Akatsuki ❁ OneShots Lemon❁

☁︎ ɪ ᴛ ᴀ ᴄ ʜ ɪ ☁︎

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Castigo
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✒ᴇᴅɪᴛᴀᴅᴏ

A ITACHI PARECIA  EXITARLE HACERLO  en lugares donde podrían ser descubiertos y  (t/n) nunca había mostrado molestia, aunque hacerlo ahí, en el salón era nuevo y muy arriesgado a su parecer. Dejarlo continuar sería casi ponerse la soga al cuello, la profesora o algún prefecto podrían descubrirlos y la noticia llegaría a sus padres que era igual o peor que la muerte.

     Aunque, los besos húmedos en su clavícula y cuello eran exquisitos, las manos masculinas recorriendo sus piernas lo eran aún más.

—Ngh~ahh Itachi, la maestra podría venir y..., —El de mirada onix silencio sus pensamientos y palabras posando sus labios húmedos en los suyos,  un beso demandante y húmedo.

—Ella no vendrá, esta asegurando su aumento con el director, — El descaro en sus palabras era parte del momento, resultaba que le excitaba escucharlo hablar así durante el acto pues era obvio para el que conociera a su novio que nunca diría tales palabras en sus cinco sentidos. Jadeo sorprendida de la ágil mano derecha de su novio cuando  desabrochó la blusa en cuestión de segundos, mientras que la otra se deslizaba entre sus bragas que comenzaban a empaparse de sus fluidos, sus largos dedos se  abrieron paso entre sus pliegues en busca del botón de carne que la hacía chillar envuelta en placer.  Sus dedos mojados de los sedosos  fluidos de ls fémina le hizo saber que, como en otras ocasiones, podria deslizarse fácil y rápido en ella sin dañarla, Itachi era un experto si de un polvo se trataba, conocía el cuerpo de su chica a la perfección, y esto solía facilitarle hacerla culminar. (t/n) desabrocho la camisa de Itachi besando su pecho bien formado, la vergüenza era característico en ella aunque en los momentos como este  el pudor podía irse al carajo.

Entre suspiros y gemidos iban disfrutando de las caricias del otro junto la adrenalina recorriendo cada poro de sus joviales cuerpos, él la apoyó contra la pared  desabrochandose el pantalón, en el proceso liberó su miembro erecto de la prisión de su ropa interior manchada de líquido preseminal, hizo a un lado las bragas de (t/n), quien de un brinquito enrollo sus piernas en las afiladas  caderas masculinas dándole una mayor accesibilidad. Itachi sin poder esperar un segundo más entró en ella soltando un gemido, la manera en la que su interior se amoldaba a su pene apretando y subcionando era tanto deliciosa como tortuosa, necesitaba moverse. Comenzó a embestirla de una manera salvaje y ruda, el era así y le encantaba, intentaba mantener la boca cerrada, algo casi imposible,  los gemidos cada vez se deslizaban de su garganta más  agudos, extasiada se aferraba a la espalda amplia de su novio aun con el labio prisionero entre sus dientes.  Itachi en las mismas condiciones  besaba los senos que se habia encargado de liberar, con la respiración agitada y el cuerpo sudoroso continuaba embistiendola sin tregua, la penetraba rápido y profundo sintiendo como su cavidad se comprimía con cada estocada.

— Itachi y-ya no aguanto. —la morena apretó con fuerza la arrugada camisa blanca de su novio apoyando la frente perlada de sudor en su hombro.

— (t/n) — Itachi la beso para silenciar el grito de placer al alcanzar juntos el clímax, orgulloso de aguantarse a culminar junto a ella. Después de regularizar sus respiraciónes se vistieron tratando inútilmente de deshacer las arrugas en el uniforme, ni hablar de su cabello hecho una maraña.

(t/n) carcomida por la duda decidio preguntar lo que durante el repentino acto le hacía duda.

—Y dime, ¿porque ?— (t/n) se sentó en la mesa aún agitada enmarcando  una ceja. Itachi río y le picó la frente con sus dedos como solía hacer, la tomo de la cintura pegando sus cuerpos.

—Es tu castigo. —este le besó la nariz, apartó su flequillo pegado a su frente por el sudor y dejó otro beso ahí para después  soltarla guardando los cuadernos que quedaba en el pupitre.

—¿mi castigo?— la morena estaba confundida, una semana de detención y un citatorio para ambos después de que Itachi le llamara por teléfono en medio de clase le había parecido "castigo" suficiente por lo que sea que se supone había hecho.

—Por mirar a otro chico. —Itachi se sonrojó sin perder el toque de aquella  sensualidad natural en él.

—Espera, ¿hablas de Deidara?, oh por Dios, sólo le pedí un borrador. No me digas que estas celoso de él.

—Claro que no, sólo no me agrada que le prestes el borrador a esa rubia que te comía con la mirada. — Refunfuñó el azabache para después tenderle un borrador en forma de dango.

La puerta se abrió de pronto haciéndola dar un brinco asustada, la profesora habia vuelto con la blusa al revés y la media rota del muslo derecho.

—Jóvenes se ven muy relajados,  ¿ya terminaron de limpiar el salón? — la maestra entró inspeccionando el aún  más desastroso salón, tratando de acomodar el nido de pájaros que llevaba por cabello, en la cabellera rojo fuego de la adulta resaltaba un líquido blanquecino   que parecia ser semen, claro la profesora no era consciente de esto,  aunque lo era de su traje arrugado. Itachi y (t/n) rieron en bajo mientras eran reprendido por la profesora quien tras ordenarle limpiar de inmediato ese marcho de nuevo a su junta de consejo.  Sin duda fue un buen castigo, ya ansiaban los cuatro días restantes.

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Capítulo editado, este lo dejé así cortito, en el próximo lo compensará :)
Y como siempre, les recuerdo que los amo uwu

Atentamente: •ണყtchεℓℓε•💮