Capítulo 2: Aaron Adams

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Mientras voy caminando a ver a mis amigos, me encuentro con mi madre que venía de trabajar y me dice:

-Alex!!! ¿Qué haces por aquí?- me dijo cansada. Yo le digo:

-Mami voy a buscar a mis amigos para jugar. Ella me dijo:

-Ven para la casa muchachito, debes ayudarme a hacer los deberes! Yo le dije:

-Bien mamá- le digo suspirando.

Vamos caminando hasta llegar a la casa y nos encontramos una sorpresa, Marcos y Alexandra haciendo los deberes. Y nos dicen:

-Hola mamá!!! Hola Alex!!! Mamá les dice:

-Chicos!!!! Waooo!!!! Gracias. Y nos dicen:

-No te preocupes mami lo hicimos por ti, porque siempre vienes cansada de trabajar. Y yo le digo:

-Bueno mami ya que ellos hicieron mis deberes ya puedo irme ¿Verdad? Ella me dice:

-Claro Alex, puedes irte.

Me voy a buscar a mis amigos veo algo que se acerca rápidamente. Es Aaron!!!! Él me dice:

-Amigo rápido busca tu caña de pescar!!!! Yo le digo:

-Bueno está bien.

Aaron Adams es mi mejor amigo! Él tiene 15 años, le encanta pescar, y me gusta estar con él porque es el único amigo que tengo de mi misma edad. Me entiende mucho y yo a él, así que nosotros nos tratamos como hermanos.

Voy a casa a buscar mi caña de pescar y me voy con Aaron al río Usumacinta que está muy cerca de mi casa, nos preparamos y luego de tirar la caña al río de repente Aaron tiene un pez en su caña y lucha con tal pez, pero se le fue casi lo atrapaba y me dice:

-Alex!! Casi lo tenía.

Luego de tres horas Aaron tiene un pez en su caña y lucha, lucha, y lo consigue y me dice:

- Amigo, lo conseguí!!!- me dijo satisfecho.

Yo me sentí feliz por él así que me animé a pescar uno grande como el de él. Luego de 1 hora un pez muerde mi anzuelo, yo luché con ese pez y Aaron me dice:

-Vamos amigo! Tu puedes!

Gracias a esas palabras de mi mejor amigo me animé y lo conseguí; Uno muy graaanndeee!! Y Aaron me dice:

-Muy bien, amigo- me dice feliz, por mi. Le digo:

-Gracias, amigo.

Luego pusimos los peces en la mochila para llevárselo a nuestras familias para que lo cocinen y nos lo comiéramos de cena.

Dejé a Aaron en la esquina de su casa, llegué a mi casa, me duché, me puse mi pijama, cené con el pescado que atrapé, por cierto, muy rico! Y me acosté a dormir hasta el otro día.

Continuará.....

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