¿Hermano?

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Un silencio se formó en la gran casona, entre los dos seres de diferentes razas, mientras que el menor esperaba pacientemente a que el mayor hablará, el otro por su parte estaba buscando las palabras de como explicarle todo lo que sucedió, al fin y al cabo aún es un niño así que tendría que buscar una forma en la que el comprendiera fácilmente

-supongo que tendré que contartelo todo- no iba a llegar a nada si simplemente se quedaba en silencio, así que decidió hablar claramente con el menor sin importar como reaccionará -para empezar tienes que saber que los Ángeles y demonios si existen-

-¿existen?- pregunto el menor a lo cual el mayor asintio -¿en ese caso, me convertí en un ángel?- dijo eso mientras miraba de reojo las alas que portaba en su espalda

-se podría decir que si, pero no lo eres totalmente- el menor lo miro confundido -veras, según lo me contó el ángel que te trajo a mi, ellos vieron en ti un gran poder supuestamente, normalmente los humanos no se pueden convertir en Ángeles ya que ellos fueron creados especialmente para servir a Dios y nunca fueron humanos- de repente hizo una pequeña pausa mientras dirigía una mirada perdida al pequeño niño, la verdad es que el nunca pensó que hablaría sobre temas religiosos, siendo que el es un demonio

-¿nii-san?- el menor se acerco un poco al contrario -¿que pasa?-

-no es nada- reaccionó desviando su mirada un poco -volviendo al tema, ellos decidieron hacer una excepción contigo para que pudieras ser un ángel a pesar de ser un humano, todo estaba predestinado para que tu murieras en aquel accidente y pudieras ascender al cielo-

El pequeño se sobresalto un poco ante lo que dijo el mayor, pero este no le tomo tanta importancia ya que esperaba algo así

-pero ahora estas aquí, no en el cielo- depósito su mano en la frente del menor -¿sabes por que?- el pequeño nego con la cabeza

-por que hubo una interrupción y tu sobreviviste- ambos se miraron directamente a los ojos -no has muerto todavía pero tus poderes se han manifestado, no eres un humano- al decir eso balanceo un poco su cabeza -pero tampoco eres un ángel, la única forma de que tengas una oportunidad de ingresar al cielo es que incrementes tus poderes, hasta entonces tendrás que estar lejos de la sociedad para poder entrenar-

-espera- antes de que el mayor siguiera hablando, el menor levantó la mano a modo de que pareciera que quisiera hablar

-¿que sucede?- inclinó un poco la cabeza -si quieres saber algo, adelante, eres libre de preguntarme lo que quieras-

-¿que quiere decir "interrupción"?- pregunto curioso el pequeño

-¿eh?- el mayor no entendió muy bien lo que quiso decir al principio, pero luego comprendió -pues, que lograste ser salvado....supongo-

-¿salvado?, ¿por quien?- el pequeño volvió a tener en su rostro una sonrisa torpe, la cual parecía interrogativa

-bueno..- no podía captar muy bien el ritmo de la conversación pero trató de seguir al pequeño -yo fui quien te salvó....supongo-

No sabía si podía decir que lo salvo, después de todo gracias a eso ahora mismo el menor no puede ingresar al cielo

-¿¡en serio!?- en el semblante del menor repentinamente se formó una gran sonrisa de alegría -¡¡GRACIAS!!-

-¿eh?- el mayor no comprendía absolutamente nada mientras el pequeño se abalanzaba sobre sus brazos

-¡¡gracias, muchas gracias!!- el pequeño frotaba su rostro en el pecho del mayor abrazandolo

-¡¡oye espera, sueltame!!- el mayor nervioso y confundido trato de separar al pequeño tirando de el pero le resultó imposible ya que se había aferrado a su cuerpo como una pulga -¿¡por que me agradeces!?-

El Inesperado Guardián (IchiJyushi) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora