Desayuno

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-Ángel... tenemos que hablar-

Jack me acorralo contra la pared con su mano en mi cintura, nose porque el corazón me comenzó a latir muy rapido por su cercanía.

-¿qu-que quieres?-

No tartamudees, idiota.

-¿A casó estas nerviosa por mi cercania?-

Sí.

-¿Qué que? No, claro que no- me incorpore bien y lo miré directo a los ojos.

-Te miras tan linda cuando estás nerviosa.- se acerca más a mi y ahora esta tan creca de mi que casi estoy rozando sus labios.

Sal de ahí, Camile.

-Jack...- apenas y se escucha mi susurro.

-¿Si angel?- su voz se escucha tan ronca que solo causa que se me dificulte concentrarme.

No no, alejalo. Recuerda que beso a Karen.

Esa escena volvió a mi cabeza de golpe.

¿Porqué me molesta tanto?

-aléjate de mi- le di un rodillazo en su entrepierna haciendo que caiga al piso con una cara de dolor y las manos sobre esa área.

Suspiro y me dirijo a la mesa de nuevo con una sonrisa.

Que bien me siento ahora.

-¿Y Jack?- me preguntó Kane

-No sé, de seguro y se esta atragantado con alguien-

Tomé un pedazo de pizza y lo mordi. Al poco rato Jack regresó y se sentó a lado de mi.

-¿Dónde estabas?- pregunto Kane

-Por ahí- se removió en su asiento con una mueca de dolor.

Solté una pequeña risa y todos me miraron raro.

-Lamento lo que miraste, haré las cosas bien ahora- me susurro Jack en mi oido, mientras pasaba su mano por mi muslo haciendo que la piel se me pusiera de gallina.

-¿Camile? ¿estas bien? Estas toda roja- me pregunto Ethan.

-¿Eh? Aamm... si si bien-

Quité la mano de Jack de mi muslo y continué comiendo mi pizza pensando en lo que Jack dijo.

¿A que se refiere?

***
Después de comer pizza fuimos a mi casa a mirar una película. Ethan y Scarlett estan en un sillón, Scarlett esta recostada sobre su hombro y mi hermano juega con un mechón de su cabello. Oscar y Jack estan en un sillon personal con Kane en sus piernas sentado y yo estoy en un sillón para tres personas con palomitas una cobija y una almohada.

Kane se baja de las piernas de jack y Oscar y se sienta en las mías, yo por mi parte movi mis pies haciendo que Kane callera de nalgas al suelo.

-Quítate, estas muy gordo-

-Ush, perdón, que humor, ¿estas en tus días del mes?- me preguntó Kane volviendose a colocar encima de las piernas de Jack y Oscar.

-¿porqué cada vez que las mujeres estamos enojadas o tristes, los hombres dicen que estamos en nuestros días?- pregunte ofendida.

-Porque están locas cuando llegan esos días- contestó Jack sin mirarme.

Tomé el control y se lo tiré haciendo que callera en su abdomen.

-¡Vez! ¡me golpeas sin ninguna razon! ¡tu necesitas un loquero- me dijo ofendido.

Rode los ojos y me acoste poniendo las palomitas en la mesita de centro que se encuentra frente a mi.

¿YOU? ¡NEVER! (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora