Enamorándome Por Primera Vez

WASHINGTON

Jared coloca la fotografía que compró en la inauguración justo detrás de su asiento y pone la foto que les tomó Marcella sobre su escritorio. Trataba de concentrarse pero no dejaba de pensar en ella, miraba la foto y deseaba cruzar la puerta y regresar de inmediato a Florencia.

Había llegado muy temprano y revisaba la bandeja de entrada de su correo que se encontraba completamente saturada. Se encontró con varios mensajes de Laura reclamándole el porqué no llegó aquella noche y otros cuantos de citas antiguas cuyos nombres ya no le eran familiares y que empezó a mandar a la papelera, dejando únicamente los de carácter  laboral.

Freddy fue uno de los primeros en llegar a la empresa y entrar a la oficina de Jared.

-¿Y bien? -Le preguntó mientras se acomodaba en un sillón que estaba en la oficina. -Cuéntamelo todo, ¿Cuántas conquistas amigo? las italianas son muy sexies y lindas, anda Adonis ¿Cuántos corazones rotos dejaste en Florencia?

-Sólo uno Freddy y no fue una conquista, ella es real.

-¿A qué te refieres con real?, no entiendo.

-Me refiero a que me enamoré.

Freddy no pudo contener su risa, se reía tanto que las lágrimas le bajaban sin poder contenerse.

Jared pacientemente esperó que su amigo terminara de burlarse y luego agrega: ¿Ya terminaste de reírte? o debo esperar un poco más.

-¿Qué te pasa Jared? Vienes muy sensible, ya hablando en serio que tal la chica eh.

Jared da la vuelta a la foto que tiene sobre el escritorio, Freddy la toma y la observa.

-Bueno hermano has salido con mejores, es decir la chica está linda pero no es tu tipo, aunque mira ese vestidom debió portarse como una profesional en la cama para que hasta foto de ella conserves.

Jared le quita la foto y le agrega: -Freddy nos conocemos desde la universidad, pero si te vuelves a expresar así de Marie, te rompo la cara.

-Ahhhh picarón se llama Marie, ummm repito de seguro te hizo muy bien el trabajito para que te acuerdes de su nombre también.

-Estoy hablando en serio Freddy, ya basta. -Jared está molesto y su amigo lo nota. -Y apaga esa estúpida sonrisa. -Continua Jared. -O te tendré que pedirte que te retires de mi oficina.

-Calmado, calmado, de lugar de venir relajado por las vacaciones vienes muy a la defensiva, está bien lo siento, ya no haré ningún comentario al respecto ok. ¿Y dime quieres hablarme de esta Marie?

-No, no quiero y te agradezco que me dejes solo.

-Bueno, bueno, bueno, que carácter te andas, nos vemos luego cuando se te pueda hablar. Freddy sale y Jared le pone seguro a la puerta, se acuesta en el sillón que su amigo acaba de desocupar y cierra los ojos. Recuerda el primer beso que le dio a Marie, su sonrisa, aquel acento que le encantaba, sus ojos castaños y como brillaban aquella tarde cuando la conoció, su meditación fue interrumpida al tratar alguien de abrir la puerta.

Jared se levanta pensando que es Freddy y la abre bruscamente pero por el contrario es otro socio Wally el que se encargaba de Mercadeo. Wally se podía decir que era el tranquilo del grupo, no era muy alto, usaba lentes por un problema de miopía y nunca participaba en las reuniones sociales por lo que era tachado de aguafiestas y santurrón. Wally era el único casado pero aún no tenía hijos, era afroamericano y siempre tuvo una buena relación con Jared, que a diferencia de los otros, respetó las decisiones de su compañero de no asistir a las fiestas o clubes.