¿El regreso de Volpina?

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Aclaración: Los personajes no son míos, pertenecen a una serie llamada Miracoulus Ladybug, yo solo los he tomado prestado para hacer realidad mis locuras.


Ignorando el pensamiento anterior, se acerco rápidamente a Chat, debía ayudarlo, tal vez si distraía nuevamente a la reina de fuego él, ellos tendrían el tiempo suficiente de cubrirse y; quien sabe, protegerla a ella también. El cuerpo le temblaba, las lagrimas aún caían por su rostro y cuando se encontraba a centímetros del equipo escucho un susurro, una vos que la detuvo.

- Quieres ayudarlos, ¿no? ¿Te sientes prepara para sacrificarte por hacer lo correcto?

Aquella voz sonaba cálida, de cierta forma la reconfortaba y a la vez le brindaba seguridad.

- ¿Quién eres?

Fue lo único que la morena pudo decir mientras buscaba el origen del susurro.

- ¿Quién soy? pronto me conocerás Alya Cesaire, lo importante ahora es que seremos grandes amigos.

- ¿Amigos? ¿De qué demonios hablas?

Se había comenzado a exasperar, por lo que la pregunta había sonado mas como una demanda, haciendo con esto que "el extraño ser" se comenzara a reír.

- El fuego es nuestro aliado, aprovéchalo.

Lo siguiente que sucedió fue casi en cámara lenta. Ella; olvidándose de todo, se lanzo a ayudar a los jóvenes casi al mismo tiempo que la pequeña serpiente de fuego; que había permanecido oculta en el vestido, se lanzaba a morder al felino. Si se hubiese tratado de un simple humano, la velocidad con que corría jamás le hubiese servido para evitar ese ataque, pero Alya ya no era una simple espectadora.

Nadie reparo en el brillo anaranjado que la envolvió al salir de su escondite, ni si quiera ella misma.

La serpiente se lanzo dispuesta a morder el brazo del rubio, pero la morena se interpuso en su camino. Cerró los ojos a la espera del dolor, pero este jamás llego. En su lugar escucho un desgarrador grito, lo que; en cosa de segundos, la hizo despertar.

- ¡¿Qué le estás haciendo a mi bebe?!

- ¡Suéltalo maldita zorra!

Asombrada por los alaridos de la azabache se fijo en su mano, ¿en qué momento había capturado de esa forma al reptil?. Ella permanecía con el puño apretado, sosteniendo por el cuello a la serpiente, el fuego que poco a poco quería envolverla no le quemaba, de hecho se sentía como una calidez similar a la que antes le había recorrido el cuerpo al hablar con "la voz".

- El fuego es nuestro aliado, ¿o acaso creías que te dejaría a tu suerte?

Y allí estaba, nuevamente escuchaba aquellas palabras, pero estaba vez las sentía cerca, casi como dentro de ella.

- No te distraigas.

La imponente y segura voz de Ladybug la saco de su ensimismamiento, la heroína aprovecho el descuido de la azabache para golpearla y tirar de la cadena que sostenía la placa. Su movimiento fue rápido, pero no lo suficiente. Basto un segundo para que la dama de fuego se diera cuenta del ataque y; a duras penas, lograra evitarlo. El golpe que recibió fue fuerte; aquello era imposible de dudar, pero la pequeña y delgada cadena seguía allí, envolviendo su cuello.

- Esto no me lo esperaba. Me las pagaras por el dolor que ahora siento.

Su respuesta fue inmediata, la frialdad que mostró la voz de la akumatizada logro paralizar a los presentes quienes no reaccionaron a tiempo para evitar que la chica se acercara velozmente a la heroína de la suerte y, la sujetara por el brazo para luego arder en llamas y desaparecer transformada en una enorme ave esmeralda.

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⏰ Última actualización: Jun 09, 2016 ⏰

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