¿Amor?

Sebastian

-Bueno, hemos llegado a este punto y no hay retorno, no podemos ser como antes.

-¿Por qué lo arruinaste todo?

-Yo no tuve la culpa de nada, fuiste tú, di lo mejor de mí.

-Con tus groserías, tus malos tratos, ¡vaya! Sí que diste lo mejor, ¿sabes qué? no voy a discutir más, mañana llevare al niño con mi mamá y después nos iremos, ya no podemos estar más contigo.

¿Qué podía decirle? en serio que di lo mejor de mí, me case con ella, le di 18 años de mi vida o hasta más, la verdad ya no me acuerdo, pero di todo por ella y sale con esas cosas, no lo puedo creer, me esmero diario en el trabajo para darle a ella y a mi hijo la vida que se merece y sale que yo la maltrato, enserio que no lo puedo creer, yo la amaba tanto, de verdad que sí, como olvidar el primer día que la conocí, ella iba con una blusa amarilla, unos pantalones de mezclilla que se le veían muy bien y unos zapatos blancos, con ese pelo que le llegaba hasta los hombros y esa sonrisa que a cualquiera enamoraría y esos ojos negros, que me mataban, Alejandro saco esos ojos, espero que tenga una larga fila de muchachitas atrás de él, como su padre.

Esos días en la universidad cuando podía hacer lo que sea y nadie me reprochaba nada, que buenos tiempos, mírate ahora, casado, con un empleo de 8 horas, que ni si quiera te gusta, ¿Cuántos kilos has aumentado desde que te casaste? ¿Unos 10? ¿Qué nos pasó? No trabajamos en ese cuerpo por nada, no nos parábamos temprano a correr por nada ¿qué carajos sucedió? Pasamos de ser un atleta, el capitán del equipo de básquetbol, a un viejo que se la pasa poniendo números en la computadora todo el día ¿Habrá sido Camila? Que desde que te casaste con ella cambiamos nuestra forma de vida, preferiste pasar con ella, ir a caminar por los parques agarrados de la mano como chamacos de secundaria a que ir a entrenar con el equipo, pero que bien nos la pasábamos, ¿recuerdas el primer beso? El mejor de toda mi vida, que nervioso estaba, no sabía que iba a pensar ella de mí, pero quién lo diría, ahora estamos casados, con un hijo y estamos a punto de separarnos.