"Mucho tiempo sin verte preciosa" - dijo el hombre que me había hecho la vida imposible.
"..." - las palabras no salían de mi boca, me limitaba a mirarlo, no podía creer que el estuviera fuera... de la cárcel.
"¿Qué demonios haces aquí?" -preguntó Jasmin colocándose frente a mi de espaldas.
"Ugh, pensé que venías sola Alice" - dijo Bruce con desagrado hacia Jasmin.
"Vete" - logré decir.
"¿Qué? ¿Acaso no estás feliz de verme fuera de prisión?" - dijo acercándose hacia Jasmin.
"Aléjate de una vez" - le ordene, no lo quería cerca de mi entorno, ya era suficiente.
"Vamos hermosa, recordemos viejos momentos" - y me tomó del brazo, jalandome hacia el.
"¡Basta!" - le grité, traté de zafarme de su agarre, pero era mucho mas fuerte que yo.
Jasmin trataba de alejarlo, pero simplemente no podía, era de las chicas mas delicadas que conocí.
"Déjalas ya" - dijo una voz masculina.
"Tu no te metas" - dijo Bruce guiandome hacia la puerta de salida.
"¿Qué quiere de mi?" Logré formular en mi cabeza.
"Que la dejes te he dicho" - dijo el Justin dirigiéndole un puño hacia el cachete Izquierdo de Bruce.
Bruce automáticamente me soltó, y pude ver marcas rojas en mi brazo, me apretaba demasiado fuerte. Me frotaba el brazo, ya que dolía un poco. Bruce reaccionó ante el golpe y trató de darle un puñetazo, pero falló. Justin era más hábil, se notaba que ya había peleado en ocasiones pasadas.
Justin en un segundo se limitó a verme y Bruce se abalanzó y aprovechó a darle un puñetazo en la barbilla. No podía soportar la idea de que estaban peleando, alguien por defenderme, no lo podía permitir, podría pasar a mayores cuando se trataba de Bruce y no quería eso... otra vez, no.
Salté hacía Bruce, y con todo lo que podía y recordando como mi Padre me dijo que tendría que colocar el brazo y puño. Le dí un puñetazo en los testículos a Bruce.
"MALDITA PERRA" - gritaba Bruce mientras se retorcía y caía al suelo. Volteé a observar al hombre que nos había ayudado, una gota de sangre caía de su labio. Se levantó y me agarró de la mano.
Quedé aturdida, en shock, pasmada, o como quieran decirle, en ese momento... no me gustaba que me agarraran de la mano, la mayoría de veces me sentía incómoda y más si era de parte de un hombre.
"Vamos, antes de que pueda alcanzarnos" - dijo Justin. Jasmin me tomó de la mano suelta, y seguíamos al hombre que nos había ayudado.
"Le debes una" - me susurró Jasmin al oído.
"Ya lo sé" - le respondí en voz baja.
Llegamos al estacionamiento subterráneo y nos paramos frente a una camioneta negra.
"Este es mi auto, vengan, las llevaré a casa" - dijo el apuesto rubio de ojos miel.
"¿Acaso no estabas con tu novia? Agradecemos bastante tu ayuda contra el patán ese, pero tu noviecita insultó toda a mi amiga y tu no la defendiste, perdona pero tu novia es una desquiciada" -dijo Jasmin furiosa, jamás la había visto tan enojada por algo.
"No... no es mi novia" - dijo con la cabeza agachada.
"¿Qué has dicho?" - respondí algo alterada.
"Que no es mi novia, simplemente le hacía un favor, ella misma se dio el papel de novia, pero no es mi novia, ni siquiera mi amiga" - dijo recalcando lo anterior.
"De igual manera Jasmin, no era necesario que este... sujeto nos defendiera de alguien, menos de su novia, amiga o lo que sea" - dije viendo a Jasmin con ojos asesinos. Me las pagará esta tonta.
"Entonces, ¿no necesitaban de mi ayuda?" - dijo Justin ofendido - "Pues mira dulzura, me debes una, quieras o no, es de mi cobrartela" - dijo acercándose a mi más de lo normal.
Estaba a pocos centímetros de mi cara, un movimiento en falso y...
"¿No es lo que quieres?" preguntó mi Yo interior.
"Cállate, nunca ayudas en nada" respondí.
Retrocedí dos pasos.
"No le debo nada a nadie, yo te he salvado el pellejo, de no ser por mi y pegarle en sus ya sabes qué, te apaleaba a puñetazos" - avancé los dos pasos que deje atrás, y volvimos a los pocos centímetros.
"Ya lo veremos, dulzura" - dijo Justin viéndome con una mirada seductora.
Me estaba perdiendo... ¿que demonios me pasaba?. Jamás actuaba de esta manera, y menos amenazaba a un tipo.
Justin subió a su camioneta y salio del parqueo subterráneo, Jasmin y yo buscamos la salida y pedimos un taxi. Logramos llegar a casa, y nos despedimos.
Entre a casa, y dejé mis zapatos en la puerta, subí las escaleras a todo pulmón, y entre en mi cuarto, podía ver mi cama llorando por mi.
Me tiré sobre ella rendida, estaba más que cansada, jamás pensé que una loca me insultaria o que me encontraría con mi ex.
Tin tin tin.
El timbre de mi celular sonó, lo tomé y pude observar un mensaje nuevo de Jasmin.
De: Jasmin
Para: Alicia
<¿Estas bien después de todo?>De: Alicia
Para: Jasmin
<Si, gracias, no esperaba todo esto, pero la he pasado bien, buenas noches>Dejé el celular sobre la mesita de noche, y volví a acostarme, realmente estaba cansada.
Volvió a sonar el timbre del celular, seguro era Jasmin despidiendose o contándome algún chisme nuevo.
Tomé el celular, y abrí el mensaje.
De: Número Desconocido
Para: Alicia
<Buenas noches, dulzura>.-----------------------------------------------------------
Hay ¡SALSEOOOO!
Las/os aprecio!
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Perdida en tus ojos
RomanceUn cambio en la vida cotidiana de Alicia Collins, algo que ella jamás pensó que le iba a pasar. No era un cambio cualquiera, era mas que eso y lo tenía en claro. ¿Soportará este cambio y se abrirá hacia el mundo? ó ¿Seguirá su vida cotidiana?