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Capítulo 15

Angely se encontraba triste en su habitación, la luna se veía hermosa, ella la veía por la ventana esperando que Joshep la estuviese viendo también, ya había pasado una semana y no sabía nada de él. El temor a las malas noticias la tenía perturbada, no sabía qué hacer.

- Fabiola: Hija ¿Puedo entrar? – Preguntó desde fuera de la habitación-.

- Angely: Claro mamá, entra.

- Fabiola: Te escuche llorar ¿Te pasa algo?

- Angely: Estoy muy triste, no he sabido sobre Joshep.

- Fabiola: Él está bien, no debes preocuparte.

- Angely: Lo sé mamá, solamente que quisiera verlo.

- Fabiola: Entiendo, ¿Le has llamado?

- Angely: Si, muchas veces y no contesta.

- Fabiola: ¿Has intentado llamar a su casa?

- Angely: Si, tía Ross dice que está bien, pero no da más razones de su estado.

- Fabiola: ¿Por qué no has ido a verlo?

- Angely: Pues no sé si es permitido hacerlo.

- Fabiola: Entiendo...

- Angely: Mamá me siento mal.

- Fabiola: Entiendo tu tristeza.

- Angely: No es precisamente por ello, no fue lo realmente sincera con Joshep.

- Fabiola: ¿A qué te refieres?

- Angely: Pues aprovechando que no recordaba muchas cosas, no le hice mención de mi proceso con el cáncer.

- Fabiola: ¿Por qué no lo hiciste?

- Angely: Pensé que lo alejaría de mí, me sentí diferente con él.

- Fabiola: ¿Por qué?

- Angely: Porque el cáncer no se interponía entre nosotros, ambos teníamos un padecimiento, pero no le dabamos importancia.

- Fabiola: Entonces no eran ustedes mismos, no eran originales.

- Angely: Éramos los mismos, solo que sin males. Podíamos hacer cosas que antes no, por miedo a que me pasara algo.

- Fabiola: Pero tú sabes que has mejorado y eso le hubiese agradado.

- Angely: Lo sé mamá, pero solo quería pensar en él, en nosotros.

- Fabiola: Angelina, aunque la verdad duela, tenemos que vivir con ella. –Angely comenzó a llorar de nuevo-.

- Angely: Quiero verlo, nunca pensé que me enamoraría tanto de él.

- Fabiola: Hija, el enamorarse trae sus facetas maravillosas, pero también dolorosas.

- Angely: Mamá, quisiera pedirle perdón, pero me da miedo la reacción que pueda tener.

- Fabiola: Pues debes intentarlo, ¿Quieres ir a verlo de sorpresa?

- Angely: Mamá, pero no sé si se puede, es riesgoso ir y no verlo.

- Fabiola: Hija, lo riegos valen la pena cuando nacen del corazón. Tu padre me decía: "Prefiero vivir y perder, a no haber vivido nada".

- Angely: ¡Vamos entonces!