Papá Shawn (S.M)

1.El 2028

Miró la taza en sus manos antes de darle un sorbo y volver a la lectura en su tablet. Le hubiera gustado que le llamaran anticuado por el hecho de que estuviera leyendo las noticias a esas horas de la mañana mientras que se bebía su clásico café de grano pero no lo estaba haciendo en un periódico real sino en aparato electrónico. No importaba, no era como que hubiera mucha diferencia.

-...Es el primer día del nuevo año 2028-Se oyó la voz de un presentador en la radio sobre el mezón de la cocina-Este invierno tendremos el honor de presentar una gran cartelera llena de películas como: Toy Story 6; Blancanieves; Y The Jack's; Hi, I'm Ariana; También grandes avances musicales con las presentaciones de Ian Muchoski, The Holliday dreams; LYLAS; Harry Vegas; Jack & Jack; Cobie Smuller; Y con la participación de antiguas caras como: Harry Styles, Lewis Capaldi, Lana del Rey, Ariana Grande, Ed Sheeran, 5 Seconds of summer, Taylor Swift, Little Mix, Shawn mendes, Fifth Harmony y muchos, muchos más en el concierto conmemorativo en memoria a Madona. También esperamos...-La radio se cortó y Shawn apartó su mirada de su tablet al oír el silencio en la cocina.

-¿Y eso por qué?-Le preguntó a la mujer que se sentó a su lado para tomar robarle su tostada y darle un mordisco. Ella se agachó de hombros después de darle un beso en la cabeza. 

-No lo sé, sólo quiero escucharte-Shawn le sonrió encantado. Volvió a beber de su café mientras que ella se dedicó a desayunar esperando a que él decidiera darle un resumen de las noticias del día como era habitual.

El timbre de la entrada sonó. Shawn se levantó para ir a ver de quién trataba. Eran casi las nueve de la mañana, no sabía quién podía estar visitándolos a esa hora un día domingo, dudaba que fueran los mormones a quienes llevaba evitando las últimas dos semanas de su vida. Solo por si las moscas acomodó su sudadera negra mejor en su cuerpo para estar más "Presentable" y que los mensajeros de Dios no lo anduvieran juzgando después.

En esa casa vivían él y su novia. Era una casa en los suburbios (bastante difíciles de conseguir considerando la economía del momento). Por el hecho de ser uno de los cantantes más exitosos de la década uno hubiera imaginado que para ese punto en su vida viviría en una mansión pero él y su pareja prefirieron una pequeña casa común y corriente (aunque con muy buena seguridad solo por si acaso). Nunca les gustó llamar la atención. Lo más extravagante que tenían era una ama de llaves que solo se encargaba de cocinar y limpiar pero la mujer solo los visitaba Martes y Jueves así que tampoco era como que fuera la extravagancia del momento.

Shawn miró por la pantalla pegada en la puerta para ver de quién se trataba. La cámara del otro lado de la puerta no visualizaba a nadie. Se agachó de hombros restándole importancia. Se giró para volver al comedor, cuando el timbre volvió a sonar. Frunció su ceño y se giró y volvió a ver la pantalla nuevamente.

Nada.

Frunció el ceño confundido y abrió la puerta. Miró a ambos lados con confusión y se cercioró de que el botón no estuviera descompuesto. Le dio un par de golpecitos a la cámara en la puerta para ver si estaba en buen estado.

-Hola.

Se sobresaltó al oír aquella voz. Bajó la mirada solo para encontrarse con la de una niña. La miró unos cuantos segundos pensando que era una de las niñas del vecindario pero hizo una mueca al no reconocerla (tampoco era como que conociera a todos sus vecinos).

-¿Sí? ¿Qué deseas, linda?

-¿Es esta la casa del señor Shawn Mendes?-El hombre asintió algo confundido al verla y percatarse de que traía una maleta con ella. La niña rubia, y bastante pequeña, sonrió y lo miró inocentemente.

-Ese soy yo, ¿Quién eres tú?

-Soy Fizzy.

-¿Fizzy qué?