Grella©

Capítulo 25.

Leanlo con esta canción.
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Destapé el sobre y unas letras cursivas se hicieron presentes ante mi vista.

La carta decía así:

Para: Mi Querida Grecia

15 de Junio de 2016

Hola Grecia para ser te sincero no sé como empezar una carta o como explicar todo en un pedazo de papel.

Comencemos de nuevo.

Hola Grecia debes estar odiándome desde el fondo del alma e insultándome infinitamente, me lo merezco lo sé.

Pero antes de pasar a las explicaciones, recordemos un poco ¿vale?

Yo sabía que era admirado por muchas chicas desde que llegué aquí, no soy tonto, antes era diferente, me encantaba-encanta- leer libros, era muy estudioso, y un buen chico.

Nada fuera de lo normal, solo que me dejé que me lavaran el cerebro...

Al principio tanta "fama" me incomodo, pero como todo, me acostumbré cada vez sintiéndome mucho mejor, un día, mis amigos planearon enamorar a una chica y luego dejarla en vergüenza.

Me negué pero luego me convencieron.

Me habían dicho que yo escogiera a quien quisiera, claro que yo no tenía nada en mente.

Un mes después parecía que nuestro juego no se iba a hacer, pero ese día tuviste que llegar ¿recuerdas?
El día de la tormenta, donde yo te lleve en el auto y estuviste incomoda, mirando hacía abajo todo el camino, cuando ví tus ojos, no pude evitar elogiarlos, te sonrojaste rápidamente algo que me pareció muy tierno.

Admito que hice el papel de acosador, pero quería conocerte más, y como te dije era un buen chico, no sabía como acercarme a ti, eres muy agradable y adictiva.

Cuando me cuestionaste si yo era un acosador compulsivo, me reí para mis adentros como un loco, decidí seguirte la corriente.

Y pues esa parte ya te la sabes.

Cada vez me sentía más a gusto contigo, pero sólo eso, jamás pensé en el amor hasta nuestra primera cita, estaba muy nervioso porque nunca había invitado a una chica a nada.

Y sí lo pensaste, sí, esa fue primera cita.

Algo maravilloso, imposible de olvidar.

Sí, sí un maldito cursi.

Luego mis amigos me dijeron que si tú ibas a ser la chica del juego, yo dije que no, pero me sorbonaron y de nuevo caí en esas redes, atrapándome por completo...

En ese punto ya estaba enamorado de ti. No quería hacerte daño, pero la presión social ganó la batalla.
En fin ese día del que íbamos a tener relaciones.

Perdón por decirte esto, pero no quiero que vivas en las mentiras o rumores, había cámaras.

Kim las puso ahí en tu cuarto, en tu casa.

A último momento decidí no humillarte más y fue por eso que paré, no te culpes, eres hermosa.

Regresé a mi casa frustrado, entré a mi cuarto azotando la puerta, me encontré a Kim desnuda en mi cama y...lo hicimos, perdón Grecia.

Soy un idiota.

Mi madre ya me había dicho que nos íbamos a mudar a Nueva York una semana antes de que pasará esto.

Siento no decírtelo pero jamás encontré el momento perfecto.

Me estoy yendo a Nueva York en estos momentos, se qué soy un cobarde.

Pero no podría verte llorar...

Perdóname por jamás tomarte enserio.

Perdóname por los daños que te he hecho.

Perdóname por hacerte dudar de ti misma.

Perdóname por hacerte llorar.

Perdóname por marcar tu vida de esta manera.

Perdóname a mí.

Te amo Grecia.
Adiós cariño.

Se despide:

Dallas, un jodido cobarde.

No llores, No llores, se repetía constantemente en mí cabeza.

Pero una lágrima rebelde se deslizó por mi mejilla, seguida de muchas otras...