, lo abrace enrollando mis piernas en su cadera y le di un desesperado pero lleno de amor beso.

-No puedo creerlo- dijo abrazándome fuertemente. Ambos llorábamos.

-Ni yo- me hundí en su cuello.

Habíamos soñado lo mismo, me alegraba tanto estar con el pero las preguntas llegaron a mi mente, ¿Por qué?, ¿El destino me preparo para el?, no lo sabía pero algo tenía seguro, no había duda, Benjamin y yo estábamos destinados a conocernos; a estar juntos, para querernos.
Esto ya no era una segunda vida, esta era la primera, la única, sabía que algún día llegaría a su fin pero Benjamin y yo teníamos muchas promesas que cumplir antes de eso, como, nunca fuimos a nuestra primera cita, no terminamos nuestro almuerzo y aún nos faltaba esa eternidad para amarnos...

-Vamos por un café, chica del puente- susurró.

-Vamos, osito Willy- reí y el conmigo.

Una última pregunta:

¿La Segunda Vida Es Mejor?

Pero eso se los dejo a ustedes...

Fin.

Esta Novela Esta Registrada Y Si La Copias O Adaptas No Dudaré En Demandarte.