Cap.19 (segunda parte)

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La maldita fiesta esta en su apogeo. Y como lo había mencionado antes, en estas fiestas nada cambia. Lo mismo de siempre. Chicos a punto de tener sexo, otros borrachos y personas bailando escandalosamente en medio de la improvisada pista que hay. Frunzo el ceño al darme cuenta que Michael no esta aquí conmigo, él mencionó que iría a la cocina por algo de tomar, la verdad es que no alcance escuchar lo que dijo.

Comienzo a caminar entre toda la gente que hay aquí. Dándome cuenta que toda la maldita escuela podría estar aquí. A lo lejos puedo visualizar a Luke con una vaso rojo sobre su mano, ni siquiera me había dado cuenta que él seguía estudiando aquí. Sus ojos azules se encuentran con mis ojos cafés. Rápidamente aparto la vista. No soy amiga de él. Nuestra amistad, terminó. Todo se fue por la mierda. Ignorando el hecho de que sé que él me sigue viendo continuo caminando en busca de Michael, quien seguramente ya ha de estar ligando y aquí es cuando me molesta el hecho de que me haya obligado a venir con él, para que luego se largue con cualquier tipa y no lo vuelva a ver durante toda la noche.

Me giro sobre mis talones. No quiero que Lucas se aparezca por aquí.

Y cuando menos lo pienso Michael esta frente a mi con dos vasos rojos sobre sus manos pálidas.

Oh no, no quiero beber esta noche.

"Stevens, mi latina y gorda amiga." Anuncia con una sonrisa sobre sus labios. "Esta noche, tú y yo nos pondremos la mejor borrachera de nuestra vida, zorra." Sonríe ampliamente, me ofrece un vaso, niego al instante. Éste frunce el ceño.

"Vamos, Alexia. No quieres tomar, ¿en serio?" Alzó una ceja. Sonreí sarcastica.

"No, no quiero. Realmente quiero largarme de aquí. Tu amigo el del cabello Rubio me esta viendo, lo cual me esta hartando." Recriminé.

"Ignóralo." Se encogió de hombros. "Hay que tomar y olvidarnos de todo, de Brooks y del hecho de que no entramos a ninguna clase." Suelto un suspiro al escuchar sus palabras, tal vez tenga un poco de razón, quiero quitarme todo el jodido estrés de volver al maldito infierno, de tener que tolerar más años a todos lo de este jodido lugar.

Tomo el vaso y comienzo a tomar de a poco, Michael sonríe mientras comienza a bailar como loco a mi alrededor suelto una carcajada al verlo hacer twerk, realmente es malo bailando, ¡mierda! Sería pobre si se dedicara a bailar.

Las horas pasan, y yo sigo aquí en medio de la maldita fraternidad tomando como si no hubiera mañana. Importandome una mierda el hecho de que la mayoría de las personas que se encuentran aquí me caen mal.

Levanto la vista de mi vaso, y puedo observar rápidamente a Michael con su teléfono en la mano mientras frunce el ceño, para después beber de su vaso. Meneo mi cabeza de lado a lado. La imagen de Jonathan parece.

Y no una muy buena imagen. Los Angeles. Están presentes. Yo corriendo. Michael corriendo, Alexander haciendo lo mismo, y Luke igual. Jonathan con Renee.

Todo, absolutamente TODO se fue a la mierda.

¿Si esto fuera un sueño? Las palabras de papá en mi mente. Cierro los ojos fuertemente. Sé que no es un sueño, todo ha pasado, lo que Jonathan hizo, sus malditas notas, absolutamente todo.

Tomo otro vaso de plástico lleno de cerveza y continuo tomando, tengo que olvidar de una vez por todas la mierda que ha pasado, o pasó hace menos de un año y medio.

Mis ojos se centran en el piso, unos zapatos que no son mios se encuentran delante de mi. Rápidamente volteo hacia arriba, y aquí esta Alexander sonriendo con su cabello totalmente despeinado.

NOTES (Dean Ambrose)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora