Sabor A Ti [Sebastian Stan]

Capítulo 1. Aeropuerto

S: Que fastidio el de mi padrastro, comprometerme a tener que recogerla (T/N T/A)... desde niño con tan sólo escuchar ese nombre se me arruinaba el día completo!

Sebastian estaba vestido con unos jeans blancos playera gris y chamarra negra con blanco... el suspira, observando con aburrimiento como pasan las personas en el aeropuerto, mirando su reloj con frecuencia. En sólo una hora quedó de verse con una "amiga"... al pensar en ella, siente un punzaso de excitación y se le dibuja una sonrisa en el rostro.

-hola!

Dice una señora de edad avanzada. Ella se sienta y le sonríe, le faltaban unos cuantos dientes. Sebastian sintió como toda la sangre que se había acumulado en su miembro prácticamente corría de el.

-me imagino que vienes a recoger a tu novia, no?

S: *qué? No, no, no! Estará loca esta viejita! T/N novia mía??... esa niña inmadura, engreida y latosa?? Creo que primero me doy un tiro!* No, es sólo una amiga!

-ah perdón! Por esa carita que traes pensé que estabas feliz porque te ibas a reencontra con alguien muy querida.

S: *bueno en parte eso es verdad, pensaba en Serena y como disfrutaré esta noche! Su forma de besar, acariciar... es una experta en el placer, se sexo me enloquece! Es una amante apasionada y salvaje... jamás encontraré otra mujer así, capaz de encender mis más candentes deseos y llevarme a la cima del éxtasis*.

La señora le muestra una última sonrisa y se para a recibir a su familia.

S: maldita sea! Ya tengo aquí más de media hora! 10 años después y todavía logra esta niña colmarme la paciencia! -dice en voz baja.

El relaja su cuerpo en el sillón suspirando nuevamente del coraje. Hasta que su mirada se encuentra con un trasero bastante apetitoso. El endereza su cuerpo y observa con deseo... la mujer se encontraba de espaldas, esperando su equipaje. Estaba vestida como una sexy ejecutiva. La falda y la blusa que traía le quedaba ajustada abrazando perfectamente sus curvas. Su cabello largo y ondulado era color negro, el color y el grado del ardiente deseo con la cual Sebastian la miraba.

S: parece una diosa! Al diablo con T/N! Que se consiga un taxi! Yo a ella me la hecho!

El se acerca a ella y toma unos segundos para suspirar el aroma fresco de su cabello y de su cuerpo, antes de que ella pudiera voltearse, el le susurra en el odio...

S: hola preciosa!

-esa voz... Mmm ese olor.

Ella era bastante coqueta, aprovecha su belleza para dominar a los hombres y manejarlos a su antojo. Desde más o menos los 15 años se dio cuenta del poder que tenía sobre ellos, chicos y grandes. Cosa que le encanta! No es virgen pero tampoco se acuesta con cualquiera que se le crucé enfrente. Ella considera su cuerpo un templo. Y los únicos que tienen acceso a él, son aquellos quienes se lo merecen. De hecho sólo nada más han habido 2... un ex novio del pasado y su mejor amigo Luis.

Ella voltea sonriente... pero su sonrisa rápidamente se borra.

T/N: tú?

Sebastian la mira algo confundido, pues aún no la ha reconocido. Ella sonríe de nuevo.

T/N: *has cambiado bastante Sebastian!*

Ella lo mira de arriba a abajo.

T/N: *no estas nada mal!*

S: nos conocemos? *Dios, es hermosa quisiera arrancarle la ropa y devorarla completa!*

T/N: *con que no me reconoces! Sigues siendo el mismo idiota distraido de siempre! Tal vez pueda divertirme un poco!* Mmm... no sé, mi rostro se te hace conocido?

Pregunta con la voz seductora. Pero Sebastian tenía la atención enfocada en sus labios carnosos y deseables, luego hacia su pecho, que estaba medio descubierto pues ella no se abotono los primeros dos botones.

S: no... no creo!

Logra murmurar el sin quitar los ojos de su busto. Imaginandose con la cara perdida en ellos, saboreando cada rastro. T/N utiliza todas sus fuerzas para no echarse a reír. Ella acerca su cuerpo hacia el, rozando la cadera contra el creciente bulto de Sebastian, provocando que este suelte un leve gemido. ELA se acerca aún más. Sus labios a sólo centímetros y le susurra.

T/N: estas seguro... Sebby?

El se queda pasmado por unos segundos, con la boda y los ojos bien abiertos, luego se aleja rápidamente de ella. Mientras ella se reía a carcajadas.

S: T/N? *no puede ser T/N? Esta hermosa mujer no puede ser esa niña fastidiosa! Tiene que ser una broma!*

Al ver como ella se reía, todo ese deseo que le hervía y estremecia... se iba esfumando quedando únicamente coraje.

T/N: ay Stan! Que calenturiento me saliste!

Dice ella tratando de controlar la risa. Sebastian la agarra fuertemente, pegando su cuerpo de nuevo hacia el de ella.

S: te crees muy chistosa no?

Al sentir su cuerpo junto a ella, T/N siente un punsazo de excitación. También pudo sentir el bulto de Sebastian, que aún estaba algo firme. Ella le sonríe coquetamente y le da un leve rozó con su cuerpo.

T/N: estas más... grandecito!

Sebastian se aparta de ella.

S: por qué hiciste eso?

T/N: que no te gusto?

Dice acercándose a él y tomando su chamarra.

S: deja tu juego!

Dice molesto y alejándose de ella.
T/N: ay ya quita esa cara de yeso, que sólo fue una broma! No es para tanto!

Ella se voltea y empieza a caminar. Sebastian instintivamente mira su trasero, el cual ella movía seductoramente. El sacude las cabeza y reacciona.

S: adónde vas?

T/N: que te piensas quedar aquí todo el día?... mis maletas son esas dos!

Grita sin voltear y sigue su modelaje hacia la salida, provocándo que más de uno se quedará mirándola... incluyendo a Sebastian.

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