Capítulo 1

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Capítulo 1

23 de mayo 2014

Era un día demasiado gris, estaba húmedo y en cualquier momento llovería. Así que decidí pasar por la confitería para comprar algunas cosas para mi hijo.

Debería tenerlo entretenido por su miedo a las tormentas o noches de lluvia. Sonrió pensando en mi hijo. El era la luz de mis ojos. Se me complicaba muchas veces ser padre soltero pero siempre encontraba la forma en que funcione.

Desde que Elizabeth se fue de mi vida no he vuelto a intentar tener otra chica para mi más allá de lo sexual. Sé que no todas harán lo mismo de abandonarme. Pero aún así, me siento aterrorizado de que algo como eso vuelva a pasarme. No por ser hombre significa que no me importa lo que hagan con mi corazón, soy un hombre pero también soy un humano que sufre.

Compró las macitas preferidas de mi hijo y salgo de la confitería. Me subo a mi auto y conduzco a casa de mi madre quién hoy lo ha cuidado ya que su niñera tuvo un asunto de último momento.

Estaciono el auto y bajo, camino hacía la entrada y tocó timbre. A los pocos segundos ya escuchó los gritos de mi hijo y de mi sobrino. La puerta de la casa se abre y mi madre me sonríe al verme. La abrazo y beso su mejilla.

-Hola ¿Cómo te encuentras Jimmy?
-Agotado, estás noches anteriores no he estado durmiendo mucho. Y hoy no será la excepción, Tyler le tiene miedo a la lluvia.
-Puedes dejarlo aquí, hijo. Sabes que a tu padre y a mi nos gusta a estar con nuestros nietos.
-Ya pasó demasiado poco tiempo con él, quiero disfrutarlo mejor. Luego crecerá y no será mi niño tierno.
-Tienes razón. Crecen tan rápido.

Caminamos hacia la sala donde Tyler juega con Blake. En cuanto mi hijo me ve suelta todo y corre hacia mi gritando «Papi». Lo tomo en brazos y depositó un beso en su mejilla. Mi hijo me abraza y se pega a mi como una garrapata.

-Hola tío Jimmy.-Dice el pequeño Blake, el hijo de mi hermana menor.
- Hola campeón, ¿Cómo estás?.-Pregunto despeinando su cabello el ríe y se aparta.

Una hora más tarde, viajó con mi hijo hacía nuestro departamento. El me cuenta sobre lo que pasó en su día mientras yo me dedico a conducir. Bostezo un poco y Tyler se calla. Lo miro rápidamente y su boca lleva un puchero.

-¿Que sucede hijo?.-Pregunto y el niega con la cabeza. Sigo conduciendo y dejó el auto en el estacionamiento. Me bajo, tomo la bolsa de la confitería y ayudó a mi hijo bajar. Tomo su mano y camino hacía el vestíbulo del edificio.

Estoy tecleando algunas cosas en mi portátil cuando mi hijo asustado entra por la puerta de mi habitación. Camina hacia la cama e intenta subirse pero no puede. Riendo lo ayudó y se acurruca a mi lado.

-¿Miedo?.-Pregunto y el asiente con un tierno puchero. Cierro lo que estoy haciendo en mi portátil y la dejó en la mesa de noche. Me acomodo en la cama y enciendo la televisión para ver los dibujitos.
-¿Manana voy lo de la abu?.-Pregunta y yo beso su cabeza.
-Mañana viene Lilly.-Le digo y el asiente.-¿Estás bien hijo?.-Pregunto y el asiente.
-Tengo otra senorita en el jardín.-Me dice sonriendo.
-¿Si? ¿Es buena?.-Pregunto y asiente energéticamente.
-Si, hoy estaba tiste y me hizo feliz.
-¿Y porque estabas triste?.-Pregunto subiendolo a mi pecho para que me mire. El niega con la cabeza y se lleva el dedo pulgar a la boca.-Dímelo, amiguito.
-Te estanaba.-Me dice y yo sonrió. Lo abrazo apretandolo contra mi pecho.
-Te prometo que haré algo para pasar más tiempo contigo Ty. También te extraño todo el tiempo.
-¿Y estas tiste?
-Siempre que no puedo verte.

Mi hijo se dedica a ver la televisión y de vez en cuando comenta alguna que otra cosa. Estos momentos, donde puedo estar así con mi hijo son mis momentos favoritos en todo el día.

Quizás no he hecho muchas cosas bien en mi vida, pero sin duda haber dejado embarazada a mi ex novia fue sin duda la mejor porque nadie puede darme la felicidad que mi hijo me da. Somos él y yo contra la corriente.

Abro mis ojos apresuradamente cuando siento a mi hijo llorar. Me pongo de pie y lo busco, lo encuentro en un rincón del pasillo llorando. Miro el suelo y está el jarrón que me regaló mi abuela destrozado. Camino rápido hacía mi hijo y lo tomo en brazos. Lo llevo al baño y busco algún tipo de lastimadura.

-¿Te lastimaste?.-Pregunto preocupado al no encontrar nada.
-Ni.-Me dice hipando.
-¿Entonces porque tanto llanto? Me has asustado campeón.
-Rompí el jadon.-Me dice y yo me encojo de hombros. Abrazo a mi hijo y beso su cabeza.
-Pensé que algo te había pasado, tu eres más importante que cualquier cosa material.
-¿Si?.-Pregunta sorprendido. Yo asiento y tomandolo en brazos lo llevo hacía la cocina

Terminó de firmar unos papeles que se deben autorizar hoy sin falta y miro mi computadora. Quiero pasar tiempo con mi hijo. No quiero que su infancia sea como la mía. Si bien tenía a mis padres que me amaban siempre estaba al cuidado de personas que no eran ellos.

Quiero que mi hijo sepa que es lo que más amo y nunca lo dude. Miro la carta que he redactado para mi padre. Espero y acepte el pedido de disminuir mi carga horaria. No me importa ganar menos dinero, sólo quiero estar con mi bebé antes que termine de crecer y le de vergüenza dormir conmigo.

De camino a casa paso por una juguetería y compro un juguete. Me subo a mi auto y comienzo a conducir hacia casa. Cuando llegó, dejó nuevamente el auto en el estacionamiento.

Abro la puerta y lo primero que veo es a la niñera de mi hijo, le doy una sonrisa pero por primera vez desde que la contrate ella no me la devuelve. Se ve nerviosa y preocupada.

-Hola señor, tengo que hablar algo muy importante con usted.
-¿No podrás cuidar más a Tyler?.-Pregunto preocupado.
-Es sobre otra cosa.
-Ven, toma asiento.-Le digo mientras me quito mi abrigo y me siento en uno de los sillones de mi sala.
-Es algo muy importante.
-Habla.-Le digo y ella moja sus labios y asiente.
-Primero, Ty estaba jugando y se lastimó con uno de sus juguetes. Esta bien, no te preocupes. Pero el lloro, decía que le dolía y cuando paro de llorar, seguía diciendo que le dolía.
-Me estás preocupando, pero me has dicho que mi hijo está bien. No entiendo.
-Nos pusimos a ver la televisión y el me dijo si podía curarlo. Al principio no entendí nada, pero luego me explico algo. Me dijo que su maestra en el jardín se lo hizo a su primo.
-¿Qué le hizo?
-Dijo que el niño se agarró los dedos con la puerta y lloro mucho. Entonces se lo llevo a otro salón y el la siguió porque quería saber como estaba su primo.
-Esto está malditamente asustandome.
-La profesora abuso sexualmente del niño. Le hizo una felación diciendo que eso lo curaria.

Miro sorprendido a la niñera de mi hijo sin poder creer lo que me está diciendo. Mi sobrino de cuatro años ha sido abusado en un jardín donde se supone que quien lo hizo es quien debía cuidarlo. De repente me siento furioso. Tomo el teléfono y marcó el número de mi hermana.

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