(Narra Luisanna)
Me encontraba arreglándome para mi cita con Mario Bautista pero siento algo en mi corazón como si me engañase a mi misma, lo acepto, Josué me dejo, pero me dijo mil veces porqué lo hizo y yo por la rabia no me dispuse a creerle, ahora cuando estoy con Mario todo es diferente, siento un espacio vacio que deja Mario cuando está conmigo... ¿Por qué me haces sufrir tanto Josué? ¿Estarás tan cerca de mi más de lo que me imagino? ¿Por qué siento que no te olvidé por completo? Qué me haz hecho...
La verdad no sé que pasa, siento que estoy Entre La Espada y La Pared.
(Narra Josue)
La rabia de tenerla me desesperaba, siento como si otro me roba mi lugar, me roba mi julieta, me roba mi chica. Cada vez estaba más enfurecido y de repente le dije a un chofer que me llevara a Santiago con Alexander. Pasaron las horas de un largo viaje y fui al parque donde estaba Alexander con Maelin.
- Hola Maelin -le saludé con beso en la mejilla- Hola Ale -agregué-
- Hola J'z cuando tiempo -dijo Maelin- ¿Viniste por Luisanna? -preguntó-
- Algo así, estoy desesperado y no sé que hacer... -dije-
- Que por cierto ella saldrá con Mario Bautista esta noche -termino de decir Maelin-
- Su novio... -dijo Alexander-
- ¿Qué novio? Es su mejor amigo... -se le escapó a Maelin-
- Mejor todavía, de seguro en su cena le pedirá ser su novia y yo no quiero eso -grité con rabia- Dime donde ellos cenarán -agregué-
- En este sitio; (Inventenlo) -dijo y me fui hacia ese lugar-
(Narra Mario)
Pasaron las horas y ya me encontraba en un restaurante con mi princesa, por fin ella será mi novia y le curaré todo ese daño que le hizo el maldito de Josué, el no la supo valorar, pero yo lo haré, claro si el no viene a reclamar lo que fue suyo, Jajaja. Hoy me siento más que feliz sentado frente a ella, frente a mi futura Julieta.
- Y dime Mario, cuando irás a México a ver a tus bautisters, que por cierto son tus novias y no les puedes pegar los cachos conmigo -dijo y se rió-
- Iré en un mes para allá, tu irás conmigo -le dije-
- No, no creo que ellas me acepten bien como a ti -bajó la cabeza-
- Como qué no, si hasta mi perrita aceptaron -reí- En fin, la cena está por llegar -agregué-
Llegó la cena y nos dispusimos a comer, resulta que estabamos todo el tiempo hablando, haciendo chistes y todo eso. Miré hacia lo lejos donde ví a Josué sentado en una mesa observando a mi chica, todo lo que haciamos, aqui viene este a dañar todo.
- Hey y esa mirada? -preguntó-
- No nada -fingí estar bien, pero no- En fin a lo que vine preciosa-
Me limpié la boca y las manos, arreglé mi saco y saqué una pequeña caja de mi bolsillo donde contenia un anillo para dárselo para que fuera mi novia oficialmente.
- Luisanna De Bautista, ¿Quisieras ser mi novia? -Me arrodillé ante ella y abrí la caja-
De repente pude ver a Josue como se acercaba a nosotros...
- No -respondió alguien a mis espaldas-
- ¡Josue que haces aquí! -expresó Luisanna-
- Vine por ti mi amor -respondió el-
- Josué, debería darte vergüenza todo el daño que le hiciste a este ángelito, no la amaste, la abandonaste cuando ella más te quería y yo le reparé su dolor -me calmé-
- Tu no sabes porqué la dejé, tu no sabes por qué me fuí, tu no sabes porque vine por ella! -El se acerco a ella y tomo sus manos-
- Preciosa, te dejé por salvar tu vida, para que no te mataran, me obligaron a dejarte, a todos los chicos nos obligaron sino las mataban a ustedes, lo hice por tu bien, si no te hubiera dejado estuvieras en Italia muerta -tragó en seco y se le salió una lágrima- Regresé aquí porque Te Amo... -añadió y soltó sus manos-
- Wow yo no tendría el valor de hablarle así si la hubiera abandonado -dije-
- Ya dejen su pelea los dos, Josue si fue por mi vida porque no me avisaste! así no te hubiera odiado tanto, aunque nunca te olvidé pero... ¿Por qué no me dijiste que no querias que me mataran? -sollozó-
- Te lo traté de decir muchas veces pero la rabia no te dejaba escucharme, la rabia te consumía ante mis palabras -dijo y se alejó un poco de ella- Pero ya veo que yo sobro aquí -añadió y se fue-
- Josué, Josué espera! -gritó Luisanna en llanto-
- Tranquila preciosa, el estará bien -La abracé y ella lloró en mi hombro-
Me quedé impactado ante las palabras de Josué, el si la ama, la dejó para salvar su vida aunque la lastimó pero peor hubiese sido si la matan, nunca jamás la hubiera vuelto a ver y yo nunca la hubiera conocido.
