Psychopath // Troye Sivan

Final - Parte II

La sangre chorreaba por sus dedos.

La adrenalina ambos la tenían por las nubes.

Junto a esa mirada desquiciada en los ojos.

Y una sonrisa macabra en la cara.

Por donde pasaban dejaban detrás suyo un camino de sangre.

Tardaron menos de lo que pensaron en llegar al pasillo que llevaba a la salida del hospital.

Troye se le escapo una sonrisa al ver a su médico muerto.

Y Nara pudo escuchar como susurraba bajo, muy bajo

"Karma"

-Tenemos que irnos ya. No sabemos cuanto tardara en llegar la policía.

Ambos corrieron hacia la salida casi como si dependiera su vida en ello.

Cuando pasaron la puerta ambos siguieron corriendo sin parar, sin mirar atrás.

Hasta estar muy lejos.

Cuando ya sus pulmones no daban a basto pararon de correr.

Troye sonrió victorioso y levantó las manos al cielo.

Nara saltó en los brazos de Troye volviendo a romper una norma.

Pero esta vez recibió un cálido abrazo y un beso.

-Cariño, lo hemos logrado- se rieron con ganas.

-Te amo- le susurro Nara casi en un mar de lágrimas.

El la miro sin expresión alguna.

-Yo solo...

-Por favor- interrumpido ella dolida -, no me digas que solo me ves como una amiga. Es la peor manera de matar a alguien.

El suspiró.

-Es que si ni siquiera te considero mi amiga.

Y el mundo de ella se derrumbo.

Troye la bajo, aun con el semblante serio, y se sentó en las escaleras de un edificio.

Mientras ella se comenzó a poner nerviosa, su respiración comenzó a agitarse mientras las lagrimas fluían por sus mejillas. Sentía que las piernas le fallaban bajo su peso, y se arrojo de mala manera a la escalera intentando poner todos los tornados que sentía dentro de ella en orden.

Pero había un problema

Todo ella era caos y tormenta.

-Entonces, porque estas conmigo- preguntó con calma fingida, aunque sentía como se derrumbaba por dentro.

-Ya lo entenderas- se limito a responder. Ella se levantó entre lágrimas, se disponía a salir de allí, muy lejos. Cuando la mano de Troye agarró la suya- Por favor, quédate conmigo

Era la primera vez que le pedía algo.

No tenía fuerzas para soltarse del agarre, ni tampoco para decir que no, porque ademas sentía que le estaba dando otro ataque de pánico. Se sentó al lado de él.

Este la medio sonrío, como diciendo que lo sentía mucho.

Pero Nara no se giró para comprobarlo.

Pasaron un par de horas, y sea lo que sea que estaban esperando no sucedía.

Nara estaba apunto de marcharse, podia notar como cada segundo que pasaban uno al lado del otro su corazón se rompía un poco más.

Ella estaba perdida entre sus pensamientos.

Cuando escuchó un coche aparcar delante suyo.

Troye se levantó de golpe y se llevo las manos a sus labios.

Nara lo miro incrédula.

Era la primera vez que lucía vulnerable.

Un chico de pelo rubio y gafas bajo del coche.

Su mirada desprendia sorpresa y las lágrimas comenzaban a amenazar salir de sus ojos.

Su hermano.

Tyler.

Troye corrió lo poco de camino que los separaba y saltó a sus brazos llorando.

Tyler escondió su cara en el cuello de Troye, mientras que las lagrimas salían de sus ojos.

-Joder, Troye. Como...?- dijo el rubio de gafas.

-Cállate- le interrumpió Troye de la manera más bonita que podia existir.

Con un beso.

La chica oasis, emitió un lloro silencioso.

Troye nunca había sido de ella.

La había utilizado.

El ni si quiera era su hermano.

Era su novio.

Seguramente todas las noches que había pasado fuera del hospital había estado con él.

Recuerdos recorrían su mente.

Mientras lloraba cada vez más fuerte.

En un abrir y cerrar de ojos Nara sostenía la pistola con el cañon pegado a su barbilla con manos temblorosas.

-Nara...- dijo asustado, él ya estaba en el suelo de pie, agarrando con fuerza la mano de Tyler. Mientras el otro observaba la escena con miedo.

Comenzaron a caerle lágrimas silenciosas, no sabía como había llegado a ese extremo de desesperación, de ansiedad por miedo a separarse de él.

Le sonrió y no bajo la mano, más bien se la puso directamente pegada a la sien mientras una risa se le escapaba casi sin querer de los labios.

-¿Qué fui yo para ti? Dímelo, quítame la duda. - Troye emitió un sollozo ahogado, y negó con la cabeza.

-Eres una persona muy importante... la que más- Troye se fue acercando lentamente a ella mientras Tyler se quedaba detrás observando. Sabiendo que lo que mejor que podía hacer por Nara era quedarse al margen.

-Mientes ¡Mientes!- respondio a gritos, haciendo que Troye se apresurara a hacercarse a ella, y cogiera su cara entre sus manos.

-Nara por favor mirame a los ojos y verás que te digo la verdad.

-¿Me dejaras?

-Nunca

-Prométemelo. Prometeme que no dejaras que me pase nada. Por favor.

-Te lo prometo.

-Ahora dime que me quieres a tu lado, dime que me amas como nunca has amado a nadie.

Él empezó a llorar, acercó su cabeza contra su cuello abrazándola lo más fuerte que podía. Y aunque se sentía patético y ridículo, no quería que acabara.

-No puedo hacerlo, Nara. Porque te estaría mintien...

Se escuchó un disparo.

En un abrir y cerrar de ojos Troye se lleno de sangre.

Pego un grito desgarrador, llevando sus manos a su cabeza mientras se tiraba del pelo.

Observando el cuerpo inerte de Nara echado en el asfalto.