¿Durmiendo juntos?

41 1 0
                                    

9:08.               DOMINGO

-Yo me voy- estoy enojado con Mauricio por haberme echo venir por una estupidez. Me doy la vuelta para marcharme pero una mano es me detiene.
-Espera Esteban no quería interrumpir algo interesante, pero no quería desaprovechar esta oportunidad de pasar una noche juntos- tenía la mirada sería pero no me puedo enojar con él.
- Esta bien me quedaré-me siento enfrente de la barra y él se sienta a mi lado para después pedir unos tragos- y bueno Mau ¿cuál te gusta?- le preguntó señalando a un grupo de chicas en un rincón.
-No lo sé, todas son sexys escoger es difícil.
-¿y si la que escoges no te quiere?
-¿Esteban sabes qué es lo bueno de ser yo?- levanto una ceja y abro los ojos y niego con la cabeza esperando una respuesta. Se toma un shot de tequila se levanta de donde está sentado y se aproxima a las chicas no sin antes decirme- Lo bueno de ser yo es que estoy para escoger, no para que el escojan- me guiña el ojo y va lentamente hacia una rubia exuberante de ojos azules y grandes senos.
¡Genial!  Primero no me deja ir y ahora él se va a coquetear con una linda chica mientras yo me quedo solo en la barra con el alcohol. Mientras estoy aquí analizando mi miserable vida siento que mi trasero comienza a vibrar, cuando lo saco veo el nombre de mi madre. Carajo. Ya noto que salí de casa sin permiso, ojalá que solo ella se haya dado cuanta, no quiero pensar que pasa si mi padre se entera.
-¿Bueno?- contestó temeroso
-!Mario Esteban Abellan! ¿Dónde carajo estás metido?- tengo que alejar un poco el teléfono de mi oído por lo alto que mi madre está gritando.
-Estoy...- dudo en que contestar- Estoy en el hotel de Mauricio- no mencionó el bar o Vanessa por qué no es necesario.
-¿Mauricio? ¿Que el no vivía en Dinamarca?
-Pues si, pero va a estar un tiempo en la ciudad de vacaciones.
-Por qué no le pregunta si quiere venir a la casa tiene mucho que no lo vemos tráelo- sorprendentemente su tono de molestia cambio a uno de alegría de modo drástico.
-No sé si pueda mama ¿no crees que ya es muy tarde?
-Bueno tienes razón- suspira decepcionada- tienes 15 minutos para llegar- vuelve a su voz autoritaria y cuelga.
Pienso en si despedirme o no de Mauricio, y después de pensármelo un rato decido no hacerlo por qué parece demasiado ocupado con la rubia por lo que salgo del lugar sin decir adiós.
Le doy el boleto de estacionamiento al del valet y espero que traigan mi auto. Llevo esperando unos 5 minutos y todavía no llega así que comienzo a desesperarme.
-¿Pensabas irte sin despedir?- un escalofrío recorre mi espalda por la sorpresa de escuchar su voz.
-Mauricio, creí que seguías con la rubia y no quería interrumpir- digo nervioso rascándome la cabeza.
-Esa rubia era demasiado fácil, y si es fácil no es divertido- da una media sonrisa- y ¿a dónde se supone que ibas?
- Mi mama me marco furiosa preguntando dónde estaba y cuando le dije que estaba contigo se alegró y me dijo que te invitara a la casa, pero cuando le dije que no podrías me dijo que tenía 15 minutos para llegar
-¿Y a ti quién te dijo que no podía ir?- dice levantando la ceja. Eso me tomó por sorpresa-Te acompañó- dice eso mientras me quita las llaves de mis manos y se sube al auto que hace menos de un minuto no está ahí.
Lo sigo y me siento en el asiento del copiloto.
-¿vives en la misma casa?
-Sip
Arranca el coche y emprende el camino a mí casa.

9:29.              DOMINGO

Aparcamos en la entrada de mi casa él es el primero en bajar del coche, toca la puerta y en menos de un minuto mi madre está saliendo por la puerta con una chancla y comienza a pegarle a Mauricio creyendo que soy yo.
-¡Rosaura tranquila soy yo Mauricio!- en ese momento mi madre paro de golpe y se sonrojó
-¡Mauricio!- se acercó a él y lo comenzó a abrazar- lo siento es que Esteban me dijo que no podías venir y no esperaba que fueras tú el que estuviera a fuera y estaba pegada a la puerta y ¿tú entiendes no?- se excusa y la abraza más fuerte, esto es algo tan extraño creo que ella lo ama más a él que a mí. Estoy viendo la escena de ellos abrazados y tengo que aclararme la garganta para que ellos se separen. Esto es incomodo.
-¡pasa Mau!- le dice mi mama entusiasmada haciéndolo pasar dejándonos solos un segundo-y tu yo  tendremos que hablar más tarde- dice eso y jala mi oreja para después pasar como si nada a la casa.

12:03.              LUNES

Estas han sido las dos horas treinta y dos minutos más largas de toda mi existencia y no dramatizo, de mi EXISTENCIA.
Mi mama no para de hablar de las cosas que pasaron mientras no estaba él y cuanto lo extrañaba y que cuando se iría y luego de eso comenzaron a hablar de temas aburridos por qué sorpresivamente mi mama estudio lo mismo que está estudiando Mauricio entonces llevan dos horas hablando del método más efectivo para controlar la esquizofrenia.
Y ¡oh sorpresa!, no entiendo un carajo de lo que hablan así que los ignoro hasta que algo llama mi atención.
-Pero siempre está la posibilidad de que Esteban duerma en el sofá o en el suelo por favor quédate es muy tarde para que regreses al hotel aparte no traes coche
-¿De qué hablan?- es la primera vez que interfiero en toda la noche
-Le estaba diciendo a Mauricio que debería quedarse a dormir aquí por qué no tiene auto el hotel está lejos y aparte tu cuarto es muy grande para que se quede
-Y yo le estaba diciendo Rosa que no es necesario que podía pedir un taxi
-Y yo no te estaba preguntando- dice arqueando una ceja satisfecha.
-Pero...-Mau empieza a replicar pero mi madre no lo deja terminar
-Pero nada tú te quedas a dormir y punto-dice mientras se levanta del sillón y toma de la mano a Mau para y lo lleva hasta mi cuarto.

12:27A.M.         DOMINGO

Mau y yo llegando a la conclusión de que ninguno quería dormir en el sillón o en el suelo así que como mi cama era muy grande dormiríamos ahí solo que con una gran, gran pero gran muralla de almohadas. Le preste una pijama y ya teníamos la luz apagada y todo listo para dormir.
-Buenas noches Mau- dije eso para después cerrar los ojos.
-No te duermas Esteban- escucho una voz del otro lado el muro de almohadas
-¿Por qué?-preguntó con una voz un poco adormilada
-Tengo algo más que contarte-intento abrir mis ojos un poco pero el sueño me está matando
-¿no puede esperar a mañana?
-No Esteban- dice quitando el muro del almohadas.

••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••
Este libro está escrito en colaboración de RocoLpezAguado

Dame tu amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora