Capítulo 2

67 7 8
                                    

ANTES

ALLYSA

-Que va tíaaa! ¿Toda noche por ahí? Que va, que va, ya sabes que a mi eso no me va. - dijo Sarah.

-Pues a mi me parece una buena idea. - respondió Kya riéndose y haciendo ojitos a Maya. 

-Mirad chicas, propongo hacer una cosa - intervino la diligente de Olivia - Podemos ir con el coche de Tara, nos pasamos por la coctelería, nos tomámos algo, y directas a la discoteca. 

- ¡Esta idea me gusta más! Pero... No nos vayamos muy tarde, ya sabéis que no aguantaré despierta, últimamente estoy agotada...  

-Será Allan, que te está volviendo loca... ¡jajajaja! -dije en tono burlón.

-Que graciosa Ally... No quiero nada con Allan, por dios - afirmó mintiendo.

-Bueno tías, vayamos al caso, ¿quién se apunta? - interrumpió Oli con mucho entusiasmo.

-Tara y yo vamos seguro, ¡además contamos con su coche! - dijo Kya gritando y brincando.

-Contad conmigo tontas... -afirmó Maya sin mucho ánimo. 

-Pues chicas, yo no sé que hacer. Sabéis que el mundo de la noche no me va mucho. Pero si tantas ganas tenéis... Está bien. -asentí finalmente después de darle tantas vueltas a la cabeza. 

-Sólo faltas tú Sarah, ¿qué dices? -comentó Oli en tono burlón.

-Está bieeeen pesadas. Sólo lo haré por vosotras, y por que no quiero que luego me restreguéis por la cara lo bien que os lo habéis pasado sin mi. 

Y esta era mi vida. Ellas eran básicamente todo lo que tenía. Tara era la más guapa, la típica ligona, morena con ojos verdes, que dejaba boquiabierto todo aquel al que le pasaba por delante. Luego estaba, Olivia (Olli), la lista y espabilada. Era una crack en literatura y le encantaba presumir de su pelo largo y rubio. También estaba Kya, la indiferente. Le daba igual su aspecto, aunque no era nada desagradable. Solía ir vestida con deportivas. Era cómoda, pero aun así, estaba guapa. Por otra parte, teníamos a Maya, la loca, la aventurera, la transparente. Solía hacer todo lo que Kya le decía. Dentro del grupo, eran las mejores amigas, ya que, llevaban años juntas. Ella era castaña de ojos marrones, muy simple. Y por otro lado, estaba Sarah, la indecisa, la patosa y la empanada. Le daba poca importancia a los problemas, y no planeaba absolutamente nada de su vida, iba a lo loco. Y por último, estaba yo, Ally, la inteligente y estudiosa. La que apenas se relacionaba con nadie más que su grupito de amigas. La que odiaba la noche, las fiestas, la bebida... Todo. Era más de películas en casa, o de leer libros sin parar.

Pero al fin y al cabo, las personas cambian, ¿no?

Entre rejasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora