Por primera vez desde que te fuiste,
fui a pasear por la calle.
Todos nuestros "amigos" y conocidos,
me señalaban con el dedo,
y me miraban con mala cara.
No entendía nada,
tal vez fuera ella,
que quería volver a derrumbarme,
con la boca de los demás.
Ya que tu no me ibas a defender.
Y como su vida es aburrida,
se dedica a destruir la mía.