Detrás De La Puerta

Mala idea

Los días pasaron luego de que vi el interior de esa puerta. Al parecer mis padres no se dieron cuenta. Actuaban normal, lo que me llegaba a decir que no sospechaban de mi comportamiento tenebroso que tenia desde ese día hacia ellos.

Solo actué normal y tranquila, o eso intente.

Últimamente me había juntado con una chica del barrio. Éramos amigas, pero no tanto como para contarnos secretos, asique no le hable de mi familia horrorosa.
Un día en la plaza, decidimos columpiarnos mientras charlábamos.
-Oye, hace frío... vamos a tu casa _Me dijo_
-N-no, esque... mis padres no están.
Y la cosa era cierta, mis padres habían ido a un viaje de 5 días por el trabajo. Se habían marchado ayer por la noche.

Pero no era eso lo que impedía que acepte que entrara, sino que tenia planeado seguir con mi descubrimiento detrás de la puerta del fondo.
La verdad es que tenia miedo de ir sola, sin contar a Victoria, que probablemente aparezca para "acompañarme" en la aventura.

Sin pensarlo, opte a la decicion de contarle todo... y todo.
Le conté que era adoptada, que mis padres actuaban raro, que había una puerta en mi casa que nunca decidieron nombrarme, también mencione que había entrado son su permiso y vi niñas muertas. Y, de paso, le hable de que veía fantasmas, a mi amiga Victoria, para ser exactos.

Ella, al llegar a esa parte de la historia, por su cara, estaba espantada. Parecía que quería salir corriendo, pero el hecho de que seamos amigas se lo impedía.
-Quiero entrar de nuevo, cuando vi a las niñas asesinadas logre, en el fondo, ver una luz...
-Osea que el pasillo sigue
-Exacto
-Está bien, te acompaño
-Segura?
-Creo que si, segura
-Gracias, Sofía

Saltamos de los columpios y nos dirijimos a mi casa. Al ver hacia atrás vi a Victoria. Se estaba columpiando, con esa sonrisa que me aterraba.