Prologo

68 5 0
                                    

Hace 4 años

-!Apúrate wey! Vas a perder tu vuelo.
- !Ya se! Iría más rápido si me ayudaras con una maleta.
- Deja de quejarte. El que se va eres tú no yo - doy la vuelta para ayudarle con una maleta, pero es demasiado tarde. Cuando lo veo está en el suelo con todas sus maletas desparramadas a sus lados.
No puedo evitar reír, y no paro de hacerlo hasta que el logra levantarse y me golpea fuertemente en el abdomen.
- Deja de reírte y ayúdame pendejo - se queja antes de que tome una maleta, y comience a caminar a su lado.
- ¿Te dolió la caída? - pregunté sarcástico.
- Idiota - comienzo a reír, y el también lo hace.
- Y bueno, no me haz dicho ¿qué sientes sobre irte a estudiar a Dinamarca?
- Estoy demasiado nervioso. Ni siquiera sé que idioma hablan -rueda los ojos -¿tú sabes? - pregunta mirándome fijamente.
- Por supuesto que no- respondo con obviedad.
- ¿Dinamarco?- niega con la cabeza-Aggg me quiero morir - se queja, y continúa caminado a paso veloz.
Se lo estresado que está. El ni siquiera quería irse, pero su madre lo obliga.
Va a regresar hasta dentro de 3 años, y eso sólo si regresa.
Lo voy a extrañar, es mi mejor amigo.
- Bueno llegamos - Mauricio suspira.
- Aquí me despido - estiro mi mano y el la mira desconcertado pero aún así la acepta - Adiós.
Me doy la media vuelta, y comienzo a caminar decidido hacia la salida o bueno eso intenté hago hasta que alguien toca mi hombro con fuerza, y determinación.
Me doy la vuelta, y me encuentro con Mauricio, y una ceja levantada.
- ¿De verdad? No nos vamos a volver a ver en toda la vida y ¿solo me das la mano? - se intenta dar la vuelta, pero lo detengo a tiempo y lo abrazo.
- Lo siento, es que si te abrazaba esto se volvería algo... pues... tú sabes...más real - lo abrazo un poco más fuerte- te voy a extrañar mucho wey- al final con todo el dolor lo dejo, y los ojos me comienzan a picar. Creo que voy a llorar. ¡Qué marica!
"No llores estupido" me dicta la conciencia.
Mauricio levanta la mano, la sacude en forma de despedida y se desvanece dejándome solo y al borde de las lagrimas.
Se ha ido.
Oficialmente, perdí a mi mejor amigo.

••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••
Este libro está escrito con la ayuda de
RocoLpezAguado

Dame tu amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora