III El encuentro.
Si algo me había enseñado, el destino mítico y vacuo, era que por este mundo había transitado, solitario y vacío, y no había sido por capricho mío. En las artes que he sido entrenado, me he enfrentado con vocablos casi inexpugnables, viciados y posesos de artimañas, que han querido concluir la hazaña, de enlazar mi imaginación y la corazonada, para que no alce vuelo y no alcance nada, aún mi alado espíritu hacia mi amada, y continuar aprehendido, a las desesperanzas que contadas, serían la suma de mis fuerzas, pues no hay razón en la vida, si antes no es luchada, la esperanza es mi espada.
Suerte mía, no te dejo, que el destino ha traído, de lo lejos a este espacio, aunque débil, mustio, lacio, a este denodado hidalgo, que seguirá contendiendo, contra el maligno pensamiento, que me hacía creer que ausente estabas. Suerte que a lo lejos sonriendo, veo un ángel olímpico, delicado y conservado, justo para este momento, mana el sentimiento, como semilla que clama por vida, y asciende a luz del día, te he encontrado fémina iluminación, ¡cómo desborda este leal corazón! que alboroza como nunca, y se ha despojado de su hastío, del destierro y del frio, dulce amor, untura de alegría, he gastado la vida mía, solo para acertar con este momento, cuando el tiempo se hace lento, inverosímil sentimiento.
Has salido a mi encuentro, en esta tarde entrañable, me he despojado de los vientos que me han apartado de tu amor palpable. Si supieran del dominio de tus ojos, si entendieran la hermosura de tus manos, si acaso descifraran la dulzura de tu andar, de seguro harían mandar, a un soberbio imprudente, que cautive a tu corazón ardiente, y hurte así tu libertad. ¡Jamás! ¡He luchado con los posesos! ¡Nunca saldrán ilesos, de esta lid implacable! Me he topado con tus aromas, cuando en esta imborrable tarde te asomas, ven a yacer en mi regazo, soy el nabí de tus amores, ven que te he encontrado, te ha encontrado este, mi espíritu alado.
ESTÁS LEYENDO
La silueta.
PoetryNarra la historia de dos jóvenes que se han encontrado en el camino, y que a partir de ese encuentro, desarrollan un diálogo íntimo que reseña el amor de sus corazones, más, algo divide su ardiente amor, un ser sin piedad que a prometido hacer suya...