Los Nine

Capitulo 4: "Bajo Cero"

A lo lejos en medio del mar se podia ver una cueva totalmente hecha de hielo, algo fisicamente imposible, pero cuando hay magia puede pasar.

-Parece que es alli -Se dijo Marisa.

Despues de un largo viaje sobre el agua, Marisa bajo de su escoba y apoyo sus pies en el frio hielo del lugar,no soportaba mas y tomo la pocion. Era un liquido que al tomarlo le provoco un gran calor ,eso ayudaria con el clima.
Lentamente entro a la cueva, armada con su escoba, preparada para cualquier posible ataque de Septuno, quien sabe que pasaria alli adentro.

Estalagtitas, Estalagmitas , todas de hielo, pendientes a caer en cualquier momento.
Llego al centro de la cueva y alli estaba él. Una criatura bastante extraña , con forma de can, color azul. Parecia de aspecto inofensivo, pero no. No, él es un Nine.

- ¡Septuno!

-¿Una bruja? ¿que haces aqui?

-Sabes porque estoy aca, no te puedo dejar libre, todos corremos un riesgo si estan libres.

-¿Riesgo? ¿ Para ustedes que seamos libres es un riesgo? ¡Yo no soy como los demas ! No quiero ningun conflicto.

- ¡Tendrias que haberlo pensado antes de robar la Lagrima del Oceano y congelar a su guardian!

- ¿ Y que esperabas?- emitio una carcajada- Las personas se congelan cuando hace frio, ademas no tengo idea de que estas hablando.

-¡ Damela ya Sep...

Septuno creo una gran ola de agua que arrojo a Marisa al suelo.

- ¡ No me interesa que tengas que decirme ni los de ese pueblo de traidores!

Marisa sonrio.
Se paro y empezo a invocar su misil magico, Septuno se transformó en un torrente de agua que salio disparado contra ella, pero antes Marisa uso su escoba para volar y escapar de él.

-¡Este lugar es de hielo bruja! No podras salirte con la tuya.

Septuno se materializo y rapidamente golpe el suelo con sus patas. La cueva empezó a desmoronarse, pedazos y puas de hielo caian del techo. Marisa se dirijio volando hacia la salida de la cueva mientras una avalancha de hielo la perseguia, estuvo cerca de atraparla.
Ya estaba afuera de la cueva completamente destruida, no se veia a Septuno por ningun lado.Los pedazos de la cueva y una gran masa de agua se movia hacia un mismo lugar , apilandose una con otra, le dieron forma a un gigante de agua que era controlado por Septuno desde el interior del monstruo.

-¡El mar es muy grande! ¿Que vas a hacer ahora?

Marisa empezo a volar esquivando todos los zarpasos de agua del gigante. Hasta que en un momento inesperado, una gran bola de agua surgio desde el mar debajo de ella,encerrandola sin dejarle respirar.

-¡ Ya es suficiente! No eres rival para mi.

La gran masa de agua fue arrojada al mar.

Empezaba a ponerse el sol en el Mar Infinito, ya pasado un tiempo Marisa pudo salir a la superficie .No se veia a Septuno por ningun lado.

La luna estaba llena y el mar parecia ir corriente adentro, Marisa subio a su escoba. A lo lejos algo terrible se veia. Mar adentro una gigantesca nube de tormenta se estaba acumulando, no era una nube ordinaria, mucho mas frio que el que sintió antes venia de ella. Marisa fue rapidamente, la pocion me protegera, pensó.
Alli vio a Septuno. Seguia todavia con su forma de gigante de agua invocando esa terrible nube.El mar estaba repleto de olas. Marisa empezo a cargar su Misil Magico.

- ¡Septuno! -grito Marisa, disparó su hechizo.

Una explosion se produjo en el gigante, pero no era suficiente para detener su forma de gigante. Septuno paro de potenciar a la nube.

-¿ Como sobreviviste?

-¿Que quieres hacer con esto?

-Piensas que soy un peligro, pero no quiero volver a estar encerrado en esa tonta gema. No tengo opcion, si quiero ser libre y volver con los mios debo destruir el Templo Elemental y todo lo que tenga que ver con ello.

-¡ No podras hacer eso !

Marisa empezo a volar nuevamente alrededor de Septuno. Del mar una mano de agua agarro a Marisa sin dejarla escapar.

-¡Me estas cansando! No vas a querer terminar en el fondo del mar de nuevo.

-¡ No podes hacer eso! Hay gente que vive cerca del templo y no tiene nada que ver con tus asuntos.

- No son mi objetivo.¿No entiendes? ¡Deja de molestarme!

En medio del atardecer, cuando la luz del sol casi se apaga, una bola de luz pasaba flotando por encima del agua.
Septuno y Marisa dejaron de pelear, curiosos de lo que era. A pesar de que era muy pequeña , era hipnotizante verla.La luz tomo forma de humano, pero la oscuridad no dejaba verle la cara. Lo unico que se vio claramente es que en su mano tenia la Lágrima del Océano.

-¡No! ¡No puedes hacerme esto!- grito Septuno, estaba aterrado.

Marisa cayo al agua y quedo flotando. La Lagrima del Oceano empezo a calmar los fuertes movimientos del agua y tranquilizo las correntadas sobrenaturales que habian provocado la presencia de Septuno en el mar. Se estaba debilitando. A pesar de esto, la nube mantenia su tamaño y negrura.
El gigante de agua se desarmo volviendo a ser solamente agua, Septuno cayo al mar y quedo flotando.

-¡Que tempanos es eso!¡No puedo controlar el agua!

- ¡Septuno estas derrotado! Grito Marisa, mientras agarraba su escoba y volaba hacia él.

- No bruja, hoy no me capturas.

El Nine hizo un movimiento con sus patas , invocando un hechizo. Su cuerpo empezó a evaporarse y como vapor de agua se escapo hacia la nube.Literalmente se esfumó enfrente de ella.

Cuando reacciono sobre lo que habia hecho esa "luz" ,Marisa miro rapidamente para buscarla, pero era tarde. Habia desaparecido y la Lagrima del Oceano tambien.
La bruja estaba demasiado furiosa.

No habia nada mas por hacer, Septuno escapó y la Lagrima seguia extraviada y en manos de quién sabe que era esa "luz".
Marisa emprendió vuelo al pueblo,debia contarle a Katch lo que habia pasado y sobre todo tomar un merecido descanso.