Capitulo IV: El Vampiro Mas Fuerte de la Historia

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Hace ya mucho tiempo ha pasado desde el día en el que hice ese juramento y le pedí al viejo Gastan que me entrenará y me enseñará a pelear, lo que me hizo dar cuenta del potencial que tenía. Luego de cumplir ya 18 años el viejo Gastan murió y lo último que me dijo fue: "Prométeme que no te rendirás y que no dejarás que nadie nuble tus metas", algo que me pareció muy nostálgico y triste. Lo enterré al lado de mi familia ya que también era como un padre para mí.

Luego de haberlo enterrado decidí irme de ese lugar y viajar por todo el mundo aprendiendo nuevas formas de pelear y de fortalecer mi cuerpo y mente, lo que hizo que llegara a un punto en donde ni la estaca, la cruz o el agua bendita me hacían daño; lo único capaz de derrotarme es el Sol, o sea, la Luz. Luego de haber terminado mi viaje decidí apartarme del mundo para fortalecer aún más mis habilidades por un largo tiempo.

Después de haber entrenado lo que creía suficiente decidí regresar a la civilización humana y poder cumplir mi objetivo. Entonces luego de haber viajado tres noches encontré una aldea humana y tomé sangre de uno de ellos, luego seguí mi camino y llegué a una especie de aldea con unas casas muy extrañas hechas de un material muy extraño, entonces para evitar quedar en la ignorancia de no saber sobre lo que había pasado en un largo tiempo, utilicé el plan que había preparado antes de irme a entrenar por mucho tiempo, éste consistía en preguntarle a un humano donde quedaba una biblioteca o algo parecido, lo cual se me hizo un poco difícil ya que por la noche no encontré a un humano cerca, pero después de mucho buscar encontré uno y le pregunté si había una biblioteca cerca, a lo cual me respondió: "A unas cuadra de aquí, pasando por el parque y después por la florería de la Señora Marta". Después de decirme esto empecé a seguir por el lugar que me había señalado pero me había advertido que tuviera cuidado ya que el camino era peligroso en la noche.

Luego de estar saltando de casa en casa un buen rato encontré el parque que me había dicho pero entonces escuché un grito que provenía de un callejón lo que hizo que fuera a averiguar que era; para mi sorpresa era una madre con sus dos hijos siendo intimidados por un joven que no pasaba de los 25 que llevaba puesto una ropa extraña con un arma apuntando a la madre y a sus hijos diciendo: "¿Qué se siente saber que a pesar de todo lo que hagas para proteger a tus hijos su muerte es inevitable al igual que la tuya?" Entonces agarro a la madre por los pelos y con la pistola apuntó a los niños y dijo: "Bueno, por que no lo averiguamos" Entonces al disparar fui corriendo tan rápido como pude y salvé a los niños antes de que la bala los alcanzará a uno de los dos. 

Luego el joven dijo: "¿Quien eres tú?" Y yo respondiendo le dije: "Soy defensor de los que no logran protegerse de bastardos como tú" Entonces enojado responde: "¿Quién te crees para responderme así? Le dije entonces: "El que te matará sin ninguna piedad" Luego me dijo: "Con que te crees tan fuerte vampiro asqueroso veremos de que eres capaz entonces". 

Dracula: El Comienzo de la UniónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora