Capitulo 4

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Para el sábado Gray ya tenía lista la habitación, se levantó temprano, tomo una ducha y se preparó para ir por la chica; mientras conducía sentía una extraña sensación en el cuerpo, un ligero hormigueo que le iba de los pies a la cabeza, se dio cuenta que no importara cuantos años pasaran esos lugares le seguían atormentando, solo esperaba no tardarse mucho allí. Llego 20 minutos antes de lo acordado, pero solo pasaron 10 para que Sting y la chica se asomaran por la puerta de aquel albergue, era un edificio no muy grande al parecer de Gray con un jardín bastante bien cuidado en apariencia era lindo, tal vez Natsu tenía razón y esos lugares habían cambiado, pero por ningún motivo iba a cambiar de opinión.

-Hola-saludo más a la joven que al oficial una vez estos estaban frente a el

-Hola-

-Bien ya sabes, cualquier incomodidad me llamas, no importa la hora- dijo el rubio

-Si...gracias Sting-respondió la azulada mientras abrazaba al oficial

-No es nada Juvia-

-¿Nos vamos?--intervino Gray después de que ese abrazo concluyera, cada momento frente al albergue hacia que se sintiera un agujero en el estómago que iba creciendo, ella asintió en respuesta. La ayudo a guardar su maleta en la cajuela y antes de subir al auto recordó que no se habían presentado.

-Por cierto soy Gray Fullbuster-dijo extendiendo la mano

-Juvia, por el momento solo Juvia-respondió estrechando la mano

El camino hacia el departamento fue silencioso y hasta incómodo.

-Y... ¿Has logrado recordar algo?- intento romper el hielo Gray

-Solo mi nombre...bueno aun no estoy segura de que lo sea-

-¿Por qué lo dices?-

-Hace poco llovió bastante, me empecé a marear y logre recordar a alguien llamarme así pero Juvia es un nombre raro así que puede que sea un apodo, de todos modos sin apellidos Sting dijo que sería difícil identificarme.-Gray no supo que responder así que más silencio incomodo se hizo presente hasta que ella lo rompió.

-¿Te puedo preguntar algo?-

-Dime-

-¿Por qué haces esto? Hubiera sido muy fácil dejar las cosas como estaban--Al parecer de Juvia Gray no era el tipo de persona que fuera de buen samaritano, en el hospital tenia cara de fastidio, al menos en su percepción, esperaba más un gesto así del peli rosa , así que el cambio tan repentino la tomó por sorpresa.

-Porque siento una responsabilidad contigo- ella no dijo nada y ninguno menciono algo más hasta llegar a departamento

Cuando llegaron Gray le mostro la habitación donde se quedaría, le pregunto si necesitaba ayuda, ella respondió que no, se sentía un ambiente incomodo si bien ninguno había sido grosero y hasta trataron de ser amables, pero no dejaba de haber esa incomodidad que sientes con un desconocido.

-Preparare algo de comer- anuncio el pelinegro

-¿Quieres que te ayude?

-No desempaca yo preparare el almuerzo-

Y así lo hizo, en realidad Juvia no entendía por qué Gray se sentía responsable, supuso que en realidad quería ayudarla aunque esa idea no la convenció mucho, se imaginó en la misma situación del pelinegro si encontraba a alguien a mitad del pavimento y además esta se quedaba sin memoria, probablemente haría lo mismo que él, se convenció de que era eso, cuando termino de guardar la poca ropa que le habían proporcionado en el albergue fue a la cocina para ver si podía ayudar en algo en el almuerzo.

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