La Otra Mitad De Mi Hilo Rojo (SPREHR2) PAUSADA

03 - Charlas de pasillo

Luna POV

El Blake parecía estar como siempre... Y la maestra me odiaba como de costumbre. En el recreo estaba con Nina. Veía como ella y Gastón se miraban. Hubiera jurado que eran algo en el tiempo que no estuve.

-¿Ustedes salen?

-¿¡Q-Qué!?-Dijo Nina.

-Eso. Parecen novios o algo.

-¿P-Por qué decís eso? Sabés que él nunca se va a fijar en mí

-Yo no estaría tan segura, por como se miran pareciera que sí.

-Me mira normal. Ni me está dando bola.

Gastón empezó a caminar junto a Matteo, sin sacarle de encima los ojos a Nina... Lo cual hizo que se tropezara de una manera bastante graciosa. No pudimos evitar reír.

-¿Ves?-Dije algo risueña

-No. Para mí que miraba a Lucía.-Dijo señalando a una rubia detrás de Nina.

-¿Por qué lo dices?

-Durante este tiempo hemos sido mejores amigos, ¿Sabes?

-¿Tu y Gastón?

-Yo, Gastón y Matteo.

Tragué. Si Matteo era mejor amigo de Nina y yo era mejor amiga de Nina... significa que nos veríamos muy seguido. No puedo mentir, jamás olvidé la sensación de sus labios sobre los míos.

-¿Y... Que onda Gastón?-Dije tratando de apartar el tema de Matteo de la conversación

-Nada, solo somos amigos... y no me ve como más que eso ni lo hará.

-Mientes, ¿Recuerdas el libro de frases?

Nina asintió. Lo saqué y leí.

—"Un hilo rojo, invisible, conecta a aquellos, que están destinados a encontrarse, a pesar del tiempo, del lugar, a pesar de las circunstancias. El hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca llegará a romperse."

—¿Y con eso qué?

—Gastón. ¿No lo ves?

—¿Vos estás diciendo que Gastón es La otra mitad de mi hilo rojo?

—Estoy más que segura de eso.—Le sonreí.

De repente mirando a todos noto algo raro.

—¿Y Jazmín y Delfina?

—Allá.—Dijo Nina, señalándolas.

—¿Por qué no están con Ámbar?¿Por qué está sola?

—Nadie lo sabe bien... un día se aisló de todo y todos... Al único al que le sigue hablando es a Simón.

—¿¡Simón!?

Asintió.

—¿Ambar y Simón?

—No creo. Eso sí que sería demasiado.—Dijo.

—Aunque... Hacen linda pareja. De todas formas algo oculta, lo sé. Ayer me miró de una manera extraña. ¿Que ahora es dark, emo, gótica? No entiendo la diferencia.

—Los emo tienden a combinar el color negro con otros colores, usan calzados converse o modelos parecidos, y al parecer lo mas representativo en ellos es el estilo del corte de cabello el cual siempre tienen un copete o flequillo cubriéndole casi todo el rostro. En la cultura Dark normalmente predomina el negro, tienen cierto resentimiento hacia la sociedad o están en contra de algunos principios, y son serios, reservados, de pocos amigos. Entre los góticos hay una gran variedad, los góticos se preocupan por la estética, usan corsets, gabardinas, se inspiran en los vampiros, la ropa medieval etc, también predomina el color negro, les encanta la literatura, el arte y la mayoría son artistas.

—Vaya...

—Sin mencionar que tienen gustos musicales totalmente diferentes.

—Bueno... eh... era broma igual.

—Perdón... mejor me callo.

—No, no. Tranquila. Está genial que sepas tanto.

—No creo.

—Pues creelo.

Se encogió de hombros.

—Y... ¿Que onda Matteo?—Preguntó

—¿El chico fresa? En verdad no sé... volverlo a ver me movió todas las estanterías.

—Pero... ¿Hablaron de lo que pasó antes?

Negué.

—¿Y que esperan?

—Las cosas cambiaron, Nina...

—Eso no es cierto. Vamos, animate.

—No sé...

—Luna. Mirame fijo.—Le hice caso.—¿Lo amas?

—¿Que clase de pregunta es esa? Obvio que lo amo... pero no puedo volver así como así y decir "Oh, Matteo, te extrañé tanto... Pensaba noche y día en tí. ¡Casémonos y tengamos veinte hijos!"

Nina rió.

—¿Por qué no?—Dijo.

—Porque lo conoces, sabes como es. "Oh, soy Matteo, el mas hermoso, el mejor, el rey de la pista, tooodas mueren por mi, soy tan arrogante que...—Noté las señas de Nina.—... Está detrás de mí.