¿Juntos?©

Capítulo tres:Una esperanza

Capítulo tres:Una esperanza.
Narra Amaya.

Me levante una hora antes de lo usual,me duche y vestí,al bajar fui la primera,ya estaban las mucamas en la cocina.
Como no había nadie con quien platicar subí arreglar mis cosas,mientras guardaba todo vino a mi mente el.
¿Le gusto? No creo...

Estúpidamente suspire al pensar en el,¿porque hice eso? Se supone que amo a Evan.

Aunque él nunca vaya a mirarme de otra forma,para él solo es ella.
La chica perfecta es ella,tal vez ya es hora de que haga mi vida,tengo derecho a enamorarme de nuevo,de tener pareja e incluso casarme.

Tome mis cosas y baje,al llegar a la puerta Evan estaba ahí.

–¿Lista?–preguntó con una sonrisa.

–No,hoy me llevará Nicolas–dije con una sonrisa.

El solo se limitó a sonreír y subió a su auto.
Lo vi perderse en la calle y después vino Nicolas.

–Amaya te vez hermosa–dijo mirándome.

Ante eso me fue imposible no sonrojarme.

–Muchas gracias,Nicolas–dije subiendo al auto.

Cuando llegamos al hospital Evan ya me esperaba ahí.

–¿No deberías estar adentro?–le pregunté.

–Tenemos que hablar–dijo serio,muy serio.

Nos alejamos un poco para poder hablar.

–¿Qué pasó?–pregunté.

–No me gusta,no quiero que salgas con el–dijo muy enojado.

–Discúlpame Evan pero ya no soy una niñita,se muy bien lo que hago,además yo no te digo con quien salir,a mí no me cae Emalene y aún sigues con ella–dijo ella con una rabia que no pudo ocultar.

–¡Eso es diferente!–grito exasperado Evan.

–Es lo mismo,así que saldré con Nicolas las veces que yo quiera–dijo antes de darse la vuelta e irse.

Entro al hospital y fue a su lugar donde le tocaba hoy.
Pasó la mañana ahí,a la hora del almuerzo solo bajo a la cafetería del hospital,ordenó y se sentó.

Realmente aún no entendía porque Evan se había puesto así,a él no tiene porque molestarle,en tiene novia y le a dejado muy en claro que sólo la ve como su hermana.

¿Habría cambiado de opinión?

No es posible,además él dice amar a su novia,no puede estar ¿celoso?

Casi no habría probado bocado cuando Evan se sentó frente a ella.

–Amaya–le dijo llamando la atención de la rubia.

–¿Qué quieres?–dijo indiferente.

–Discúlpame,no sé que me pasó,pero es que de verdad no me cae Nicolas siento que te hará daño–dijo entre dientes.

–Muchas gracias por preocuparte pero no quiero que te metas,si me lastima o no es muy mi problema–dijo antes de pararse.

–¡Amaya!–dijo casi gritando logrando que la rubia no se fuera–no puedes pedirme eso,eres como mi hermana y mi mejor amiga–dijo serio.

–Lo sé,pero hay cosas en las que prefiero que te mantengas al margen–dijo antes de irse.

Después de ese encuentro en la cafetería no pude evitar sentirme muy mal.
Pero realmente me molesta que quiera mandarme,no soy una niñita además él sabe muy bien que lo amo,pero él ya tiene novia y yo no voy hacer nada para separarlos.
Tengo derecho hacer mi vida también.