Al ver que solo pequeños gestos lograban que su amada se diera cuenta de su presencia, decidió buscar una manera de poder acercarse a ella, aunque no fuera contacto real. Una manera de volver a sentir sus labios.
Mientras pensaba, recorría ríos, valles, cielos, nubes, los 7 mares...
Reunía aventuras que poder contar a su amada Aisha. Nunca dejó de mirarla. Intentaba que sonriera lo máximo que pudiera, dibujando así, sonrisas en su amargura. Cada vez que Aisha lloraba él escribía cerca suya: "No Temas, no llores, me encuentro bien".
Eliseo sabía que en algún momento se reencontrarían. Todo se basaba en esperar.Una noche tranquila, Eliseo se acercó a su amada mientras esta dormía. Aproximó su mano al pelo de la chica y, sin esperarlo, entró en el sueño de la joven. Todo era oscuro. Eliseo pudo observar que había dejado de ser transparente en ese mundo. A lo lejos pudo reconocer el llanto de la joven de la cual estaba enamorado. Él no sabía donde estaba pero aún así corrió hacia aquel lloro.
Corrió y corrió y al fin la vió. Se acercó poco a poco a ella. Pensó en tocar su cabello, pero, ¿y si lo atravesaba?
Esta vez no fue así. Aisha se giró y al ver el rostro del joven se abalanzó sobre él. Ella lloraba y él la abrazaba.- ¿Cómo que estas aquí?
- Ni yo lo sé mi amor... Solo sé que puedo volver a sentir tu piel...
- Te he echado de menos...
- Y yo, más de lo que piensas...La muchacha dirigió su rostro hacia el de su amado. Sus ojos intercambiaron miradas y ambos se fundieron en un hermoso beso. Toda la oscuridad de ese mundo había desaparecido.
- ¡Tengo tantas cosas que contarte, Aisha!
- ¿Cómo cuales?
- He recorrido todo el mundo... Pasando por ríos, valles, cielos, nubes, los siete mares... Viaje hasta la luna y pude hacer castillos de arena... Le hablé a las estrellas sobre el sol y al sol sobre la grandeza de nuestro amor... Y, sobretodo, intenté dibujar sonrisas en nuestra amargura...
- Eso lo sé... Te amo...La joven abrazó a su amado... Volvían a ser uno...
Pasaron las horas. Ellos hablaron y hablaron. Pensaron en un reencuentro futuro, en si aquello era solo un sueño o era real... Simplemente hablaban de ellos... Pero, al cabo de horas ese genial mundo, comenzó a desaparecer... Todo, las plantas, los animales, los bancos... Todo desapareció en un instante. Todo empezó a enclarecerse... Eliseo comenzó a flotar y a desaparecer.
- ¡Eliseo! No me dejes, por favor...
- No te preocupes... Vendré todas las noches. Te contaré mis aventuras como espíritu, y, aunque esto sea un sueño, aunque no sea contacto real... Te esperare... No hay que tener prisa, mi vida... El tiempo y el destino hará que volvamos a estar juntos. Ahora nos ha dado la oportunidad de vernos en sueños... Y yo no voy a desperdiciarla... Todas las noches vendré a verte... ¡Recuerdalo!
- Lo recordaré Eliseo...La mujer tomó el rostro de Eliseo y lo besó para al instante desaparecer.
La muchacha abrió los ojos con la luz del sol... Comenzó a llorar... Solo un sueño...
En el escritorio un lápiz se elevó y se posó sobre un trozo de papel... La joven se acercó y pudo leer: «Mi vida no llores, que te estoy mirando.»
Aisha abrazó el papel y sonrió.- No lo haré, Eliseo, no lo haré.
Todas las noches ambos se encontraban en los sueños de la joven.
Con el paso de los años, este bello amor continuó. Finalmente ambos se reencontraron, despues dd la muerte. Un amor sin límites... Un amor entre una musa y un espíritu.
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La Musa Y El Espíritu [#Wattys2016][#PremiosTripleJ][#GAwards][#WrittingAwards]
RomansaDonde el amor sobrepasa la muerte... ----------------------- Inspirada en la canción «La Musa y el Espíritu» de Saurom