EL JARDIN GIARDONO DI BOBOLI

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Eran las 10:00 a.m. cuando ingresaron al jardín. Jared cordialmente pagó la entrada de Marie después de casi dos minutos de discutir para convencerla que lo dejara hacerlo. El lugar era realmente hermoso, él amaba la naturaleza y ese jardín era una obra de arte botánica.

Marie vestía jeens, sus acostumbradas tennis deportivas y una blusa manga larga con botones, color rosa. Se recogió el pelo en una cola y le colgaban unos curiosos aretes en forma de delfín.

Boboli estaba lleno de esculturas de estilo manierismo y neoclásico, lagos, grutas, miradores, senderos. Marie llevó a Jared al Palacio Pitti para admirar el museo de la porcelana, y a la Grotta del Buontalenti, todo era como un sueño, a pesar de que a Jared el arte no le era muy llamativo, lo que veía en aquel jardín lo hacía sentirse como si fuera transportado a otro mundo. No perdía la oportunidad de tomarle fotos a Marie y aprovecho cuando se encontraban en la gruta Beauties para pedirle a un turista que les tomara una juntos.

Caminaban tranquilamente por los senderos conversando sobre el jardín, como siempre Marie tenía toda la información y ponía al corriente a Jared. Aprovechando una banca en el camino se sentaron a descansar, para luego continuar el recorrido.

-¿A qué te dedicas Jared? lo único que me has contado es que estas de vacaciones, te hospedas en casa de un amigo, te gusta la naturaleza y coleccionas antigüedades, el arte no es tu punto fuerte y al parecer no estás casado porque no te veo anillo a menos que seas de esos hombres que lo ocultan y pretenden ser solteros para lograr uno o varios affaires.

Jared un poco aturdido por las repentinas afirmaciones de Marie contesta: A todo lo que dijiste sí menos a lo último.

Sus miradas se encontraron y ambos sonríen tímidamente, parecían adolescentes cortejándose pero sin tener la menor idea de cómo actuar.

-¿Y qué quieres saber de mí? -Pregunta lo que quieras.

-"Lo que quiera" -Repite Marie pícaramente. - ¿Se aplican restricciones?

-No Marie sin restricciones, adelante.

Marie se queda pensativa como meditando con que iniciar el interrogatorio y en ese momento hace la primera pregunta: -¿Por qué no te has casado aún?, es decir, eres muy atractivo, y he visto como te miran las mujeres, puedes tener a la que quieras a tu lado, ¿Por qué estas solo?

Jared quedó atónico, lo último que se imaginaba era que le preguntara eso, "eso precisamente", sonrió al ver en el apuro en que se había metido pero él mismo dijo "Sin restricciones", así que tendría que contestar quisiera o no.

-Verás Marie, aunque tienes razón en tu comentario el asunto es.... (Se detiene pensando que decir) -El asunto es que creo que no me he abierto tanto a una persona como para dejarla entrar, ya sabes, enamorarme para mí es tema desconocido, sí he estado con algunas mujeres (Con muchas en realidad pensó en silencio), pero ninguna era la correcta, pero he cambiado, me refiero a que deseo algo diferente, uno madura sabes, y al ver a Henry mi amigo, con su familia, yo jamás he envidiado nada pero a él sí lo envidio, me gustaría tener lo que él tiene, esposa, hijos, una vida con ellos, es todo.

Marie escuchaba atentamente, se identificaba un poco con él, en el sentido de encontrar a alguien y formar un hogar sólo que en el caso de ella no había salido con muchos hombres, dos que recordara y no por mucho tiempo, ellos buscaban únicamente una persona con quién pasar el rato, divertirse y tener sexo sin compromisos de por medio, cosas que a ella no le llamaba la atención, tanto así que jamás había estado con alguien íntimamente, su sueño era entregarse al verdadero amor, nunca esperó un príncipe azul pero sí un hombre que la valorara y respetara, no era mucho pedir, debía de existir algún espécimen con esas cualidades ¿O no?

-Y dime. -Continúo Marie. -¿A qué te dedicas?, ¿En qué trabajas?

-Soy el vicepresidente de una empresa transnacional llamada Fresh Fruit.

-No lo hubiera imaginado. -Agreo Marie ciertamente sorprendida. -No pareces ser del tipo empresarial

-Es una historia algo curiosa. ¿Quieres escucharla?

-Sí, claro. -Responde ella.

-Bueno, trataré de darte la versión corta. Todo comenzó en la universidad, en clases de mercadeo el profesor nos dejó un proyecto, teníamos que levantar una mini empresa que proporcionara un buen producto al cliente y que dejara a la vez ganancias productivas a los socios. Me tocó trabajar con un grupo interesante, en lo personal siempre he sido muy bueno en finanzas, otro compañero Freddy en administración y así todos contribuimos con un granito de arena. Investigamos el mercado averiguando que producto consumía más la gente y que a la vez fuera accesible de adquirir y nos dimos cuenta que las frutas eran buen negocio, sólo que los precios y la calidad muchas veces variaban y no eran los mejores. Así que lo que empezó como un simple proyecto para ganar un curso de la Universidad se convirtió en nuestro sustento y una de las compañías más sólidas y reconocidas del mundo, y en cuanto a la vicepresidencia, aunque no lo creas lo dejamos a suerte para evitar conflictos, éramos sólo unos muchachos, en una bolsa pusimos los cargos y a mí me tocó la vicepresidencia, a Freddy la presidencia y así sucesivamente por lo que no hubo mal entendidos, sin trampas el destino eligió.

-Entonces. -Anadió Marie pausadamente: -¿Tienes mucho dinero?

-Sí, Marie, pero no creas que el dinero te da siempre todo, puede cubrir algunas necesidades materiales pero no te da la felicidad.

-Entiendo. -Dijo ella, agachando la cabeza. -Y ¿Has viajado frecuentemente?, me imagino que debes conocer muchos países teniendo los medios económicos para hacerlo.

-Sí, he conocido algunos paíeses en las giras que hemos hecho, pero en plan de turismo este es el primero, más preguntas señorita.

Marie lo mira con duda, como cuando quieres saber algo pero a la vez no. Continua hablando: en realidad tengo muchas cosas que me gustaría saber de ti pero (guarda silencio), hay algo en particular que me inquieta y (se muerde el labio y ve hacia otro lado sin saber cómo seguir)

-Marie dije sin restricciones, ¿Qué es lo que tanto te inquieta?

Ella aún con la mirada desviada señala: -Ya van dos ocasiones que has querido besarme y no lo has hecho, una en la cafetería y otra en el salón de fotos, ¿Por qué no lo hiciste?

A Jared se le fue el color del rostro, quedó pálido, otra cosa que jamás sospechó que ella peguntaría, ni siquiera creyó que ella se diera cuenta de eso, trago saliva sin saber qué contestar.

-Ah sido difícil mi pregunta eh. -Murmuro Marie. -No importa no tienes que darme ninguna respuesta, voy a respetar tu silencio.

Pero Jared respondió: - Primero porque honestamente no sabía si me ibas a corresponder, segundo porque no sabía si era apropiado hacerlo apenas conociéndote y tercero porque eres especial y no quiero arruinar lo que tenemos.

Marie se acerca casi pegando su rostro al de él y le dice: -¿Y qué es lo que tenemos?

El corazón de Jared dio un vuelco, sentía la respiración de Marie en su rostro, tenía un aroma dulce a nueces y miel, no lo resistió más, se aproximó a ella con precaución para ver su reacción pero al no dar muestras de rechazo la besó, no con pasión como acostumbraba hacerlo, sino con ternura, fue un beso exquisito, los labios de Marie parecían acomodarse perfectamente en los de él, no sabe cuando duró aquel beso pero lo disfrutó, un escalofrío le recorrió la espalda. En ese minuto se dio cuenta que desde que estaba con ella el vacío en su pecho había desaparecido, y en cuestión de segundos comprendió que se estaba enamorando de Marie.

Luego de aquel beso, la miró directo a los ojos. Marie lo observaba con curiosidad en espera de que él dijera algo, pero Jared seguía analizando toda la información que le llegaba. Ya hacía tres días que la conocía y el tiempo más bien parecía no alcanzarle para compartir a su lado, cuando no estaban juntos la extrañaba y deseaba verla al día siguiente, sí, estaba enamorado pero¿Cómo sucedió eso?. Jared se levantó y le hizo señas a Marie para que le diera un minuto, se alejó un poco, la cabeza le daba vueltas, ¿Será ella? Se decía, ¿Será ella?, tiene que ser.

Marie preocupada por el repentino comportamiento de Jared se colocó a su lado y le preguntó: -¿Te sientes bien?

Él la miro y con una amplia sonrisa y le contestó: -"De maravilla".

Enamorándome Por Primera Vez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora