Astika "Ka" Kapoor, es una joven universitaria hindú que después de graduarse consigue trabajo como cortesana en la mansión de Rohan Kumar, un aristócrata viudo.
La pasión de Ka es bailar, pero no hacerlo como cortesana, por lo que renuncia a su tra...
La verdad es que necesitaba pensarlo. Mis nervios me invadían cada noche, por lo que no podía dormir, sólo miraba por la ventana la luna que mis cortinas anaranjadas me tapaban con el helado viento. Incluso a veces sollozaba... No veía mi futuro, mi mente y mi actitud positiva estaba bloqueada, sólo miraba el papel con el número del señor Kumar.
Un día, mi tía Shanti invitó a la familia de una amiga llamada Priya, a cenar,tomar el té y conversar. Sin embargo, ella tenía trabajo pesado ese día y no tendría tiempo de limpiar la casa para las visitas, así que me pidió si lo podría hacer yo... Y como soy una angelita... Dije que sí.
La verdad es que me extra-aburro cuando hago eso, pero sólo basta con poner música y hago todo en un abrir y cerrar de ojos, pero a veces me tardo porque sólo canto y bailo.
El despertador empezó con su "PI, PI, PI, PI" lo cual me molestaba, y por eso lo tiré al suelo con enfado. Me puse la almohada en mi cara, bostecé y dije con ojos ni medio abiertos y con una flojera extrema...
- Ka... No olvides... Limpiar la casa...- dije como si estuviera borracha hasta que reaccioné.- ¡La casa!
Me levanté, me lavé la cara, me hice un molote imperfecto (tal y como me gusta), puse mi memoria USB con mis canciones preferidas en el stereo, tomé mi escoba y la música comenzó, era la canción de Michael jackson, mi preferida aparte de Thriller, Love Never Felt So Good...
¡Baby!, love never felt so good And I doubt if it ever could! Not like you hold me, hold me Oh baby, love never felt so fine...
La verdad es que tengo un acento inglés... pésimo, y canto como gallo a medio morir, tratando de cantar para el rancho...
Limpiaba y limpiaba con mi escoba, hasta que se reprodujo la otra... Let it go! Let it go!
Can't hold it back any more. Let it go, let it go! Turn away and slam the door...
Desde la ventana vi como mi vecino se puso sus audífonos.
Ordené la sala y la cocina, lavé los trastes, limpié los retratos, le quité el polvo a la alfombra y jugué un poquito de Just Dance.. jejeje. Recibí una llamada de mi tía Shanti:
- Hola Ka, todo bien?- preguntó.
- Sí tía, ya estoy por terminar...
- Que bueno, antes de cambiarte podrías acomodar la mesa?, ya voy a regresar para hacer la comida.
- Claro...- comí una papa frita.
- No comas las papitas, son para Priya, son sus favoritas y sólo se consiguen en Fiyi...
O-O...
- Como digas- contesté mientras escondía la bolsa de papitas fiyianas.
- Gracias, bye- colgó.
Puse el celular en su lugar y comencé a buscar una engrapadora para cerrar bien la bolsa y que mi tía no se diera cuenta. Entré a la vieja oficina de mi tío Raj, al que extrañaba mucho; era un sótano, pero mi tío lo convirtió en su oficina, pero al fallecer, mi tía lo empezó a usar como un sótano pero nunca movió las cosas de mi tío.
Al subir, sólo se veía una luz prendida en el escritorio.
- Debe haber por aquí una engrapadora...
Dije mientras meneaba cajas y papeles, hasta que encontré un papel que decía algo...
Mi sobrina tiene 25... Es una excelente bailarina... Muy inteligente...
Era una carta de solicitud de matrimonio. Escuché el sonido del carro de mi tía Shanti llegando, dejé la carta rápidamente y bajé. Engrapé la bolsa, dejé la engrapadora en donde sea y empecé a ordenar la mesa.
Mi tía abrió la puerta:
- Hola Ka, veo que apenas empiezas...
- Oh, hola, es que buscaba un mantel para la mesa pero no encontré nada... y qué harás de comida?
- Mi especialidad, rollos de pollo con salsa de curry y de postre Kulfi...
Aplaudí con una sonrisa, amo el Kulfi. Recuerdo que cuando íbamos a la casa en la playa de mis abuelos (que heredaron a mis tíos) hacíamos kulfis y me encantaban!
Terminé de limpiar la mesa y me fui a cambiar. Me puse una salwar naranja, me puse un poco de maquillaje y me hice un peinado sencillo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuando bajé me senté en una de las sillas de la barra de la cocina, quería saber sobre esa solicitud de matrimonio y dije:
- Emm... tía, quiero preguntarte algo...- dudosa.
- Cariño, si es por lo de la oferta de ser cortesana, sabes que no tienes que aceptar...- me contestó mientras servía en un plato grande los rollos.
- No es eso... Es sobre algo en el...
Sonó el timbre de la casa.
- Deben ser ellos- dijo mi tía sonriente. Abrió la puerta y eran ellos.
Empezó a saludar "¿cómo estas? bienvenidos!..." . Me levanté y también saludé. Todos se sentaron en el sofá y empezaron a hablar. Mi mamá sirvió té y yo me sentía algo incómoda, pero comencé a hablar con la hija menor de Priya, Tia. Tenía 7 años, era una niña con historias interesantes.