Querido Dylan:
Recuerdo el quinto día del curso.
Lo único que hacía a la hora del receso era comprar unas galletas e irme a sentar al rincón pero está vez decidí hacerlo del lado contrario. Ya que tu ya no te sentabas en nuestra fila... Te sentabas con las niñas bonitas del salón. Todas delgadas... con el cabello largo y sedoso.
Todo lo contrario a mi. Había una en especial. No le quitabas la vista de encima era obvio que te gustaba. Era delgada. con el cabello más largo y sedoso que había visto en mi vida, tenía los ojos rasgados y su nariz un poco torcida pero eso no opacaba su belleza.
Era tan linda... Como no habría de gustarte si era tan Hermosa como tu..
Me senté detrás de ella esperando que te sentaras junto a mi.El receso llegó a su fin y los alumnos comenzaron a entrar. Tu como siempre llegaste tarde. Al entrar ibas con tu celular y no te fijaste que estaba sentada detrás de tu chica. Cuando me miraste inmediatamente agache la mirada. Pero la puse de nuevo en ti puesto que te vi hablar con Mary a susurros no escuche mucho de su conversación.. Sólo hubo una cosa que jamás podré olvidar de esa tarde...
Tu me miraste muy enojado y susurraste para ti mismo Maldita gorda..
Atte: S