Observo tu sonrisa
extenderse
hacia todos lados
como bandada de colibríes.
Es allí donde
sé que la primavera
me aguarda
con sus colores
y aromas,
con el polen que acaricia
mis sentidos.
Y mis ojos comienzan
a dar sus frutos
y en cada uno de ellos
encuentro un poco de ti.
Y cuando tus ojos
se humedecen
de llanto.
Tus ojos de frío
de nieve,
sé que el invierno
se presenta
tiritando todo en mí,
congelándome la sangre
y alargando las noches
en velo.
Ah pero cuando
sueltas tu cabello,
linda, cuando tu
cabello sueltas.
Esa enredadera.
Esa trepadora de mi alma,
que todo lo cubre,
que todo lo viste,
que arrastra mi mirada
hacia los arbustos de Pandora.
El otoño
hace su entrada maestra.
Rústico.
Maravilloso.
Inefable.
Y es aquí donde encuentro
mi estación.
Bajo el sol de la tarde,
bajo tu calida mirada.
ESTÁS LEYENDO
Poesía Para No Suspirar
PoetryEstimado lector, he de compartir los versos de un desconocido amante de la escritura y de descubrir su corazón a quien esté dispuesto a leerlo con el fin de poder encontrarse en él. He aquí los poemas de un alma joven quien acude a la escritura para...