Desde que empiezas a usar zapatillas de punta, tienes que aprender a aguantar el dolor, que las ampollas NO DUELEN, que el roce de las medias con las zapatillas NO DUELE, "el dolor está en la mente".
Las rodillas rapadas, machucones en todo el cuerpo y esguinces son el ripo de cosas que todo tipo de bailarina debe soportar.
Aunque estés muriendo por dentro tu rostro siempre tendrá que expreser los sentimientos que la obra que interpretas te obliga.
El dolor ya no duele como antes, esta costumbre me hace cada vez más fuerte, mis músculos más fuertes mi pasión más intensa.
Al final de cada clase sabemos que si los músculos no se estiran correctamente doleran, todo duele pero el sentido de todo esto es aprender a soportarlo. Consecuencias de esto hay muchas, pies deformados, torcedura de tobillo, quebraduras, ezguinses, etc; cuando bailo soy consciente de las consecuencias a las cuales me expongo pero me arriezgo igual por el amor que le tengo a este deporte.