"Pacto con la muerte" ||N.S||

Prologo

–¿Qué voy a hacer? ¿Que?– Harry pateo una botella a mitad de la calle

Su madre estaba tan mal que ni siquiera los esfuerzos de la Unidad de Cuidados Intensivos servían a estas alturas del juego. No tenia dinero para un lugar mejor o un tratamiento mejor.

Su vida se estaba yendo al caño y él solo podía contemplarlo. Se sentó en la húmeda y solitaria banca del parque y se golpeo a si mismo hasta liberar todo lo que llevaba dentro

–¿Problemas en el paraíso?– pregunto

Harry dejo su berrinche y levanto la cara para mirar a su acompañante

–¿Y tu quien rayos eres?– pregunto Harry a la defensiva

–Quien tu quieras que sea– respondió el castaño sentándose junto a él

Llevaba una capucha sobre su cabeza y estaba tremendamente pálido, sus ojos celestes resaltaban

–Me entere que tu madre esta muy enferma– chasqueo la lengua mientras sacaba un cigarrillo de la nada –Y quiero ayudarte–

Harry se limpio las lagrimas y lo miro fijamente

–¿Como sabes eso?–

–Veras– dijo mientras buscaba algo en su bolsillo con el cigarrillo entres los dientes –Yo tengo esta lista,donde– dijo sacando lo que parecía un cuaderno mohoso y viejo –bueno... esta el nombre de tu madre– se inclino un poco hacia Harry y le señalo la letra pulcra y dorada que ponía el nombre de su madre

Harry estaba asustándose cada vez mas

–Me llamo Louis, pero en los bajos mundos me llaman la muerte. En realidad no soy yo quien los mata pero no nos detengamos en detalles técnicos– se giro hacia Harry y sonrío de la maneras mas malévola y macabra que podrían imaginar –Te tengo un trato, uno que salvara a tu madre–

–Lo que sea, haré lo que sea– dijo Harry interrumpiendo el lúgubre discurso de Louis

–Salvare a tu madre a cambio de....– dijo rascándose la nuca –No se me ocurre nada, pero ya te cobrare, solo necesito que firmes aquí– susurro extendiendo un pedazo de hoja hacia Harry

–De acuerdo– dijo Harry mientras firmaba

–Muy bien– sonrío Louis –Espero que tu madre valga el sacrificio– se levanto y comenzó a caminar lejos de Harry

Lo que Harry no sabia era que Louis, nunca jugaba limpio