Perfect

Capítulo 6.

Liv.

James llegó con los helados y empezamos a hablar de cualquier cosa, el es un chico muy
relajado y tierno, es una de las cosas que me gusta de el.

Ya era tarde y estaba oscuro, seguíamos ahí en la heladería la cual estaba casi vacía. Recordé la pregunte que quería hacerle desde el principio.

- entonces, ¿por que no querías hablarme?

- Liv yo siento que no encajó en tu vida, me di cuenta de eso el día en que te conocí, ¿viste como me trato tu familia? ¿imaginas lo que pensarán tus amigos si te ven conmigo?

- ¿Crees que eso me importa? no llevamos mucho tiempo de conocernos y ya te considero alguien cercano, todas esas personas que se reúnen conmigo son superficiales no me gusta estar cerca de personas así, lo hago porque son mis compañeros, así que deja tu estupidez de querer alejarte de mi.

-De acuerdo.

-Bien ahora cuentame algo de ti ¿como es tu familia?

- Es algo complicado. Mi familia es solo mi hermana.

- ¿Que le pasó a tus padres?

-No me gustaría hablar de eso Liv, no me mal intérpretes, no es que no confíe en ti sino que hoy ha sido un día genial como para arruinarlo contando mi... "pasado oscuro" - hizo comillas con los dedos, yo reí.

- De acuerdo, tal vez para otra ocasión, ¿quieres ir a algún otro lugar?

- Si claro -

- Ya se donde vamos a ir - le dije.

Subimos al auto y mientras conducía el me hablaba de cosas como que le iba bien en la universidad, que de hecho es el mejor de la clase, el orgullo con el que lo dijo lo hizo ver adorable.

Cuando llegamos bajamos del auto para poder enseñarle mi lugar secreto.

-Wow es un lugar muy lindo, se ve toda la ciudad.

- Sip, vengo aquí para pensar o cuando estoy triste.

-¿Como lo descubriste?

-Cuando tenía unos 10 años me perdí, caminé y caminé hasta que llegue hasta aquí, dure horas sentada solo mirando luego decidí regresar por el mismo camino y mi hermano se encontraba allí, estaba desesperado buscándome.

- Tu hermano vive en Estados Unidos ¿verdad?

-Si, es empresario. Cuentame de tu hermanita ¿como se llama?

- Bella.

- James no quiero incomodarte pero cuando dijiste que tu hermana era tu única familia ¿a que te referías?

- Mis padres nos abandonaron, mamá se fue cuando tenía 13 y papá cuando tenía 15.

- Eso es horrible James, ambos los necesitaban y ellos solo se fueron.

- Bueno no los necesito a ninguno de los dos ya me acostumbre valerme por mi mismo - me dijo sonriendo - ¿y tus padres?

- Mamá murió cuando tenía 12.

- Lo siento mucho, no debí preguntar.

-Descuida, bueno papá es el señor "el trabajo es más importante que cualquier otra cosa" - hice comillas con los dedos y una mueca.

- Sabes mejor dejemos de hablar de esto.

-Sí, tienes razón.

- Entonces ¿como va tu vida amorosa? escuche que te atrae un chico muy guapo - me dijo en tono burlón.

- Esa fue Rachel ¿verdad? ¿no puede cerrar su estúpida boca? - el soltó una carcajada - Pero sabes algo yo también escuche lo mismo de ti - le dije sonriendo maliciosamente.

- De acuerdo sí. Rachel no sabe cerrar la boca.

Seguimos hablando y decidí desviar el tema.

- James ¿hace cuanto trabajas en ese lugar?

- Como tres años y ya estoy aburrido de eso, he pensado en renunciar y trabajar en algo que tenga que ver con lo que estoy estudiando.

- Si quieres yo te puedo ayudar con eso, puedo hablar con mi papá.

- De acuerdo pero todavía no estoy seguro de dejarlo.

- ¿Que vas a hacer mañana James? - le pregunte.

- En la mañana voy a ir a la universidad, y en la tarde nada ya que trabajo en la noche.

- Entonces ven a mi escuela, de ahí me acompañas a mi clase de ballet y el resto de la tarde hacemos algo ¿te parece? - le pregunte rogando que aceptara.

-De acuerdo - me dijo sonriendo - Creo que deberíamos irnos, ya es tarde.

- Tienes razón vamos - le dije.

El camino fue en silencio, James me indicó donde quedaba su casa que a diferencia de la mía quedaba en un barrio de clase media.

Cuando llegamos me quede observándola, es pequeña, sencilla y de color blanco con azul, es muy linda.

-Bueno aquí es - se desabrocho el cinturón de seguridad - me has animado el día Liv, gracias.

- Gracias a ti también James, creo que con otra persona no me hubiese sentido tan bien.

- Adiós Liv - me dio un beso en la mejilla.

- Adiós - Se bajó del auto.

Y de ahí emprendí el viaje a mi casa.