¿Yo, Un Ángel?

Sueño

Estaba sola en un salón de clase, era de noche, el salón estaba a oscuras, no veía nada y eso no ayudaba para nada. Empecé a escuchar pasos, y de lo poco que podía ver, era un hombre, este no se acercó mucho a mi pero igual intente alejarme.

*Extraño*- No temas, en estos momentos soy el último que podría hacerte daño... o pues no tan grave -
Esas palabras no me tranquilizaban... ¡a quien podría tranquilizar esas palabras si suenan a una amenaza!

*Extraño*- se que no suena muy bien pero sólo vengo a cumplir una de tantas tareas-

De la nada aquél extraño empieza como hablar en latín o no se, no lograba identificar ese idioma, mientras lo hacía un dolor invadió mi cuello, era como un ardor y sólo punzante, de forma que pasaban los minutos el dolor se intensificaba no lo soportaba, rogaba por que se detuviera pero al ver que el no me escuchaba lo deje de intentar. Cuando se detuvo agradecí al cielo pero estaba muy débil, soportar ese dolor sin desmayarse es difícil.

*Extraño*- Ya hice mi deber, el primer paso de muchas cosas, Alexa me sorprende que soportaras el dolor, espero sigas asi -

Yo aún desorientada por el dolor

Yo- seguir asi? De que hablas?
* Extraño*- Nos vemos Alexia-

Desperté, me incorpore de manera automática, me quedé viendo a la nada, en mi mente se repetía una y otra vez el sueño, al recordar el dolor lleve mi mano de inmediato a mi cuello no había nada, que extraño, ese dolor era muy real. Mire el reloj, ya faltaban cinco minutos Para que sonara la alarma. No sabía si seguir durmiendo o levantarme, que rea peor levantarme antes de que sonara el terrible despertador o levantarme antes de que este sonara, de tanto pensar eso y perder los pocos minutos de sueño... me acosté con frustración y aplaste una almohada en mi cara. Me quedé sentada unos minutos más, hice mi rutina diaria, me arregle y salí para el Colegio.

Cuando llegué, estaba distraída, como podría explicarme qué semejante dolor no fue real. Creo que todos se dieron cuenta de que estaba rara, es muy raro que me quede callada cuando estamos todos, siempre tengo algo que decir o tema de conversación pero no podía dejar de pensar en lo último que dijo aquel extraño..." el primer paso de muchas cosas".

En el descanso no tenía hambre...UN MOMENTO, ¿YO? NO TENER HAMBRE? Esto no puede ser. En lo que pensaba eso llega Eduardo.

Eduardo- Alexa...¿te encuentras bien?
Yo- si...-
Eduardo- Alexa, te conozco demasiado para que me puedas mentir de esa manera, no te creo, dime que tienes-
Yo- No te preocupes, sólo ando algo pensativa-
Eduardo- De eso me doy cuenta, pero en que?-
Yo- Sólo tuve un sueño bastante raro, se sentía real y pues me inquieta bastante -
Eduardo- Alexa debes tener en cuenta que sólo fue un sueño-
Yo- si lo se...pero no puedo dejar de pensar en eso-

Eduardo se quedó viéndome, pero después continuo hablando con los del grupo.

Eduardo- chicos, al fin quienes ya confirman para la fiesta.
Carlos- yo fijo voy, no lo duden- termina haciendo cara "sexy". Carlos es amigo mío desde inicios del año pasado, comenzó molestándome y lo detestaba pero ahora somos muy buenos amigos.

Eduardo- Ok galán... yo voy-
Vale- yo también, yo llevo bocadillos extra...ok Alexa?-
Yo estaba en otro cuento, por cierto, Vale es una muy buena amiga mía y ella sabe que me encanta comer.
Yo- emmm si, está bien-
Eduardo- Alexa, que dijeron tus padres respecto a la fiesta?-
Yo- Si me dieron permiso, así que yo pienso romperla con toda to no se ustedes- Vaya, al fin puedo decir algo si pensar en el sueño... OUCH lo recordé.

En casa, sólo estaba acostada viendo el techo pensando en el sueño, Dios, todo el día pensando en eso. Vuelvo a tocar mi cuello pero no hay nada, de lo que recuerdo del dolor, era como si estuviera haciendo una marca y algo me decía que no iba a ser la única marca que me harían.