Giro su cabeza dejando a la vista una hermosa cara sin imperfecciones, unos ojos azuladamente profundos casi dejando a la vista su alma, unos curvados labios de color azul eléctrico. me queda mirando con una expresión sonriente y dice :
-Por fin logro conocerte en persona, eres mas atractivo en persona.
Esas palabras cayeron como un camión cargado de plomo sobre mi cabeza. lo que acaba de decir significaba que ya me conocía con antelación a este momento, me quede frio como un pingüino esperando que mi cuerpo reaccionara.
tomando la ventaja en un movimiento rápido y brusco pero a su ves delicado se abalanza sobre dejándose caer en mis brazos. Pierdo el equilibrio cayendo sobre mi espalda de manera en la que ella cae sobre mi pecho con ambas manos, nuestras piernas quedan cruzadas, levantado delgado vestido que llevaba puesto dejando ver un poco mas arriba de sus muslos.
-lo siento deje que mi emoción se apoderada de mi.
- No te preocupes, pero creo que deberías taparte.
al estar sobre mi sentía como su cuerpo ardía de vergüenza, no me tomo mucho tiempo el darme cuenta que su vergüenza provocaba un bloqueo de su cuerpo que no lograba moverse así que me tome la atribución de quitármela de enzima y acomodar la poca ropa que llevaba.
Debo sacarla de aquí, pero no será fácil, si tenemos surte no encontraran el cuerpo del otro guardia tirado en el pasillo, ahora que lo pienso debí dejarlo oculto bajo el sillón.
-!tap, tap, tap. pasos se escuchan al otro lado de la puerta la cual se encontraba cerrada sin seguridad. tome a esta chica lo mas rápido que pude y nos metí dentro de un pequeño closet en la pared. los guardias entraron buscándola de manera desesperada como si fuera un objeto. no lograba entender el motivo de este encuentro no el por que de estar allí, pero lo único que quería hacer era volver a casa, pero ahora tenia otro problema.
¿Qué es lo que hare con la chica? no puedo dejarla tirada en la calle a su deriva, lo mas correcto seria ocultarla en mi hogar unos días o irnos a un departamento unas semanas.
Vuelvo a la cruel realidad, los guardias buscan desesperador a la hermosa mujer que tengo entre mis brazos en este momento. en un abrir y cerrar de ojos salen del cuarto buscando de dormitorio en dormitorio.
una dulce y delicada voz entra por mi oído llegando a mi cerebro vomitando flores a su paso.
-¿podrías soltar mi pecho? por favor...