Rodé los ojos fastidiada, llevaba como unos diez minutos tocando insistentemente el timbre de la casa de mi mejor amigo Cameron, pero como siempre nunca me abre, o nunca esta.
-Cameron Alexander Da...-mis gritos fueron parados cuando abrieron la puerta, bufé enfadada mientras me preparaba para darle un gran sermón al castaño cuando levanto la mirada y miro a un hermoso chico, de unos lindos ojos cafés, cabello castaño y unas cuantas pecas esparcidas por su rostro, mis mejillas inmediatamente adquirieron un color rojo carmesí.
-Tu debes de ser ____(t/n), Cameron me dijo que vendrías.-sonrió ampliamente, bajé la mirada cubriendo mi rostro con mi cabello, era una persona demasiado tímida, muchas veces me pregunto por que Cameron es mi mejor amigo
-Si... Soy yo...-susurré avergonzada mientras miraba de reojo entre mi pelo y vi como el chico se hizo a un lado dejándome pasar, avancé hasta entrar en la casa de Cameron y rápidamente subí a su cuarto cerrando este con llave mientras me dejaba caer al suelo abrazando mis piernas. Los minutos pasaron y sentí unos suaves golpes en la puerta
-Pequeña... Soy Cameron, abre la puerta linda.-dijo con un tono de voz dulce, gateé hasta la manija abriendo la puerta sentándome de nuevo en el suelo, unos fuertes brazos me rodearon abrazándome con una fuerza increíble
-Cameron... basta, no puedo respirar.-reí como pude mientras este soltaba una pequeña risa soltándome con delicadeza.
-Lamento no haberte avisado que no iba a estar en casa.
-Esta bien Cam, no tienes que avisarme nada, es tu casa después de todo.-sonreí ampliamente, Cameron se paró y me extendió su mano para ayudarme, me levanté con su ayuda y me sonrió.
-Vamos abajo, ven, tengo que presentarte a Aaron.-rió levemente tomándome en sus brazos con delicadeza y me llevó abajo donde se encontraba su amigo sentado en el sillón de la sala de estar, al darse cuenta de nuestra presencia se dió la vuelta mirándonos
-Hola-saludó amablemente mientras que Cameron me depositaba en el suelo con cuidado
-Hola, lamento lo ocurrido hace unos minutos.-sonreí extendiendo mi mano, el la tomo y tiró de ella acercándome a el y dándome un fuerte abrazo.
-Es un gusto, soy Aaron.-dijo aún abrazandome
-_____(t/n), el gusto es mío.-mi voz se escuchó amortiguada por su pecho.
4 meses después...
Iba caminando tomada de la mano de Aaron, esta era nuestra cuarta cita, si, habíamos salido unas cuantas veces pero todas eran pequeñas salidas a nuestro parque favorito, a unas cuantas cuadras de la casa de Cam, la verdad es que este chico me había caído muy bien, era un poco tímido pero era muy amable y caballeroso.
-____(t/n)-dijo elevando un poco su voz pasando su mano libre frente a mi cara para llamar mi atención
-Lo siento...-susurré avergonzada mientras que el sonreía tiernamente y dejaba un pequeño beso en mi coronilla
-Sabes, la primera vez que te vi pensé que eras lo mas lindo que mis ojos hayan visto.-susurró tiernamente mientras se paró frente a mi y me comencé a poner nerviosa, se comenzó a acercar lentamente hasta que nuestros labios estuvieron a unos cuantos centímetros de distancia.-Se mi novia.-dijo antes de juntar sus labios con los míos, estos se movian lentamente a un ritmo dulce, encajaban perfectamente y quise que este momento durara toda la vida, pero nos tuvimos que separar por falta de oxígeno
-Si, si quiero ser tu novia Aaron.-sonreí ampliamente sobre sus labios antes de volverlos a unir en un tierno beso
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Ugh si, ya se, este imagina es un asco, pero de verdad estoy tratando de hacer lo mejor, espero que les guste y todo, las amo
-DW
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One Shots
Short Story¿Quién dijo que no se puede soñar? Soñar no cuesta nada... Todo un mundo de pequeñas historias con nuestros ídolos... #61 en Omaha