-¿puedes esperarme? -le comenté a Jimin. El camino de subida era muy largo y empeñado, no se como acepté en ir de escalada con él.
-tú caminas muy lento -él se quejó de mi lentitud y se detuvo para esperarme, que responden es.
-has echo esto más veces que yo, no estoy acostumbrada -me detuve frente a él y doble mi cuerpo hacia bajo tratando de que el aire volviera a mis pulmones. Estaba muy segura de que ya habíamos caminando 2 km.
-no es estar acostumbrado, si fueras al gimnasio diariamente como yo no te estarías quejando ahora mismo -solté un gruñido de cansancio y de queja por el sermón de Jimin. Siempre era así, diciéndome que debería hacer más ejercicio, pero yo amó mis pequeñas grasitas extras.
-bien, bien, sigamos -solté un suspiro y continuamos caminando hasta llegar a la parte boscosa del camino, donde ya no había pavimento.
Jimin se veía muy feliz y extasiado por el comienzo de nuestra aventura.
-te va a encantar, alejarse de la ciudad un día es muy genial, divertido y bla bla bla -por más que quería prestar atención a las palabras de Jimin sólo lograba oír "bla bla bla".
-si, si, lo que tú digas -di una palmada en su hombro y continué caminando adentrándome en el bosque.
-espera, no sabes el camino, deja que vaya enfrente -el se me adelantó y yo lo seguí. A los 12 minutos otras estaba agotada y sin alimento. Jimin se encontraba a aproximadamente 20 metros delante de mi-. Caminas muy lento así nunca llegaremos
-lo siento señor puedo caminar mucho más rápido que t... -me detuve cuando una rama se calló asustándome un poco, antes de poder saltarla algo callo en mi cabeza, pensé que era una gran hoja, al agarrarlo y mirarlo vi que era un gusano enorme que se retorcía en mi mano.
Eso fue suficiente para hacerme gritar despavorida, lanzar el gusano asqueroso lejos y salir corriendo con fuerzas que no sabía de donde venían.
-¿Lele? -con la velocidad en la que corría me pase a Jimin-. ¡Hey! ¡espérame!
Yo sólo gritaba y corría a más no poder. Solo quería llegar al lugar más limpio, civilizado y sin gusanos que me puedan causar un paro cardíaco.
Un desliz me tomó por sorpresa y caí rodando hasta abajo donde termine en el agua.
-¡Lele! ¿estas bien? -Salí a la superficie y tomé aire con desesperación, casi me ahogó. Jimin estaba en un peñasco que tenía una bajada más segura que la que yo escogí de lanzarme al agua, aunque en realidad me resbale.
-¡un gusano me calló en la cabeza, lo agarré con las manos, me resbale y caí de un peñasco hacia el agua! ¡Estoy muy bien! -Jimin se rió y comenzó a bajar de manera más segura.
-Trata de llegar a la orilla, yo te ayudó a salir -suspiré y ande sólo un poco, al estar cerca mire el lugar donde estaba, era una cascada, muy hermosa.
Continué nadando y Jimin me sacó del agua.
-¿te encuentras bien, preciosa? -yo lo abracé con mucha fuerza.
-tenía mucho miedo -sentí su mano en mi cabello.
-no dejaré que nada t...
-¡ese gusano era enorme! Fue tan asqueroso, que horror, Park Jimin jamas vuelvas a traerme a estos lugares -saque unas risas de su parte el me abrazó y besó mi cabeza-. Acabas de besar dónde el gusano calló.
-uy, que asco, mejor sigue bañándose -el me empujó al agua y caí en ella.
-¡TE DETESTO, PARK JIMIN! -le grité con enojo.
-¡Y YO TE AMO, KIM LELE! -eso me hizo sonreír, Jimin no podía ser más lindo.