4.5. La verdad detras de una noticia

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La noche anterior

La profundidad de aquella oscuridad en el denso bosque, devoraba todo lo que se encontrara en él, con ayuda la niebla del lugar donde se encontraban, un lugar donde  ocurrían múltiples desapariciones, un lugar de misterio al que todo los lugareños ahora temían, y con mucha razón, ya que no se encontraba nada de los desaparecidos a excepción de extremidades arrancadas violentamente en las que se notaba la increíble brutalidad en la que no se usó ningún instrumento afilado. Solo fuerza y brutalidad.
Pero en medio de toda la oscuridad un par de siluetas envueltas en capas color negro se mueven sigilosamente y de manera muy segura, sin ningún miedo a lo que les pueda pasar, lo que piensan aun es un misterio, sin embargo, se nota su coraje y su fuerza al ver su caminar.
—Entonces, ¿Estás segura que esta es la zona de las desapariciones?—habló finalmente una de las sombras con una voz fuerte y grave.
—Completamente, incluso me asegure mandando a algunos animales, y espere a que regresaran, pero nada. Y cuando salí a investigar no encontraba nada, excepto sangre, mucha sangre.—respondió la segunda silueta pero está a diferencia de la primera tenía una voz aguda, está claro que la capa no permitía ver a simple vista que una de las sombras sin duda era una mujer.
—Entonces, ¿de qué crees que estemos hablando? ¿Un Striders?
—Probablemente un Striders, uno bastante grande y viejo o incluso podría ser B.O.B en persona.
—Quienquiera que sea, jamás lo encontraremos en un bosque tan denso, debemos separarnos.
—De acuerdo, tú ve hacia allá. Recuerda usar tu faro para encontrarnos.
Ambas sombras se dirigieron a distintas direcciones en el oscuro y denso bosque en busca de lo que fuera lo que causaba todos las misteriosas desapariciones, ambos listos para cualquier cosa, entonces la sombra femenina después de caminar un largo camino descubrió algo interesante, un movimiento entre los árboles.
Cuando se dispuso a investigar se encontró con una chica de cabellos rubios de baja estatura, vestía unas ropas cafés bastante desgastadas, en uno de los mechones de su cabello tenía amarrado un collar de musgo con plumas color negro, en su pierna se sujetaba un cuchillo hecho con piedra y finalmente llevaba puesta una máscara de madera que desde las cuencas de los ojos ramas negras sobresalían aparentando los cuernos de un venado, solo que esta vez se notaba algo distinto en ella y era que en su brazo izquierdo había una cicatriz.
—Jennifer, eres tú…
—¡Por favor ayúdame!—Interrumpió rápidamente la chica.—Está matando a todas la criaturas de mi bosque, sabes que no me gusta herir a nadie y cuando lo hice me sentí tan arrepentida, entonces pasó esto.—Dijo señalando su herida
—Por Dios Jennifer, ¿estás bien?
—Tranquila, solo fue un rasguño, sanara rápido.
—¿Qué te hizo esto?
—Un grupo de Striders, tres o cuatro, ¿crees poder manejarlo?
—Sola, no lo creo, déjame activar mi faro para llamar a mi compañero.
Entonces la sombra de la mujer y la joven Jennifer fueron interrumpidas por un grito cercano y el otro faro que portaba la otra sombra brilló a distancia.
—¡Striders!
—Bueno parece que él ya los encontró, ¡vamos!

***

La sombra del hombre después de haber caminado un gran camino finalmente encontró a varios animales que se encontraban corriendo todos hacia la misma dirección.
—Están huyendo pero, ¿de qué?
Después a unos metros de él logró ver entre la oscuridad y la niebla, una figura humanoide que lo miraba detrás de los grandes pinos, silencioso e inmóvil.
La sombra voluntariamente cambió su apariencia en la que perdió sus ojos dejando solo las cuencas vacías y terminó por ponerse una máscara que guardaba en el bolsillo al interior de su capa, una máscara color azul con el agujero de las cuencas completamente negro y con pintura negra corrida la cual simulaba sangre, como si a la máscara le hubieran arrancado los ojos.
—B.O.B., sabía que eras tú.
—Vaya Eyeless veo que aún transformado puedes ver bien, nada mal para no tener ojos.—Contestó la voz grave y ronca del monstruo de modo irónico, que salía de la oscuridad lentamente, moviéndose como una persona ebria añadiendo espasmos a su paso.
—Tienes razón, de esta manera no puedo ver nada, sin embargo, te puedo sentir, siento tu presencia y tu miedo.
—Jajajajaja.—Soltó una carcajada con su voz distorsionada, voz que desesperaba e inquietaba a cualquiera con sonidos disgustantes y asquerosos capaces de dañar a cualquier persona.—¿Miedo? ¿Yo?—Pregunto gritando a su adversario.—¿Acaso has olvidado quién soy yo? Yo soy B.O.B., la bestia obscena y brutal. No le temo a nada.
—Bien entonces dejémonos de charla y luchemos, pues cuando te aniquile me quedaré con eso increíbles ojos negros como como los de tu hija bastarda.
—¡Nunca vuelvas a mencionar a esa maldita en mi presencia, tú pedazo de mierda!—Gritó furioso y enseguida moderando su voz de nuevo dijo.—Como sea yo no seré el que pelee contra ti.
—¿A qué te refieres?
—Al parecer aun debes pulir tus habilidades jovencito.
En ese momento una garra golpeó al hombre lanzándolo contra un árbol con tal fuerza que este se quebró y cayó después de que la sombra chocara contra otro que estaba justo detrás del primero. Al incorporarse encendió su respectivo faro y gritó con fuerza.
—¡Striders!
En ese momento tres criaturas de gran tamaño, cercanas a los cuatro metros de altura, atacaron a la sombra sin piedad alguna con un salvajismo increíble.
—Bueno, en ese caso yo me retiro.—Dijo el monstruo mientras daba la vuelta y caminaba hacia lo más profundo del bosque.
El hombre, de su capa saco un par de cuchillos que utilizo para pelear, la velocidad de los criaturas era increíble para algo de su tamaño, las criaturas con sus grandes garras hacían hoyos en el suelo al intentar golpear a la sombra, pero esta esquivaba todo ataque con su velocidad y trepando a un árbol, al tener la suficiente altura se abalanzó contra una de las criaturas y poniendo sus cuchillos en el cuello de uno de ellos trajo su cuello con velocidad, entonces otro sin mostrar piedad corto con sus garras la cabeza del que tenía encima a la sombra de un solo tajo, como si de papel se tratara, esto con el objetivo de herir a la sombra y efectivamente, con esto logró hacer cortes profundos en sus brazos y manos obligándole a soltar sus armas. Las heridas de este se curaron a una velocidad increíble así que volviendo al combate solo podía confiar en sus puños. De nuevo los ataques de las bestias restantes comenzaron, intentando alcanzarlo con sus afiladas garras y sus poderosas fauces para poder despedazarlo de una vez por todas. Con su velocidad la sombra esquivaba todos los ataques y cuando finalmente encontró una apertura entre las constantes embestidas, con un golpe seco y silencioso pulverizó la rodilla de una de las bestia haciendo caer su rostro contra el suelo, pero eso no sería suficiente para detener sus ataques, en el instante que cayó largos tentáculos con apariencia escamosa se asomaron por detrás de su cuello y sin perder tiempo continuaron buscando hacer daño a su enemigo y en menos de un momento de descuido del hombre uno de ellos si dirigía a su garganta y esta vez no había nada que hacer, ese sería su final.
En ese momento ambas chicas llegaron a la escena y la chica a la que llamaban Jennifer con un movimiento de su mano sacó grandes raíces del suelo y alcanzaron a proteger al hombre de un fatídico desenlace.
Tomando un respiro de la batalla las sombras paradas sobre un árbol se preparaban para un segundo asalto.
—Ya era hora que llegaras, te perdiste de la diversión.—El hombre se detuvo en cuanto vio a la otra chica.—Weeping Forest así que estos te han estado molestando.
—Bien Eyeless, ya acabaste con uno faltan tres.
—¿Tres? Solo  quedan dos vivos aquí.
—Entonces aún no llega el cuarto.
—Prepárate ya terminaron de curarse.—Intervino la mujer con la capa al ver que la criatura a la que le rompieron la rodilla se levantó lentamente.
—Forest, sé que no te gusta lastimar a nadie ni a nada, pero, ¿podrías darme un golpe certero?
—¿Qué necesitas exactamente?
—Solo utiliza los árboles para inmovilizarlos, ayúdame a derribarlos.
—No hay problema.
—Bien, ¿estas lista Nina?
—Hagámoslo
Sin esperar un solo segundo los tres sujetos se lanzaron contra las bestias y estas automáticamente comenzaron a atacar con sus garras y mandíbulas. La encapuchada llamada Nina distraía a los oponentes, el chico al que llamaban Eyeless simplemente esquivaba todos los golpes, esperando el momento de atacar. En cuanto Jennifer se dispuso a bloquear los ataques de sus enemigos para que sus amigos no resultaran heridos.
Finalmente después de un par de segundos Jennifer hizo brotar raíces amarrando las piernas de su enemigo, al momento de haber terminado, Nina con un fuerte golpe desde la espalda de la criatura la derribó a lo que finalmente Eyeless estirando los dedos de su mano derecha golpeo y atravesó el ojo del monstruo, sujetó una parte de los sesos y cerro su puño causándole la muerte inmediata. La última bestia en pie intentó morder a Eyeless pero este con una fuerza increíble tomando a la bestia a sus pies la lanzó contra la que estaba a punto de atacar, por la fuerza de sus lanzamiento las bestias volaron varios metros y al caer Jennifer agarró todas sus extremidades al suelo con las raíces, finalmente saltando desde una rama Nina tomó una daga bastante larga de su capa termino la pelea atravesando su cráneo.
—Bien, eso estuvo mucho mejor.
—No bajen la guardia, recuerden que aún falta uno.
En ese momento Eyeless usando sus sentidos agudizados, detecto algo.
—Forest un escudo ahora.
Tan pronto la chica hizo un domo de madera este fue golpeado y destruido con facilidad lanzando a todos los que estaban dentro varios metros hacia afuera del bosque, en un campo grande y despejado.
Al incorporarse todos, de entre la oscuridad de los árboles emergió un cuarto enemigo claramente más grande que los demás ya que este media cerca de los seis metros, además de que a diferencia de los otros no necesitaba estar derribado para usar los tentáculos de la parte trasera de su cabeza que por cierto los de él eran más largos y salía desde su espalda, esta era una criatura evidentemente más fuerte que las demás.
—Bien entonces este es el último. Hora de acabar con esto.
La criatura sin esperar otro instante se lanzó a atacar con una fuerza y velocidad mayor que las anteriores a pesar de ser más grande, a lo que los sujetos respondieron de la misma manera, de nuevo la chica Jennifer a la que también llamaban Forest se dedicó a bloquear el  ataque e intento poner en ventaja a los demás sin embargo ahora que estaban fuera del bosque todo lo que hacía le costaba más trabajo alentando todos sus movimientos ya fuera para bloquear o distraer.
Eyeless esta vez había logrado impactar varias veces a la criatura pero esta al parecer podía aguantar mucho más que eso, Nina apoyaba a Eyeless haciendo que el enemigo se concentre en ella dándole más oportunidades, sin embargo, era todo en vano, no importaba que tan fuerte lo golpeara su piel era bastante gruesa y el daño que recibía se reducía considerablemente.
Después de varios intentos de esta manera decidieron detenerse.
—Esto no está funcionando, necesitamos una estrategia.
—Lo se Nina, estoy en ello.
—Nina, tú aun tienes tu cuchillo, ¿verdad?
—Claro pero aunque puedas derribarlo no podremos acercarnos para darle el golpe final, su defensa es increíble.
—¿Pero si hacemos que caiga sobre el?
—Ya veo, como con un oso.—Interrumpió Eyeless.
—Exacto, entonces, ¿cuál es el plan?
—Tú y yo lo derribaremos con uno de tus golpes y mis raíces, mientras Nina rápidamente pone el cuchillo en donde valla a caer. Sin embargo aquí estoy en desventaja, así que pondré las raíces en un sitio fijo para no tardar tanto.
—Bien, contamos contigo.
Jennifer desde bajo la tierra preparaba la trampa mientras Nina distraía a la bestia.
—Bien está listo. ¡Ahora Eyeless, Nina!
La raíces previamente posicionadas salieron de golpe sujetando desde los pies hasta la cabeza del Striders, después de un rápido movimiento, Eyeless golpeó el costado de está tirándola al suelo y antes que esta tocara Nina posiciono su largo cuchillo en el suelo el cual con el peso atravesó hasta el corazón de esta.
—¡Aún no!
Grito Eyeless lanzándose contra la bestia que aún se defendió usando sus tentáculos, a lo que respondió arrancándole uno y atravesando de nuevo su gruesa piel usándolo, dándole así el golpe final.
—Esta cosa es increíble, Jennifer, ¿crees que podrías hacerme una nueva espada con esto?
—Claro, supongo que no hay problema.
—Bien ya acabamos aquí, limpiemos esto y vámonos de una vez por todas.

***

Las cinco de la mañana en el mismo campo, un joven y misterioso detective, alto y de cabello castaño se detiene a ver la escena y a través de su celular habla con alguien más.
—Otro incidente completamente inexplicable. Huellas extrañas, rastros de pelea y madera rota, entre otras cosas.
—Bien, sabes que no quiero que la gente se alarme por esto, termina la investigación tan rápido como puedas y prende fuego a todo, haré que la noticia aparezca como una toma de petróleo, el fuego evitará que la gente se acerque demasiado.
—Sí señor.
El misterioso detective, colgó la llamada y volvió a echar un vistazo, cuando fue interrumpido por uno de sus compañeros.
—Detective Kato, encontramos esto en el bosque,—le dijo extendiendo un par de cuchillas, las cuchillas que Eyeless había dejado caer durante la noche.— al parecer son un par de cuchillos, sin embargo, hay algo extraño en estas.
—Dime que tienen.
—No son de ningún metal conocido, de hecho son mucho más resistentes que probablemente cualquier cosa en el planeta.
—Bien gracias.
‹‹Tendré que investigar esto muy a fondo.›› Pensó finalmente mientras observaba en el horizonte el alba.

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⏰ Última actualización: May 22, 2016 ⏰

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