-¡Buenos dias Mama!- bese su mejilla cuando me acerque a ella, iba tarde a mis clases de coreano otra vez y eso me estaba volviendo loca, tenia demasiado sueño aun -Hola nene- bese la frente de mi pequeño hermano de cuatro años
-Hola princesa ¿como amaneciste?- me pregunto con una gran sonrisa mi madre mientras preparaba el desayuno, no tendría tiempo de tomarlo por muy bueno que paresca
-Bien con mucho sueño y apurada porque se me hace tarde- respondí rápidamente mientras bostezaba
Frunció el ceño poniéndome toda la atención -No es tarde para que desayunes- me señalo la mesa para que viera que mi plato ya estaba listo, negué -Vamos tomate el jugo aunque sea-
-Bien- tome mi jugo de naranja lo mas rápido posible -Ahora si, Adiós- me despedí con la mano luego de besar su mejilla y la frente de mi hermano que jugaba con su comida -¡Los quiero!- grite
-¡Cuídate!- grito mi padre bajando las escaleras
Me coloque mis auriculares para escuchar BTS, era el único grupo coreano que me gustaba mucho antes de venir a corea, digamos que no me llamaba la atención mucho el país de donde procedía esa grupo hasta que mis padres dijeron que se venia a vivir aquí, creo que tuve algo de rencor al respecto, ya que el sueño de todo adolescente es irse a Europa cuando termina la escuela, pero no... mis padres por cuestiones de trabajo se mudaron al otro lado del mundo a donde nadie nos entendía y tenían costumbres totalmente distintas a las nuestras.
Y aquí estaba yo con mis 18 años de camino *casi corriendo* a mis clases de coreano para poder algún día ingresar a la universidad de aquí, sufriendo por no tener a mis amigas conmigo y empezando una nueva vida que no escogí pero me toca vivir ¿suerte que hablo ingles?
Tan distraída que choque con alguien cuando iba casi llegando a mi aula -Disculpa-
-Tranquila- me respondió también en ingles un chico, no lo mire demasiado iba tarde y quería llegar a tiempo, hice unas venias y me fui a mi salón
Mi primer mes fue un completo desastre, definitivamente escuchar música coreana *BTS* no me ayudo en nada con el idioma, era pésima y era tan difícil aprenderlo, mi cabeza daba vuelta con la escritura y en la pronunciación era un desastre, llegaba tarde a clases porque me perdía con facilidad por las calles de Seul y eso que tomaba la misma vía todo los días.
-¡Oh! Disculpe- choque de nuevo con una persona por estar apurada ¿otra vez? suspire levantando la vista para disculparme con la persona -Disculpe estaba distraída- hable en ingles aunque no se si me entendiera, estaba de nuevo atrasada para mi clase
-No se preocupe- me respondió con una linda sonrisa ¿lo había visto antes? ¿donde?
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